La violencia pol¨ªtica toma las calles de Egipto
Seis personas han muerto y varios centenares han resultado heridas en disturbios callejeros protagonizados por seguidores y detractores del Gobierno islamista EE UU saca a parte de su personal diplom¨¢tico y pide a sus ciudadanos no viajar al pa¨ªs
Decenas de miles de personas salieron el viernes a las calles y plazas de las principales ciudades de Egipto para expresar su apoyo o bien su rechazo hacia el presidente Mohamed Morsi. El pa¨ªs ¨¢rabe vive d¨ªas de alta tensi¨®n en v¨ªsperas del primer aniversario de la investidura del rais islamista, que puso fin al periodo de transici¨®n pilotado por la Junta Militar. Este domingo es la fecha marcada por la oposici¨®n para lanzar una nueva ola revolucionaria con el objetivo de forzar la dimisi¨®n de Morsi.
Una vez m¨¢s, dos Egiptos con una visi¨®n radicalmente opuesta de su pa¨ªs vuelven a librar un pulso en la calle que amenaza con desencadenar un estallido de violencia, el en¨¦simo en una turbulenta transici¨®n iniciada tras la ca¨ªda de Hosni Mubarak en febrero del 2011. De hecho, la tensi¨®n ha ido en aumento durante toda la semana, sobre todo en las provincias del Delta del Nilo.
En concreto, los ¨²ltimos d¨ªas, han muerto seis personas y varios centenares han resultado heridas en disturbios callejeros protagonizados por seguidores y detractores de Morsi y su movimiento, los Hermanos Musulmanes. El viernes por la tarde, varias personas resultaron heridas en escaramuzas en Alejandr¨ªa, donde decenas de manifestantes asaltaron e incendiaron una sede de la cofrad¨ªa. En esta ciudad, un ciudadano estadounidense de 21 a?os fue apu?alado hasta la muerte durante las protestas, seg¨²n informaron fuentes m¨¦dicas y policiales a la agencia Reuters; el joven fue asaltado por la turba mientras tomaba im¨¢genes de las protestas con la c¨¢mara de su m¨®vil. La otra v¨ªctima mortal registrada este viernes en la ciudad mediterr¨¢nea fue un ciudadano egipcio partidario del presidente Morsi.
El Departamento de Estado norteamericano anunci¨® hoy la salida de Egipto de parte de su personal diplom¨¢tico y consular y sus familias, "por los problemas pol¨ªticos y sociales que est¨¢n teniendo lugar" en el pa¨ªs. Asimismo, pidi¨® a sus ciudadanos que aplacen los viajes "no esenciales" a Egipto.
En El Cairo, los islamistas se han congregado frente a la mezquita de Rab¨¢ al Audawiya. Como ya hicieron la semana pasada en este mismo escenario, la multitudinaria manifestaci¨®n representa una nueva demostraci¨®n de fuerza y de la capacidad de movilizaci¨®n de la Hermandad, pues muchos de los asistentes han venido de fuera de la capital.
Washington retira a parte de su personal diplom¨¢tico y pide a los ciudadanos que aplacen los viajes "no esenciales"
Entre canciones patri¨®ticas y fotos de sus m¨¢rtires, carteles que apelan a la legitimidad democr¨¢tica del presidente, definida como ¡°una l¨ªnea roja¡±. ¡°Tenemos una Constituci¨®n, y un presidente electo en las urnas. La oposici¨®n debe atenerse a las normas democr¨¢ticas y esperar tres a?os si quiere cambiar de presidente¡±, sostiene Hamza Zawba, un alto responsable del Partido de la Libertad y la Justicia, el brazo pol¨ªtico de la Hermandad.
La m¨ªtica Plaza Tahrir es el punto de encuentro del otro Egipto, mayoritariamente laico y hastiado por los intentos de la Hermandad de controlar todos los resortes de poder del Estado. El viernes son menos que sus adversarios, pero para ellos esto es s¨®lo un calentamiento antes del d¨ªa 30. La movilizaci¨®n la ha liderado Tamarrud, un grupo de j¨®venes revolucionarios que asegura haber recogido m¨¢s de 15 millones de firmas en favor de ¡°retirar la confianza a Morsi¡± y de forzar la celebraci¨®n de elecciones anticipadas.
Tamarrud ha contado con el apoyo de los principales partidos laicos, como el Dustur de Mohamed al Baradei, y de organizaciones revolucionarias ya consolidadas, como el Movimiento del 6 de Abril. Agrupados bajo la plataforma del ¡°30 de junio¡±, el jueves presentaron su hoja de ruta, que pasa por volver a situar la transici¨®n egipcia a su casilla de salida: formaci¨®n de un gobierno interino de tecn¨®cratas, disoluci¨®n del Senado, controlado por los islamistas, y formaci¨®n de un comit¨¦ de sabios que redacte una nueva Constituci¨®n antes de la celebraci¨®n de elecciones.
La determinaci¨®n de la oposici¨®n aument¨® el mi¨¦rcoles, despu¨¦s del mensaje de casi tres horas que el presidente Morsi lanz¨® a la naci¨®n. Si bien reconoci¨® ¡°haber cometido errores¡±, el presidente mostr¨® una actitud desafiante, destinada a movilizar a sus bases. ¡°Asum¨ª la responsabilidad en un pa¨ªs sumido en la corrupci¨®n, y me he enfrentado a una guerra para hacerme fracasar¡±, dijo el rais, que intent¨® deslegitimar a sus adversarios vincul¨¢ndolos al r¨¦gimen de Mubarak.
Ante la creciente hostilidad que se dispensan ambos bandos, las principales instituciones independientes del pa¨ªs han hecho sonar las se?ales de alarma. La Universidad de Al-Azhar, la principal instituci¨®n del Islam sun¨ª en la regi¨®n, llam¨® a la moderaci¨®n ante el riesgo que ¡°el pa¨ªs se deslice hacia una guerra civil¡±. Igualmente, a principios de semana, el ministro de Defensa, Abdelfattah al-Sissi, inst¨® a los pol¨ªticos a alcanzar un acuerdo, y advirti¨® que el ej¨¦rcito no se quedar¨¢ de brazos cruzados si la naci¨®n cae ¡°en un oscuro t¨²nel de conflicto¡±.
Seg¨²n los analistas, las Fuerzas Armadas y Estados Unidos pueden desempe?ar un rol decisivo en caso de una escalada del conflicto pol¨ªtico. En anteriores protestas, ambos actores han apuntalado la legitimidad del rais. Sin embargo, tras sus intentos infructuosos de mediar entre las partes durante los ¨²ltimos d¨ªas, algunas filtraciones en la prensa local apuntan a un viraje en sus posiciones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.