PAN y PRD propinan un descalabro mayor al PRI en Baja California
Fracasa el partido del presidente Pe?a Nieto en el intento por reconquistar el Estado en donde en 1989 comenzaron sus grandes derrotas
Enrique Pe?a Nieto ha sufrido este domingo una de sus derrotas m¨¢s oportunas. Los principales aliados del mandatario en el Pacto por M¨¦xico se han alzado con una victoria electoral que fortalece la posibilidad de que esa agenda de reformas siga su curso. El partido del presidente mexicano no pudo reconquistar Baja California, con gobierno panista desde 1989, pero por sus implicaciones eso est¨¢ lejos de ser una p¨¦sima noticia para el gobernante, que lleva apenas siete meses en la presidencia.
Baja California tiene un poder magn¨¦tico en la democracia mexicana. El Estado, en el extremo del noroeste del pa¨ªs, fue el primero que arrebat¨® la oposici¨®n al Partido Revolucionario Institucional. Este domingo estaba en juego aqu¨ª mucho m¨¢s que la ¨²nica gubernatura incluida en las elecciones con las que tambi¨¦n se renovar¨ªan 931 alcald¨ªas y 442 esca?os locales en 14 Estados, procesos en los que todas las fuerzas pol¨ªticas han reclamado triunfos importantes, y de todos ellos el PRI el que m¨¢s.
El Partido Acci¨®n Nacional (PAN, derecha) y el de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD, izquierda) postularon a Francisco Kiko Vega (Ciudad Obreg¨®n, 1955) en una coalici¨®n denominada Unidos por Baja California y que inclu¨ªa al partido Nueva Alianza, de la defenestrada l¨ªder magisterial Elba Esther Gordillo. Luego de una campa?a electoral marcada por ataques de lodo, el exalcalde de Tijuana llevaba al amanecer de este lunes (hora de M¨¦xico) una ventaja de tres puntos porcentuales sobre el pri¨ªsta Fernando Castro Trenti, postulado por la coalici¨®n Compromiso por Baja California, en el recuento preliminar de actas electorales.
El triunfo bajacaliforniano de la oposici¨®n representar¨ªa la primera gran derrota del PRI desde que en enero de 2011 perdieran la gubernatura de Guerrero. Desde entonces, de la mano de Pe?a Nieto se hizo de la presidencia de la Rep¨²blica, de dos Estados m¨¢s ¨CChiapas y Jalisco¡ª y de la primera mayor¨ªa en ambas c¨¢maras del Congreso.
El PRI a¨²n debe digerir la derrota y reconocerla p¨²blicamente. Ser¨¢ un trago amargo luego de que la tarde del domingo, C¨¦sar Camacho Quiroz, presidente nacional pri¨ªsta, declar¨® fuera de toda duda el triunfo de su candidato en un auditorio que rompi¨® en aplausos y en donde pronto se oy¨® a mariachis entonar c¨¢nticos de triunfo. Camacho Quiroz incluso evoc¨® la memoria de Luis Donaldo Colosio, quien como l¨ªder nacional tricolor reconoci¨® la hist¨®rica derrota de 1989, para exigir a sus contrincantes un gesto similar al que en su momento tuvo quien luego como candidato presidencial fuera asesinado en esta ciudad en marzo de 1994.
La respuesta de Gustavo Madero, l¨ªder nacional panista, y quien tambi¨¦n se desplaz¨® este domingo hasta esta poblaci¨®n, fue tambi¨¦n proclamar el triunfo de su coalici¨®n. La rueda de prensa del presidente del PAN fue menos emotiva, llena de quejas por la actuaci¨®n del ¨¢rbitro electoral y por supuestas malas pr¨¢cticas de los pri¨ªstas. En esa comparecencia ante los medios, no estuvo el candidato ni mucho menos hubo festejo adelantado. Pero esa cautela se convirti¨® en jolgorio dos horas m¨¢s tarde, cuando arrib¨® procedente de la ciudad de M¨¦xico el jefe nacional del PRD, Jes¨²s Zambrano y juntos proclamaron la victoria de Kiko Vega. ¡°Los mariachis callaron¡±, declar¨® el perredista para mofarse del PRI.
Las razones para festejar de Madero y Zambrano rebasan las fronteras de Baja California. Ambos se jugaban en estas elecciones la viabilidad de su liderazgo en sus respectivos partidos. La alianza que decidieron firmar en diciembre con Pe?a Nieto en el Pacto por M¨¦xico despert¨® agrias cr¨ªticas dentro de importantes sectores de PAN y PRD. Uno de los cuestionamientos m¨¢s fuertes era que apoyar al gobierno federal impedir¨ªa ganar elecciones. Seg¨²n esa l¨®gica, Pe?a Nieto se har¨ªa de todo el cr¨¦dito del impulso de esa agenda de reformas, lo que la aceitada maquinaria electoral pri¨ªsta se encargar¨ªa de traducir en triunfos en los comicios.
Zambrano, un exguerrillero, y Madero, de hist¨®rico linaje empresarial y sobrino nieto del pr¨®cer de la revoluci¨®n de 1910, probaron que esta alianza del agua y el aceite con el gobierno pe?ista no les resta poder electoral.
Toca al partido del presidente mexicano reconocer su desventaja en este Estado. Sin embargo, hasta en la derrota se le alinean las estrellas a Pe?a Nieto. Sus socios en la oposici¨®n han salvado la cara y el PRI que perdi¨® en Baja California es el de Manlio Fabio Beltrones, padrino de Castro Trenti y uno de los hombres m¨¢s poderosos antes de que el presidente se hiciera del partido y de la silla presidencial. De cualquier manera, el PRI ha reclamado que hay que esperar al recuento oficial de los votos, que comienza el mi¨¦rcoles, y no dar por bueno el recuento premilinar, conocido como PREP (Programa de Resultados Electorales Preliminiares), que hasta esta ma?ana les dejaba fuera de toda posibilidad de triunfo. Los priistas, en Baja California, afirman que el instrumento fall¨®, a pesar de ser una operaci¨®n que se prueba sin problemas en todas las elecciones en este pa¨ªs a?o con a?o.
Otro ganador de la jornada apenas se dej¨® ver este domingo. Es el empresario Jorge Hank Rhon, due?o del emporio de apuestas Grupo Caliente, pri¨ªsta desde la cuna y marginado de la candidatura, que ya tuvo hace seis a?os, por su pasado que incluye acusaciones de involucramiento en el asesinato de un periodista y una detenci¨®n por acopio de armas. Hank, el hombre fuerte del PRI en esta ciudad que concentra m¨¢s del 50% del padr¨®n electoral estatal, resisti¨® todo lo que pudo la designaci¨®n de Castro Trenti como candidato.
En las horas que siguen se conocer¨¢n los eventos cruciales que dieron la ventaja al candidato panista, que lleg¨® a estar 15 puntos abajo del PRI en las encuestas. Las primeras pistas apuntan a que mientras Vega es un tipo afable, el adusto Castro Trenti nunca conect¨® con los electores. El PAN, adem¨¢s, ya sin el poder presidencial habr¨ªa mostrado a nivel local la unidad que no ha encontrado en meses de rumiar la derrota mayor del a?o pasado, elecciones en las que termin¨® en tercer lugar nacional.
Aunque su estructura en el Estado es menor, el PRD reclama haber dado a sus socios panistas el impulso que necesitaban para marcar una diferencia. Ambos, adem¨¢s, reafirman el modelo aliancista que ya en 2010 les hab¨ªa dado la victoria en Puebla, Sinaloa y Oaxaca.
Y finalmente quedar¨¢ claro que en Tijuana, que seguir¨¢ en manos de pri¨ªstas, los electores apoyaron al PRI en la alcald¨ªa pero dieron tambi¨¦n m¨¢s votos a la coalici¨®n de PAN y PRD en la lucha por la gubernatura, todo eso en un escenario en donde solo voto el 39,4% del padr¨®n electoral.
Pero distintos observadores recordaban anoche un momento clave de la campa?a. En el ¨²nico debate entre los candidatos, cuando Castro Trenti presum¨ªa supuestos m¨¦ritos de la democracia interna de su partido, Kiko Vega revir¨® diciendo que ¡°ni los pr¨ªistas¡± de Baja California lo quer¨ªan, porque si su partido hubiera realizado un ejercicio democr¨¢tico para elegir candidato, el que estar¨ªa aqu¨ª debatiendo ¡°ser¨ªa el ingeniero Hank Rhon¡±.
En cualquier caso, Baja California confirm¨® una vez m¨¢s que la democracia mexicana siempre elige esta esquina del pa¨ªs para impartir lecciones.
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