El Gobierno de Obama apoya a Argentina en el Tribunal Supremo de EE UU

El Gobierno de Barack Obama alterna los acercamientos y los distanciamientos respecto al de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, seg¨²n lo que ella vaya haciendo. Esta vez, el Ejecutivo norteamericano la apoy¨®. Fue en un juicio en el Tribunal Supremo de EE UU por una demanda del grupo minoritario de acreedores que litiga contra el pa¨ªs sudamericano para develar d¨®nde tiene este activos embargables. Un representante del Gobierno de Obama respald¨® la posici¨®n de Argentina, que defend¨ªa que no corresponde dar esa informaci¨®n porque se trata de bienes protegidos por la inmunidad soberana y que, adem¨¢s, muchos de ellos se encuentran fuera del territorio estadounidense.

La historia comienza con la mayor suspensi¨®n de pagos de un pa¨ªs en la historia - en 2001 - cuando Argentina dej¨® de abonar en plena crisis una deuda superior a los 80.000 millones de d¨®lares. En 2002, diversos propietarios de t¨ªtulos p¨²blicos argentinos comenzaron a litigar en EE UU y otros pa¨ªses donde se hab¨ªan emitido. En 2005 y 2010, el 93% de los acreedores acept¨® canjear la deuda por bonos que supusieron una quita respecto de la original. Pero el 7% restante sigue litigando, mientras que el Gobierno de Fern¨¢ndez a¨²n no ha puesto en pr¨¢ctica la ley ya votada para la apertura del canje por tercera vez.

La campa?a judicial est¨¢ encabezada por los llamados fondos buitre. Estos se encargan de comprar en rebajas bonos de pa¨ªses y empresas que est¨¢n cerca de la bancarrota para despu¨¦s rechazar las reestructuraciones e intentar el cobro del 100% de lo adeudado en los tribunales o en acuerdos extrajudiciales.

Este lunes, los nueve magistrados del Tribunal Supremo de EE UU escucharon en una sesi¨®n al abogado representante del fondo buitre NML, que pide al Bank of America y al estatal Banco de la Naci¨®n Argentina que desvelen d¨®nde hay activos embargables del pa¨ªs sudamericano en todo el mundo. Un fallo de primera instancia y otro de segunda en EE UU ordenaron a Buenos Aires que cumpliera con la petici¨®n del acreedor. El Tribunal Supremo norteamericano acept¨® discutir la cuesti¨®n, lo que fue celebrado por Argentina, dado que la mayor¨ªa de los casos no suele llegar a debatirse en la m¨¢xima instancia de la justicia de la superpotencia. El Gobierno de Fern¨¢ndez sostiene que sus activos se encuentran protegidos por la inmunidad soberana. Algunos de los magistrados del Tribunal Supremo de EE UU reconocieron este lunes que los bienes militares y diplom¨¢ticos deb¨ªan mantenerse protegidos, mientras que otros admitieron que no se pod¨ªa disponer sobre activos fuera del pa¨ªs. Pero la resoluci¨®n del tribunal solo se conocer¨¢ en unos meses.

El Gobierno de Fern¨¢ndez sostiene que sus activos se encuentran protegidos por la inmunidad soberana

En esta ocasi¨®n, la noticia estuvo en el apoyo del Gobierno de Obama a la tesis de Argentina. En los juicios de los fondos buitres contra el pa¨ªs sudamericano en EE UU, la administraci¨®n dem¨®crata hab¨ªa sostenido ya alguna vez la posici¨®n argentina, no por apoyar a Fern¨¢ndez sino para evitar que se sentara un precedente en contra de futuras reestructuraciones de deuda de otros pa¨ªses. Es decir, para impedir que los fondos buitres hicieran caer canjes de t¨ªtulos p¨²blicos.

Pero el a?o pasado, el Gobierno de Obama cambi¨® el apoyo por el silencio, como modo de presionar a Argentina para que comenzase a pagar sus deudas a empresas norteamericanas que hab¨ªan ganado en juicios internacionales. Buenos Aires reaccion¨®, acord¨® esos pagos y, en 2014, inici¨® un giro econ¨®mico que ha merecido el elogio de funcionarios del Gobierno de EE UU. Quiz¨¢s en ese contexto se pueda entender lo que sucedi¨® este lunes en el Tribunal Supremo norteamericano.

El representante del Ejecutivo de EE UU en el juicio, Edwin Kneedler, defendi¨® a Argentina al sostener que la petici¨®n de informaci¨®n de NML a los bancos violaba la ley de inmunidades extranjeras. Reconoci¨® ¡°preocupaci¨®n¡± por los fallos a favor del fondo buitre por el impacto que podr¨ªan tener en ¡°otras ¨¢reas¡±, sin especificar cu¨¢les.

El juicio de este lunes es uno complementario de otra causa m¨¢s importante por la que NML y otros acreedores demandan a Argentina por el pago de 1.300 millones de d¨®lares. Este caso ya recibi¨® dos fallos favorables a los demandantes y puede obligar a Argentina a caer en suspensi¨®n de pagos. No es que el pa¨ªs sudamericano carezca de ese dinero sino que un juez y un tribunal de apelaciones de EE UU han determinado que no podr¨¢ seguir pagando sus deudas a los acreedores que canjearon sus tenencias en 2005 y 2010 hasta que no se abonen esos 1.300 millones.

Argentina se niega a privilegiar a los litigantes pag¨¢ndoles el 100% de lo demandado cuando la inmensa mayor¨ªa de los bonistas acept¨® quitas de hasta la mitad del valor de la deuda original. Por eso es que caer¨ªa en suspensi¨®n de pagos de la deuda regularizada, a menos que cambie de posici¨®n. Pero antes de que eso suceda, el Gobierno de Fern¨¢ndez ha apelado tambi¨¦n en este juicio al Tribunal Supremo de EE UU, que a¨²n no ha determinado si lo analizar¨¢.

Francia, M¨¦xico y Brasil se han presentado en esta causa como amigos de Argentina porque consideran que tambi¨¦n puede sentar un mal precedente para otras reestructuraciones de deuda. El Gobierno de EE UU a¨²n no lo ha hecho.

Si el Tribunal Supremo norteamericano rechaza adentrarse en esta otra discusi¨®n, entonces quedar¨¢n ratificados los fallos que obligan a Argentina a pagarles primero a los litigantes y despu¨¦s a los que aceptaron los canjes. Entonces, Buenos Aires se enfrentar¨¢ al dilema de ceder ante los fondos buitres o declararse en suspensi¨®n de pagos.

Pero si el m¨¢ximo tribunal de EE UU acepta el caso, Argentina ganar¨¢ m¨¢s tiempo. Despu¨¦s, sobrevendr¨ªa el fallo definitivo a favor de los fondos buitres o de Buenos Aires, que sostiene que la cl¨¢usula de igualdad de trato a los acreedores - que estaba presente en los t¨ªtulos originales - implica que todos reciban el mismo dinero en caso de una reestructuraci¨®n aceptada por la inmensa mayor¨ªa de ellos.