Un reconocimiento t¨¢cito

La visita del papa Francisco a Tierra Santa fue pensada como un peregrinaje para marcar los 50 a?os de la reuni¨®n hist¨®rica entre el papa Pablo VI y el patriarca de Constantinopla en Jerusal¨¦n. Sin embargo debi¨® cambiar: era muy dif¨ªcil tener una visita a la zona sin pasar por el protocolo de rigor. La diplomacia vaticana pens¨® muy bien cu¨¢les ser¨ªan los gestos en funci¨®n de la ac¨¦rrima posici¨®n del Vaticano sobre la paz, la justicia y la tolerancia. Todo eso, junto al toque personal tan particular del Papa, ha llevado a un programa muy corto en tiempo, pero muy simb¨®lico.

Desde Jordania, el Papa se desplazar¨¢ en helic¨®ptero hacia Bel¨¦n sin pasar por ning¨²n control israel¨ª. Eso debe ser considerado como un reconocimiento t¨¢cito por parte de la Santa Sede del Estado de Palestina. Desde el aire, el Papa podr¨¢ apreciar las 22 colonias israel¨ªes junto al Muro que asfixian a Bel¨¦n y la separan de Jerusal¨¦n. La posici¨®n del Vaticano al respecto es muy clara, con el papa Juan Pablo II llamando a la construcci¨®n de puentes m¨¢s que de muros en Tierra Santa y el papa Benedicto XVI se?alando que el muro debe caer.

En su visita a Palestina el Papa debe tener la posibilidad de ver a la comunidad cristiana m¨¢s antigua del mundo

En su visita a Palestina el Papa debe tener la posibilidad de ver a la comunidad cristiana m¨¢s antigua del mundo. Seg¨²n su programa, debe reunirse con distintos grupos de personas, tanto de forma protocolaria, como con los jefes de Estado y los jefes de las Iglesias, pero tambi¨¦n con quienes ¨¦l ha pedido visitar, como un grupo de refugiados, principalmente de Siria, en Jordania y un grupo de j¨®venes discapacitados. Tras celebrar una misa ante miles de palestinos cristianos de Palestina y de Israel, almorzar¨¢ con cinco familias cristianas que, sin ning¨²n intermediario, han de presentarle los problemas diarios de los palestinos cristianos, incluyendo la construcci¨®n de colonias, separaci¨®n de familias, discriminaci¨®n contra los palestinos ciudadanos de Israel, encarcelamientos y la construcci¨®n del muro en Cremisan.

El papa Francisco debe dedicar tiempo al drama de los refugiados palestinos a trav¨¦s de una actividad en el campamento de Dheisheh, donde se reunir¨¢ con ni?os de varios campamentos.

El Vaticano ha hecho todo para que esta visita sea lo m¨¢s cercana posible a la gente. Ha de ratificar la idea de que la Iglesia est¨¢ para servir m¨¢s que para recibir. Ha de impulsar el di¨¢logo interreligioso tanto con musulmanes como con jud¨ªos. Y tambi¨¦n, ratificar que ante la injusticia no existen t¨¦rminos medios. En el caso de Palestina ¡ªdonde no son ni una ¡°minor¨ªa¡± protegida por Israel ni un grupo en medio de los musulmanes y los jud¨ªos¡ª, los cristianos son una parte integral del pueblo palestino que ha sufrido los mismos vaivenes, cuya soluci¨®n es una de las prioridades en la agenda exterior del Vaticano.

Lamentablemente, toda la alegr¨ªa que tendremos en las calles de Bel¨¦n, no podr¨¢ ser repetida en Jerusal¨¦n Este

Lamentablemente, toda la alegr¨ªa que tendremos en las calles de Bel¨¦n, no podr¨¢ ser repetida en Jerusal¨¦n Este, ocupada por Israel desde 1967. Israel ya ha adelantado cerrar¨¢ las calles y que el barrio cristiano de la ciudad antigua ser¨¢ sometido pr¨¢cticamente a toque de queda. Nos oponemos tajantemente a esa pol¨ªtica. Los cristianos de Jerusal¨¦n se quedar¨¢n sin ver al Papa debido a la ocupaci¨®n israel¨ª.

Hace un par de semanas, el primer ministro Netanyahu se?al¨® que esta tierra es solo para el pueblo jud¨ªo. Esa idea de exclusividad atenta contra la identidad de esta tierra sagrada para tres religiones y es donde viven dos naciones. La consecuencia de esa ¡°exclusividad¡± son los ataques contra lugares sagrados cristianos y musulmanes desarrollados bajo total impunidad. En ese contexto, el papa Francisco ha de recordar que solo el di¨¢logo, la tolerancia y la justicia pueden llevar a una soluci¨®n.

Al final el Papa ha de juntarse con el Patriarca de Constantinopla, pero su visita dar¨¢ mucho m¨¢s que hablar.

Jamal Khader es sacerdote y rector del Seminario del Patriarcado Latino de Jerusal¨¦n y Portavoz para la visita del Papa Francisco a Palestina.