Los euroesc¨¦pticos de Cameron son la tercera fuerza en la Euroc¨¢mara

El grupo euroesc¨¦ptico del l¨ªder brit¨¢nico David Cameron ser¨¢ por primera vez la tercera fuerza en el Parlamento Europeo, por detr¨¢s del Partido Popular y de los socialdem¨®cratas. La decisi¨®n de los nacionalistas flamencos de sumarse a los Conservadores y Reformistas Europeos refuerza a este colectivo, en detrimento de los liberales, que ahora quedan relegados a la cuarta plaza. La subida de esca?os del grupo liderado por los tories incrementa su influencia en la escena europea porque mejoran su financiaci¨®n, la presencia en comisiones parlamentarias y el uso de la palabra en la Euroc¨¢mara.

Los llamados conservadores y reformistas han logrado esta pujanza ¡ª68 diputados, frente a los 57 de la anterior legislatura¡ª con una adhesi¨®n poco coherente desde el punto de vista pol¨ªtico. Por falta de entendimiento con el l¨ªder de los liberales en la Euroc¨¢mara, el belga Guy Verhofstadt, los nacionalistas flamencos de la N-VA, el partido m¨¢s votado en B¨¦lgica y poco sospechoso de euroescepticismo, han optado por un grupo compuesto por formaciones contrarias a la ampliaci¨®n de las competencias europeas. Adem¨¢s de los tories brit¨¢nicos, que se escindieron del Partido Popular Europeo y formaron su propio grupo en 2009, integran este grupo los ultraconservadores polacos y, en esta legislatura, el partido alem¨¢n antieuro Alternativa por Alemania.

Aunque no existe disciplina de voto en el Parlamento Europeo, los grupos suelen coincidir en la mayor parte de las votaciones. En el caso de los conservadores y reformistas, la disciplina en la legislatura pasada alcanz¨® el 86,6% de los casos, seg¨²n datos de Votewatch Europe, una organizaci¨®n que promueve la transparencia en las instituciones comunitarias. Adem¨¢s, los grupos pol¨ªticos fijan una posici¨®n para intervenir en los debates de la Euroc¨¢mara, una situaci¨®n que puede resultar inc¨®moda para los cuatro eurodiputados flamencos, que no compartir¨¢n muchos de los postulados que defienden los conservadores de Cameron. En su declaraci¨®n de intenciones, esta formaci¨®n aboga por llevar a Europa a ¡°una nueva direcci¨®n¡± que pase por devolver a los Estados miembros muchas de las competencias que ahora recaen en las instituciones comunitarias.

Conscientes de esas contradicciones, los flamencos han difundido un comunicado en el que aseguran: ¡°Si los partidos que componen los Conservadores y Reformistas Europeos toman una posici¨®n que no compartimos, nos distanciaremos inequ¨ªvocamente de ella¡±. La N-VA justifica su adhesi¨®n a este grupo m¨¢s por oposici¨®n a Verhofstadt que por simpat¨ªas hacia sus nuevos socios: ¡°El federalismo europeo voluntarista de Guy Verhofstadt y del grupo liberal nos resulta dif¨ªcil de digerir¡±.

Las nuevas alianzas consagran la gran paradoja de que los nacionalistas flamencos ¡ªen cuyo ideario est¨¢ la independencia de Flandes, la regi¨®n m¨¢s rica de B¨¦lgica, aunque por falta de apoyo aparcan de momento esta reivindicaci¨®n¡ª compartan grupo con los tories brit¨¢nicos, que apuestan por mantener a Escocia en Reino Unido. Fuentes parlamentarias apuntan a que en la N-VA ha podido pesar la postura brit¨¢nica favorable al refer¨¦ndum escoc¨¦s.

El ascenso de este movimiento supone tambi¨¦n una amarga derrota para los liberales europeos, que pasan a quedarse un esca?o por debajo de los euroesc¨¦pticos, con 67 puestos. Pese a todo, la m¨ªnima distancia que los separa podr¨ªa provocar un cambio en la correlaci¨®n de fuerzas en cualquier momento, si los liberales logran atraerse un diputado de los conservadores o si consiguen al menos dos de cualquier otro grupo.