Sarkozy vuelve a la pol¨ªtica

Sarkozy vuelve a la pol¨ªtica. En principio, para liderar su partido, la UMP (Uni¨®n por un Movimiento Popular), de centroderecha, pero con la vista puesta en las presidenciales de 2017. En 2012, tras perder frente a Fran?ois Hollande, se retir¨® de la vida p¨²blica. Ahora, el hiperactivo y pol¨¦mico expresidente de la Rep¨²blica Francesa (2007-2012), regresa en plena catarsis del pa¨ªs por la crisis pol¨ªtica y econ¨®mica.

A media tarde, y a trav¨¦s de su cuenta en Facebook, anunci¨® este viernes el regreso, despejando las pocas dudas que restaban al respecto. Acorralado en los tribunales por media docena de casos de corrupci¨®n, su retorno acrecienta las divisiones que despierta en la ciudadan¨ªa, pero puede ser la tabla de salvaci¨®n de la UMP, arruinada y descabezada. El anuncio dispara la carrera para la campa?a electoral de 2017.

El posible regreso de Nicolas Sarkozy se convirti¨® en m¨¢s que probable el 2 de julio pasado, cuando en una entrevista televisada y tras su detenci¨®n e imputaci¨®n por uno de los casos de corrupci¨®n que le persiguen, dej¨® la puerta abierta al retorno, mostr¨¢ndose preocupado por la inquietud que aqueja a los franceses. El comunicado de ayer es largo y expl¨ªcito. Se propone como candidato a la presidencia de su ¡°familia pol¨ªtica¡± y promete una renovaci¨®n total para poder presentar a los franceses una alternativa cre¨ªble. ¡°Voy a proponer una transformaci¨®n a fondo [de la UMP]¡±, dice el comunicado, ¡°para crear, en un plazo de tres meses, las condiciones necesarias de un nuevo y vasto reencuentro de todos los franceses, sin esp¨ªritu partidista¡±.

En las ¨²ltimas semanas, sus pr¨®ximos han comentado que la idea de Sarkozy es unir fuerzas con la Uni¨®n de Dem¨®cratas e Independientes (UDI), que hoy tiene 30 esca?os en la Asamblea, para formar una gran fuerza de centroderecha para 2017 incluso rebautizada.

En el comunicado de ayer, el expresidente dice haber palpado durante todo este tiempo el creciente desapego de los franceses hacia la pol¨ªtica y la ¡°ausencia de toda esperanza¡± en la poblaci¨®n. No cita las elecciones presidenciales de 2017, pero su comunicado rezuma esa ambici¨®n que sus pr¨®ximos ya hab¨ªan dado por hecha. ¡°Despu¨¦s de una profunda reflexi¨®n¡±, explica, ¡°he decidido proponer a los franceses una nueva oportunidad pol¨ªtica. Ser¨ªa una forma de abandono quedar como espectador de la situaci¨®n en la que se encuentra Francia¡±.

El jueves, Fran?ois Hollande evit¨® presentarse como candidato para 2017 y recib¨ªa con elegancia el probable retorno de su antiguo rival: ¡°Los que gobernaron el pa¨ªs ayer y anteayer est¨¢n en su perfecto derecho de querer dirigirlo ma?ana o pasado ma?ana¡±.

Pero Hollande no ser¨¢, probablemente, el ¨²nico obst¨¢culo en la carrera de Sarkozy hacia el Palacio del El¨ªseo. Adem¨¢s de los casos de corrupci¨®n que le acorralan, la batalla por el poder en el seno de la UMP promete dificultarle el camino. Su principal adversario interno es Alain Jupp¨¦, exprimer ministro, que ya ha comunicado que ser¨¢ candidato presidencial en 2017.

La UMP, principal partido de la oposici¨®n (199 de 577 esca?os en la Asamblea), arrastra una deuda de 80 millones de euros y est¨¢ hu¨¦rfana de liderazgo desde que en junio su entonces presidente, Jean-Fran?ois Cop¨¦, dimiti¨® por un caso de corrupci¨®n relacionado con la financiaci¨®n de la campa?a presidencial de su jefe, Sarkozy, en 2012.

La inestabilidad de la formaci¨®n favorece que en su seno haya una importante corriente en favor del regreso de Sarkozy. El diputado de la UMP Christian Estrosi dijo que el retorno augura ¡°renacer la esperanza¡±. La mayor parte de los candidatos a dirigir la formaci¨®n guardaron silencio.

Seis de cada diez franceses, seg¨²n las encuestas, rechazan a Sarkozy, pero su candidatura a las presidenciales es una amenaza para el Partido Socialista en el poder. Seg¨²n los sondeos, Sarkozy, al igual que Jupp¨¦, es una opci¨®n ganadora frente a la ultraderechista Marine Le Pen, que podr¨ªa acceder a la segunda vuelta de las presidenciales. El primer secretario de los socialistas, Jean-Christophe Cambad¨¦lis, recibi¨® as¨ª el anuncio de Sarkozy: ¡°Es una manera de escapar o alejarse de sus propios problemas¡±.