Un hombre mata a tiros a dos polic¨ªas en Nueva York y se suicida

La muerte a tiros de dos polic¨ªas de Nueva York a manos de un individuo que despu¨¦s se quit¨® la vida dio este s¨¢bado una vuelta de tuerca a la tensi¨®n que vive la ciudad por el caso Garner, la muerte de un afroamericano a manos de un agente que fue exculpado por un gran jurado, y agudiz¨® la crisis entre los sindicatos policiales y el alcalde, Bill de Blasio. ¡°Este es un ataque contra todos nosotros. Es un ataque a todo lo que nos es querido¡±, declar¨® el alcalde tras reunirse con los familiares de las v¨ªctimas en el Woodhull Hospital de Brooklyn, el barrio escenario de los asesinatos.

La mortal emboscada se produjo en plena calle, en la confluencia de dos avenidas muy concurridas y repletas de comercios, Myrtle y Tompkins, alrededor de las tres de la tarde y sin mediar acci¨®n alguna de los agentes, identificados como Wenjian Liu y Rafael Ramos. Un individuo se acerc¨® al coche patrulla que ocupaban en la zona y les dispar¨® varias veces en la cabeza y el torso. Los agentes no tuvieron tiempo ni de sacar sus pistolas. El autor de los disparos, el afroamericano Ismaaiyl Brinsley, de 28 a?os, huy¨® a una estaci¨®n de metro cercana, donde se quit¨® la vida con el mismo arma. Testigos presenciales de lo sucedido calificaron los hechos de ¡°ejecuci¨®n¡±

¡°Todo pas¨® muy r¨¢pido¡±, coment¨® Carmen Jim¨¦nez, una vecina de Bedford-Stuyvesant, en Brooklyn, que se encontraba en el and¨¦n del metro cuando el asaltante era perseguido por al menos dos polic¨ªas. ¡°Nos gritaban que nos ech¨¢ramos al suelo¡±, precis¨® a los medios locales. La zona, repleta de gente de compras por tratarse de un s¨¢bado previo a las fiestas navide?as, fue acordonada por la polic¨ªa. Las l¨ªneas del metro afectadas fueron suspendidas temporalmente.

El jefe de la polic¨ªa de Nueva York, William Braton, inform¨® de que el asesino hab¨ªa disparado a su exnovia en el est¨®mago el mismo d¨ªa por la ma?ana en Baltimore (Maryland), dej¨¢ndola herida de gravedad, y amenazado despu¨¦s en su cuenta de Instagram con matar a polic¨ªas de Nueva York. ¡°Voy a poner alas a los cerdos. Se llevaron a uno de los nuestros, tomemos a dos de ellos¡±, escribi¨® junto a la foto de una pistola plateada.

La polic¨ªa de Baltimore envi¨® una alerta a sus colegas de Nueva York, pero esta lleg¨® en el mismo momento en que se produc¨ªan los asesinatos. Fuentes policiales se?alaron que Brinsley, un individuo natural de Nueva York con muchos antecedentes criminales, pertenec¨ªa a una banda de delincuentes de Baltimore conocida como Black Gorilla Family. ¡°Es un asesinato sin sentido¡±, se?al¨® Bratton. ¡°Es posible que los agentes ni llegaran a ver a su asesino¡±, a?adi¨®.

Junto a ¨¦l, el alcalde tuvo palabras emocionadas para los dos agentes ca¨ªdos: ¡°Murieron sirviendo a su ciudad. Tenemos que agradecer que haya h¨¦roes como ellos. Eran dos polic¨ªas valientes¡±. El regidor explic¨® que, aunque est¨¢ en curso la correspondiente investigaci¨®n sobre lo sucedido, ¡°no hay duda de que ha sido un asesinato, una ejecuci¨®n, un acto despreciable y despiadado que golpea el coraz¨®n de nuestra sociedad y nuestra democracia¡±.

El asesino hab¨ªa disparado a su exnovia en el est¨®mago el mismo d¨ªa por la ma?ana en Baltimore

El presidente Barack Obama conden¨® "incondicionalmente" el asesinato de "dos oficiales que sirven y protegen a nuestras comunidades poniendo en riesgo su propia seguridad y que merecen nuestro respeto y gratitud". El l¨ªder dem¨®crata pidi¨® a sus ciudadanos que rechacen "la violencia y las palabras que da?an" y recurran a "las que curan: la oraci¨®n, el di¨¢logo paciente y la simpat¨ªa por los familiares y amigos de los ca¨ªdos".

El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, tambi¨¦n denunci¨® el "acto de barbarie" cometido en Brooklyn. En referencia a la tensi¨®n de las ¨²ltimas semanas por las protestas contra la violencia policial, se?al¨®: "No olvidemos lo sucedido esta noche cuando discutamos sobre eventos recientes. Estamos hablando de hombres que ponen en peligro sus vidas cada d¨ªa para preservar nuestra seguridad".

El incidente tiene lugar en un momento especialmente delicado en la ciudad. Las manifestaciones por los casos Garner y Brown (el joven afroamericano muerto en Ferguson, Misuri, a manos de un agente que tambi¨¦n fue exculpado por el gran jurado) se suceden a diario en Nueva York, bien que con escasa participaci¨®n y de forma pac¨ªfica. Sin embargo, el pasado fin de semana se produjo un incidente que elev¨® la tensi¨®n y exacerb¨® a los sindicatos policiales, muy cr¨ªticos con la pol¨ªtica del alcalde De Blasio. Dos tenientes de polic¨ªa fueron atacados en el puente de Brooklyn durante una protesta. La polic¨ªa ha distribuido fotos y v¨ªdeos de los supuestos agresores para recabar la colaboraci¨®n ciudadana en su detenci¨®n.

Los sindicatos consideran que el alcalde no les ha apoyado lo suficiente en la pol¨¦mica del Caso Garner

La muerte este s¨¢bado de los dos polic¨ªas provoc¨® una reacci¨®n dur¨ªsima de los dos principales sindicatos de polic¨ªa, la Patrolmen¡¯s Benevolent Association y la Sergeants Benevolent Association. ¡°Las manos del alcalde gotean con nuestra sangre a causa de sus palabras, acciones y pol¨ªticas que, por primera vez en muchos a?os, nos han convertido en un departamento en guerra. Actuaremos en consecuencia¡±, proclam¨® el primero. ¡°La sangre de dos polic¨ªas ejecutados est¨¢ en las manos del alcalde De Blasio. Que Dios bendiga a sus familias y que ellos descansen en paz¡±, redund¨® el segundo. El ¨²ltimo polic¨ªa abatido a tiros en Nueva York fue Peter Figoski, en 2011.

La ira de los sindicatos policiales contra De Blasio viene de lejos. Consideran que el alcalde, en una suerte de funambulismo pol¨ªtico para intentar contentar a todas las partes, no les ha apoyado lo suficiente en la pol¨¦mica por el caso Garner. Le acusan de haber apoyado las protestas en las que se tildaba a la polic¨ªa de asesina y de haber congeniado en exceso con grupos agitadores como la National Action Network del reverendo afroamericano Al Sharpton.

El pen¨²ltimo agrio episodio de desencuentro se produjo cuando De Blasio, al criticar la decisi¨®n del gran jurado de Staten Island que exculp¨® al oficial Daniel Pantaleo de la muerte de Eric Garner, explic¨® que ¨¦l y su mujer, la afroamericana Charlene McCray, hab¨ªan tenido miedo muchas noches de que su hijo Dante se topara con la polic¨ªa alguna noche de ocio. Aunque el regidor intent¨® matizar sus palabras, los sindicatos se sintieron agraviados. ¡°Nos ha dejado a los pies de los caballos, como si fu¨¦ramos una polic¨ªa a la que hay que temer¡±, denunciaron sus portavoces.

A consecuencia de ello, la Patrolmen¡¯s Benevolent Association hizo circular una carta en la que pide a los agentes que, en caso de muerte de algunos de ellos en acto de servicio, el alcalde no sea invitado al funeral. En la noche del s¨¢bado, y para demostrar al alcalde su rabia, todos los agentes presentes en el hospital de Brooklyn que atendi¨® a las v¨ªctimas dieron la espalda a De Blasio cuando este lleg¨® al centro para saludar a los familiares, seg¨²n un v¨ªdeo que circula por las redes sociales.

El reverendo Al Sharpton, que hace justo una semana moviliz¨® a miles de personas en Washington para exigir que se act¨²e contra los polic¨ªas que cometen abusos contra la comunidad negra, calific¨® de ¡°despreciable¡± que se utilicen los nombres de Garner y Brown para justificar cualquier tipo de violencia y se declar¨® contrario a que se busque "hacer justicia de esta manera¡±. ¡°La violencia es el enemigo¡±, indic¨® en una nota, de la causa que persiguen las marchas y las movilizaciones que se vivieron las ¨²ltimas semanas en EE UU. ¡°No todos los polic¨ªas son malos¡±, reiter¨®.

La familia de Michael Brown, el adolescente cuya muerte provoc¨® graves disturbios en Ferguson, Misuri, hizo p¨²blica una nota en la que lament¨® lo sucedido: "Condenamos el asesinato sin sentido de dos polic¨ªas de Nueva York. Rechazamos cualquier tipo de violencia hacia miembros de las fuerzas de seguridad. No se puede tolerar. Tenemos que trabajar juntos para llevar la paz a nuestras comunidades".

La muerte de los dos agentes en Brooklyn supone un golpe de incalculables consecuencias para la pol¨ªtica policial seguida hasta ahora por De Blasio. Una reducci¨®n hist¨®rica de la criminalidad (300 asesinatos en lo que va de a?o, un r¨¦cord positivo) y medidas tendentes a no penalizar a las minor¨ªas ¨¦tnicas, en un intento por construir una nueva relaci¨®n entre la polic¨ªa y la ciudadan¨ªa, han quedado aplastadas por la tensi¨®n del caso Garner y la rabia de unos sindicatos que han declarado la guerra a su alcalde.