El himno al mar que canta Bolivia e irrita a Chile

Entre las m¨²ltiples controversias que estos d¨ªas sostienen Bolivia y Chile, hay una que tiene ritmo. La Marcha Naval, que por orden del Gobierno boliviano se ejecuta obligatoriamente en los actos oficiales. La marcha son¨® en la posesi¨®n del presidente Evo Morales y ofendi¨® a la peque?a delegaci¨®n chilena que acudi¨®, a finales de enero, al acto. El l¨ªder de la misma, el magistrado Sergio Mu?oz, se quej¨® luego en su pa¨ªs por haber tenido que permanecer de pie mientras en el Congreso boliviano se cantaba que Antofagasta, la principal ciudad del norte chileno, ¡°otra vez a la patria volver¨¢¡±.

El decreto que instituy¨® la interpretaci¨®n de esta marcha, tambi¨¦n conocida como Himno al Litoral, fue aprobado por Morales en abril de 2011, d¨ªas despu¨¦s de anunciar que presentar¨ªa una demanda contra Chile ante la Corte Internacional de La Haya, para obligar a este pa¨ªs a resolver el diferendo bilateral que se remonta a la Guerra del Pac¨ªfico, en la que Bolivia perdi¨® su salida al mar. El decreto tambi¨¦n crea unos premios culturales destinados a estimular el ¡°fervor patri¨®tico¡± con el nombre de Eduardo Abaroa, el m¨¢ximo h¨¦roe boliviano de la guerra.

El decreto que instituy¨® la interpretaci¨®n de esta marcha fue aprobado por Morales en 2011

¡°A causa de la demanda ante La Haya¡±, dice el historiador Pablo Michel, ¡°Bolivia vive un entusiasmo nacionalista comparable con el que sinti¨® en 1979, cuando se conmemor¨® el centenario de la Guerra del Pac¨ªfico¡±. Fue justamente en esta ¨¦poca cuando Edgardo de la Vega y Gast¨®n Velasco compusieron el Himno al Litoral. Velasco sol¨ªa decir que ¡°quien no odia a Chile no es boliviano¡±.

Seg¨²n la Canciller¨ªa chilena, tanto el decreto como la canci¨®n sirven a su causa, ya que la letra ¡°deja de manifiesto lo que verdaderamente est¨¢ detr¨¢s de la demanda [boliviana ante La Haya], que no es otra cosa que una reivindicaci¨®n amplia de territorios, lo que afecta el Tratado de 1904¡±, argument¨® el subsecretario de Relaciones Exteriores, Edgardo Riveros. Si el planteamiento boliviano se interpretase como un ataque a este tratado de l¨ªmites, el tribunal de La Haya no tendr¨ªa jurisdicci¨®n para tratar el asunto, y esto es justamente lo que Chile quiere. Por tal raz¨®n, la marcha ser¨¢ incluida, dijo Riveros, entre los ¡°elementos probatorios¡± que presentar¨¢ este pa¨ªs a la Corte.

Quiz¨¢ Bolivia ponga entre sus propios elementos probatorios una entrevista en La Moneda, en 1971, entre el entonces presidente Salvador Allende y el escritor boliviano N¨¦stor Taboada, en la que el primero habr¨ªa dicho: ¡°Bolivia retornar¨¢ soberana a las costas del Pac¨ªfico¡±. El pasado domingo, el Gobierno boliviano public¨® esta frase, junto a una foto de Allende y Taboada, en una p¨¢gina entera del diario El Mercurio.

Esta publicaci¨®n se explica por un incidente previo entre el presidente boliviano y el Canciller chileno. El pasado 17 de febrero, Morales dijo que ¡°Allende era un verdadero socialista; no como ahora, que hay falsos socialistas en Chile¡±. Horas despu¨¦s, Heraldo Mu?oz tuite¨®: ¡°Pero Pdte. Allende [sic] nunca negoci¨® mar y defend¨ªa principio respeto a tratados¡±. La p¨¢gina en El Mercurio fue la respuesta boliviana a su tuit.

Mu?oz tambi¨¦n fue contradicho por el pol¨ªtico allendista Mario Osses, quien, en un art¨ªculo publicado en La Paz el mismo d¨ªa en que apareci¨® la solicitada, dice que ¨¦l estuvo presente en la entrevista entre Allende y Taboada, y confirma la disposici¨®n del fallecido dirigente chileno a un ¡°acuerdo fraterno y pragm¨¢tico¡± con Bolivia.

Puede parecer una nimiedad, pero es importante para La Paz, porque as¨ª como Chile basa su estrategia jur¨ªdica en atribuir a Bolivia un ataque al Tratado de 1904, Bolivia basa la suya en los ofrecimientos para concederle una salida soberana al Pac¨ªfico, realizados por las autoridades chilenas en distintos momentos de la historia, el m¨¢s importante de los cuales fue el hecho por el dictador Augusto Pinochet. Y Osses dice ahora que, a este respecto, Allende y Pinochet ¡°coincid¨ªan absolutamente¡±.

Bolivia y Chile presentar¨¢n sus alegatos orales en favor y en contra de la competencia de la Corte Internacional en este caso entre el 4 y el 8 de mayo. Conforme esta fecha se acerque, los cuerpos diplom¨¢ticos de ambos pa¨ªses aprovechar¨¢n hechos como estos y cada ocasi¨®n que tengan para ¡°cantarse las verdades¡±.