La triste historia (pol¨ªtica) del payaso Lagrimita

La pol¨ªtica le ha borrado la sonrisa al payaso Lagrimita. El comediante Guillermo Cienfuegos ha quedado definitivamente fuera de las campa?as pol¨ªticas que comienzan este domingo en M¨¦xico y que culminar¨¢n con la elecci¨®n del 7 de junio, donde se renovar¨¢n los 500 esca?os de la C¨¢mara de Diputados, m¨¢s de mil alcald¨ªas y nueve gobernaturas. Lagrimita, un payaso que protagoniz¨® un programa televisivo en los a?os noventa, buscaba ser candidato independiente a presidente municipal de Guadalajara (Jalisco), la tercera ciudad m¨¢s importante del pa¨ªs. Estas ser¨¢n las primeras elecciones que permitir¨¢n a ciudadanos de a pie postularse a cualquier cargo sin tener que ser cobijados por algunos de los diez partidos pol¨ªticos.

El 2 de marzo Lagrimita acudi¨® ante la autoridad electoral. ¡°Aqu¨ª les traigo un regalito¡±, dijo cargando pesadas cajas. Cada paquete envuelto con papel verde y mo?os de colores conten¨ªa copias de las identificaciones de los ciudadanos que respaldaban su candidatura. La ley le ped¨ªa entregar al menos 23.887 firmas, el 2% del padr¨®n nominal, recabadas en la mitad de las secciones electorales de una ciudad de 1.5 millones de habitantes. El payaso entreg¨® 26.400 firmas.

Las autoridades electorales, sin embargo, confirmaron la noche del s¨¢bado que 5.000 firmas no eran v¨¢lidas. Entre las irregularidades hallaron que 184 personas fallecidas hab¨ªan presentado sus documentos para apoyarlo. Hasta ah¨ª lleg¨® la carrera pol¨ªtica del payaso Lagrimita. Sus detractores afirmaban que su candidatura era patrocinada por el PRI, que gobierna el Estado, y que era usado para restar votos de candidatos de la oposici¨®n que lideran la intenci¨®n de voto en Guadalajara, al occidente del pa¨ªs.

Lagrimita llamaba a los pol¨ªticos ¡°payasos, pero de los malos¡± y admit¨ªa en las entrevistas ignorar los conceptos m¨¢s b¨¢sicos del servicio p¨²blico. No todos los aspirantes a las candidaturas independientes ten¨ªan un perfil tan estridente.

Mario Arriagada, de 38 a?os, quiso ser delegado (alcalde) de Cuauht¨¦moc, el coraz¨®n del Distrito Federal. Internacionalista por el reputado Colegio de M¨¦xico y con un posgrado en la London School of Economics se top¨®, sobre el terreno, con las estrictas reglas del juego creadas por la reforma pol¨ªtica promulgada en enero de 2014, que dio origen a este tipo de candidaturas.

¡°Los de partido no tienen que juntar firmas del dos por ciento del padr¨®n y no se les castiga haber militado antes en otro partido¡±, dice. Simpatizante de la izquierda progresista, se convenci¨® de competir despu¨¦s de ver el ¡°triste panorama¡± que aguarda a la elecci¨®n y el ¡°desencanto¡± que le provoca la actual situaci¨®n del PRD.

Su precampa?a la hizo en los parques p¨²blicos armado con un meg¨¢fono. Pronto se dio cuenta del cors¨¦ que los legisladores dise?aron. ¡°Hay restricciones sobre hacer propuestas en el periodo de recolecci¨®n de firmas, pero estas parecen no aplicar o no ser castigadas para los partidos¡±, afirma. ¡°Nos dieron los 30 peores d¨ªas del a?o, del uno al 30 de enero y los pol¨ªticos empezaron despu¨¦s. Las reglas de financiamiento y fiscalizaci¨®n nunca estuvieron claras sino hasta unos d¨ªas antes de la fecha l¨ªmite para el reporte¡±.

Hay restricciones sobre hacer propuestas en el periodo de recolecci¨®n de firmas, pero estas parecen no aplicar para los partidos Mario Arriagada, aspirante a candidato ciudadano

No pudo cubrir las ¨¢reas de la delegaci¨®n porque no ten¨ªa dinero. Sus rivales, que s¨ª contaban con recursos, hicieron equipos que visitaban casa por casa, lo que result¨® m¨¢s eficaz. Se gast¨® 4.500 pesos (300 d¨®lares) de su bolsillo, pero calcula que se necesitan al menos 100.000 (6.700 d¨®lares) ¨²nicamente para la precampa?a. A¨²n reflexiona sobre su fallida experiencia.

¡°Para que esto no solo se gane a billetazos y que siempre triunfe un empresario con fortuna personal, deben cambiar las reglas y bajar las barreras¡±, reconoce. Le gustar¨ªa que los partidos fueran m¨¢s democr¨¢ticos, que presentaran mejores agendas y mejores candidatos. ¡°Eso es m¨¢s urgente, pero para eso los partidos deben cambiar. ?C¨®mo asustarlos? Quiz¨¢ con mejores independientes¡±, dice.

Las estrictas reglas a las que se somete a los independientes han hecho que la presencia de este tipo de aspirantes en estas elecciones sea pr¨¢cticamente testimonial. El ¨¢rbitro de los comicios, el Instituto Nacional Electoral (INE), otorg¨® la noche del s¨¢bado el registro a solo 22 de los 122 ciudadanos que buscaban una candidatura independiente a la C¨¢mara de Diputados. El total de abanderados que har¨¢ campa?a por alg¨²n partido es de 4.474.

La cifra tambi¨¦n es baja en las principales entidades. En la Ciudad de M¨¦xico solo hay 14 candidatos. En Nuevo Le¨®n 22, entre ellos Jaime Rodr¨ªguez un expri¨ªsta que se hace llamar El Bronco y que tiene buenas posibilidades de ser elegido gobernador del Estado industrial de M¨¦xico. Y en Jalisco, la tierra de Lagrimita, ¨²nicamente cuatro ciudadanos har¨¢n campa?a en contra de la aceitada maquinaria partidista.