Netanyahu ampl¨ªa el plazo para formar Gobierno en Israel

El regateo que marca la vida cotidiana de los israel¨ªes tampoco es ajeno a la pol¨ªtica del Estado jud¨ªo. El primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, obtuvo este lunes un plazo suplementario de dos semanas para formar una coalici¨®n con mayor¨ªa en la Knesset (Parlamento) tras haberlo intentado sin ¨¦xito desde hace cuatro semanas, cuando el presidente de Israel, Reuven Rivlin, le encarg¨® la formaci¨®n de Gobierno. A pesar de su victoria en los comicios del 17 de marzo, el l¨ªder del Likud (partido conservador que cuenta con 30 de los 120 esca?os) se ha topado con las exigencias de los nacionalistas de Casa Jud¨ªa y la ultraderecha de Israel Nuestra Casa, cuyos l¨ªderes, Neftal¨ª Bennet y Avigdor Liberman, respectivamente, reclaman, entre otras, las estrat¨¦gicas carteras de Defensa y Asuntos Exteriores.

Tambi¨¦n debe contentar a dos partidos que representan los intereses de los jud¨ªos ultraortodoxos y al nuevo movimiento centrista del exministro del Likud Moshe Kahlon, a quien ha puesto al frente de las reformas econ¨®micas necesarias para frenar el creciente descontento social por el elevado coste de la vida y, en especial, el de la vivienda, que se ha incrementado en Israel un 87% entre 2008 y 2014, seg¨²n un informe del semanario The Economist.

¡°Necesitamos m¨¢s tiempo para configurar un Gobierno estable que puede hacer frente a todos los desaf¨ªos que tiene pendientes el Estado de Israel¡±, asegur¨® el primer ministro despu¨¦s de que el presidente Rivlin confirmara la pr¨®rroga de las negociaciones pol¨ªticas. Para eludir las exigencias de sus socios conservadores, Netanyahu parece haber tanteado la f¨®rmula de un Gabinete de unidad nacional, que servir¨ªa tambi¨¦n para intentar recomponer las deterioradas relaciones con la Administraci¨®n del presidente Barack Obama y para afrontar el principio de acuerdo nuclear de Ir¨¢n con las grandes potencias, que es visto en Israel como una amenaza a la seguridad nacional. Pero el supuesto acercamiento a los laboristas se top¨® el pasado domingo con el rechazo de su jefe de filas, Isaac Herzog, quien insisti¨® en su objetivo es ¡°permanecer al frente de la oposici¨®n¡±.

Si el l¨ªder del Likud no lograse configurar una mayor¨ªa de Gobierno antes del 7 de mayo, el jefe del Estado deber¨ªa encargar la misi¨®n a otro l¨ªder pol¨ªtico con los mismos plazos antes de tener que disolver la C¨¢mara y convocar nuevos comicios. No es probable que esto suceda. Netanyahu, que se emple¨® a fondo en la campa?a para conquistar su cuarto mandato como primer ministro (y el tercero consecutivo desde 2009), va a tener que negociar hasta el ¨²ltimo momento para sumar una mayor¨ªa de 67 esca?os en la Knesset, pero el resto de los partidos que participan en las conversaciones no parecen dispuestos a correr el riesgo de tener que presentarse a otras elecciones.

Los laboristas rechazan un Gabinete de unidad nacional en Israel

El Likud tambi¨¦n pretende imponer estrictas condiciones a sus socios de Gobierno, seg¨²n ha revelado un alto cargo del partido conservador al diario Haaretz. Entre ellas figura no s¨®lo el compromiso de aprobaci¨®n de los presupuestos durante la pr¨®xima legislatura, sino tambi¨¦n de pol¨¦micas reformas --como la del sistema judicial para designar a los miembros del Tribunal Supremo, que act¨²a como un contrapoder liberal frente a la deriva conservadora del Gobierno y el Parlamento-- que la oposici¨®n de centro izquierda califica de restrictivas para la democracia en Israel.

Despu¨¦s de haber congelado desde diciembre la transferencia de los fondos procedentes de los tributos que Israel recauda en nombre de la Autoridad Palestina, el Gobierno de Netanyahu ha accedido a desbloquear dichos fondos, que ascienden a mil millones de shekels (unos 250 millones de euros), una vez que el Ejecutivo de Mahmud Abbas haya aceptado tambi¨¦n que la Administraci¨®n israel¨ª retenga otros 500 millones de sekhels para saldar parte de las deudas procedentes de los territorios palestinos con la Compa?¨ªa El¨¦ctrica Israel¨ª. El bloqueo de las transferencias fiscales coincidi¨® con la ratificaci¨®n de la adhesi¨®n palestina al tratado que regula la Corte Penal Internacional, el pasado mes de enero.