El avance yihadista desconcierta a Estados Unidos
Washington se resiste a implicarse m¨¢s en la guerra, pero constata que las fuerzas iraqu¨ªes son incapaces de derrotar al EI
Desconcertada por los avances recientes del Estado Isl¨¢mico (EI) en Siria e Irak, la Administraci¨®n Obama reexamina la estrategia. Los cambios, de momento, son m¨ªnimos. El Pent¨¢gono ha enviado cohetes antitanques y estudia ampliar el entrenamiento de las tropas locales.
El problema es que los estadounidenses se resisten a implicarse m¨¢s en la guerra, pero constatan que las fuerzas iraqu¨ªes, por s¨ª solas, son incapaces de derrotar a los yihadistas. Irak, 12 a?os despu¨¦s de la invasi¨®n, ocupa de nuevo el centro de la pelea pol¨ªtica.
Irak es, para Estados Unidos, la guerra sin fin. Cuando parece que ha terminado, regresa. La toma, en menos de una semana, de Palmira (Siria) y Ramadi (Irak), por el EI es un contratiempo para Washington. Casi un a?o despu¨¦s del inicio de una intervenci¨®n para frenar a los terroristas yihadistas sun¨ªes, los resultados son magros.
Casi un a?o despu¨¦s del inicio de una intervenci¨®n para frenar a los terroristas yihadistas sun¨ªes, los resultados son magros
En Irak, la estrategia de la Administraci¨®n Obama consiste en apoyar con bombardeos a¨¦reos y asesores militares sobre el terreno a las fuerzas iraqu¨ªes que combaten contra el EI. Ahora hay unos 3.000 asesores. En Siria, es m¨¢s complicado. EE UU, que all¨ª participa en la guerra con ataques a¨¦reos, es enemigo del r¨¦gimen de Bachar el Asad y del EI, que son enemigos entre s¨ª.
El presidente Barack Obama no quiere enviar tropas terrestres. Esta opci¨®n, como la de desentenderse definitivamente de Irak y Siria y dejar de bombardear, est¨¢ descartada. El inconveniente es que esta estrategia obliga a EE UU a delegar en fuerzas locales.
En Mosul, hace un a?o, y en Ramadi ahora, el Ej¨¦rcito de Irak ha demostrado su deficiente preparaci¨®n para derrotar al EI. La otra fuerza local son las milicias chi¨ªes, algunas controladas por Ir¨¢n. El problema aqu¨ª, para Washington, es ceder el control de la guerra a Teher¨¢n.
El objetivo del presidente Obama es crear una fuerza con suficiente presencia sun¨ª. Se trata, primero, de integrar a este grupo en un Ej¨¦rcito, el iraqu¨ª, dominado por los chi¨ªes. Y segundo, de evitar que el conflicto se convierta en una guerra civil en la que, gane quien gane, los intereses estadounidenses saldr¨¢n da?ados.
Irak, 12 a?os despu¨¦s de la invasi¨®n, ocupa de nuevo el centro de la pelea pol¨ªtica en Estados Unidos
La ca¨ªda de Palmira y Ramadi ocurre menos de una semana despu¨¦s de que un mando militar estadounidense dijese que el EI estaba ¡°a la defensiva¡± y que ya s¨®lo era capaz de realizar ¡°ataques a peque?a escala, localizados, de hostigamiento¡±.
Palmira y Ramadi obligan a repensar la estrategia. El mayor cambio puede consistir en aparcar los planes para reconquistar Mosul, la otra gran ciudad iraqu¨ª en manos de los yihadistas, y centrarse en Ramadi. A esto se a?ade el env¨ªo de 2.000 cohetes antitanques, y la posibilidad de reforzar el adiestramiento de fuerzas locales.
En Washington, el debate sobre la responsabilidad se reabre. ?Fue culpa del presidente republicano George W. Bush al invadir Irak en 2003? ?De Obama al replegarse en 2011? Los candidatos republicanos presidenciales apuntan al dem¨®crata Obama.
Todos escuchan la pregunta: ?habr¨ªa invadido Irak sabiendo que las armas de destrucci¨®n masiva no exist¨ªan? Los titubeos de Jeb Bush, hermano de George, ante esta pregunta, o el no de halcones como el senador Marco Rubio, demuestran que la discusi¨®n ¡ªy la herida¡ª siguen abiertas.
El Pent¨¢gono admite las primeras muertes de civiles en la campa?a
Estados Unidos ha reconocido por primera vez este jueves que durante la campa?a de ataques a¨¦reos que comenz¨® el pasado verano en Siria e Irak contra el Estado Isl¨¢mico ha habido bajas civiles.
El Departamento de Defensa ha admitido que "probablemente" dos ni?os sirios murieron en un bombardeo de la coalici¨®n internacional liderada por Estados Unidos en noviembre en los alrededores de la ciudad siria de Harim. El ataque golpe¨® instalaciones del grupo Joras¨¢n, integrado por veteranos de Al Qaeda.
"Lamentamos la p¨¦rdida no intencionada de vidas", dijo en un comunicado el general James L. Terry, comandante de la campa?a contra el EI. "La coalici¨®n sigue tomando todas las medidas razonables durante el proceso de objetivo para mitigar los riesgos a los no combatientes, y para cumplir con los principios de la ley de conflictos armados".
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha informado este jueves de que los ataques a¨¦reos de la coalici¨®n internacional han acabado con la vida de m¨¢s de 2.200 milicianos de Estado Isl¨¢mico y 131 civiles en Siria en los ¨²ltimos ocho meses.
Oficialmente la guerra termin¨® en diciembre de 2011, cuando se retiraron las ¨²ltimas tropas estadounidenses. O acaso antes, en mayo de 2003, cuando Bush hijo declar¨® ¡°misi¨®n cumplida¡± a bordo del portaaviones Abraham Lincoln, tres meses despu¨¦s de la invasi¨®n.
En realidad, Estados Unidos lleva obsesionado con Irak desde mucho antes: desde 1990, cuando Sadam Husein invadi¨® Kuwait y el presidente George Bush padre empez¨® a movilizar una coalici¨®n internacional contra Husein.
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