El Golfo asume su debilidad
Los efectos del calentamiento global empiezan a concienciar a la la regi¨®n sobre la necesidad de buscar alternativas al petr¨®leo en las energ¨ªas renovables
?Puede una regi¨®n adicta al petr¨®leo volverse verde? La sola idea suscita escepticismo, pero necesidad obliga. Un informe cient¨ªfico ha alertado de que las orillas del golfo P¨¦rsico van camino de hacerse inhabitables a causa del calentamiento global. En v¨ªsperas de la Cumbre del Clima, varios pa¨ªses de la zona se comprometieron a recortar emisiones o, al menos, a reducir su dependencia de los combustibles f¨®siles. Hasta el l¨ªder supremo de Ir¨¢n, el octavo pa¨ªs m¨¢s contaminante del mundo, ha instruido a su Gobierno para que tome medidas.
En una carta dirigida a los jefes de los tres poderes, el ayatol¨¢ Ali Jamenei les ped¨ªa a mediados de noviembre que ¡°promuevan la econom¨ªa verde y conciencien a la gente sobre el medioambiente¡±. Incluso enumeraba una lista de 15 pol¨ªticas generales para hacer frente ¡°al cambio clim¨¢tico y las amenazas medioambientales como la desertificaci¨®n, las tormentas de arena y la sequ¨ªa¡±.
Sus palabras, que suelen servir de gu¨ªa para la toma de decisiones y redacci¨®n de leyes, refuerzan el anuncio por parte de Ir¨¢n de que va a reducir un 4% sus emisiones para el a?o 2030. Incluso la vicepresidenta para Medio Ambiente, Masumeh Ebtekar, ha sugerido que, una vez que se levanten las sanciones y si se obtienen inversiones extranjeras, podr¨ªa lograrse una reducci¨®n suplementaria de otro 8 %.
La Rep¨²blica Isl¨¢mica, con 80 millones de habitantes, lleva varios a?os de sequ¨ªa y ha visto como el nivel de sus aguas subterr¨¢neas desciende hasta niveles alarmantes. El lago Urmia, al noroeste del pa¨ªs, ha desaparecido pr¨¢cticamente. Este a?o las tormentas de arena y polvo llegaron a paralizar Teher¨¢n y una docena de ciudades de la provincia de Juzest¨¢n e incluso causaron varios muertos.
Al otro lado del Golfo, el desierto ya era una realidad antes de que se iniciara el impresionante desarrollo urbano de Dub¨¢i y el resto de las ciudades que han seguido su estela. Pero el propio ¨¦xito de su modelo lo est¨¢ poniendo en peligro. A medida que aumenta la poblaci¨®n (las petromonarqu¨ªas suman 50 millones de habitantes), se hace m¨¢s insostenible el despilfarro energ¨¦tico que supone mantener encendido el aire acondicionado nueve meses al a?o, iluminar los rascacielos y abastecer a sus ocupantes de agua desalinizada a un coste medio de tres euros el litro.
Una vez m¨¢s, esta ciudad excesiva quiere estar a la cabeza y convertirse en modelo de la transici¨®n hacia las renovables. La Autoridad del Agua y la Electricidad de Dub¨¢i (DEWA) est¨¢ desarrollando un parque solar que deber¨ªa proporcionar 1.000 MW para 2019 y 3.000 MW para 2030. Adem¨¢s, ha anunciado planes para obtener de renovables un 7% de toda su producci¨®n para 2020 y un 15% para 2030.
Emiratos ?rabes Unidos (EAU), la federaci¨®n en la que se integra Dub¨¢i, se ha comprometido en su propuesta ante la Cumbre del Clima a obtener un 24% de su energ¨ªa de fuentes limpias para 2021. Se trata de un salto importante desde el 0,2% actual, pero incluye entre estas la energ¨ªa nuclear (est¨¢ construyendo cuatro reactores y tiene otros cuatro en proyecto) y adem¨¢s no ha fijado una reducci¨®n de emisiones responsables del efecto invernadero. Aunque se trata de una de las econom¨ªas m¨¢s diversificadas de la zona, EAU depende de los hidrocarburos para una cuarta parte de su riqueza.
El vecino Om¨¢n, por su parte, ha ofrecido reducir sus emisiones un 2% para 2030, mientras que Arabia Saud¨ª, el gigante petrolero, se ha limitado a decir que para esa fecha evitar¨¢ emitir 130 millones de toneladas de CO2. El reino no aclara si se trata de un recorte sobre sus actuales emisiones (ocupa el 14? lugar) o sobre los niveles proyectados. En cualquier caso, se trata de un objetivo condicionado a la diversificaci¨®n de su econom¨ªa, que depende en un 80% de los hidrocarburos.
Los pa¨ªses exportadores de petr¨®leo han estado tradicionalmente entre los m¨¢s remisos a recortar sus emisiones de CO2 para apoyar un acuerdo global. Sin embargo, los riesgos del calentamiento global son cada d¨ªa m¨¢s evidentes. Los pa¨ªses ribere?os del Golfo han sufrido este verano una de las peores olas de calor que se recuerdan, con numerosos d¨ªas en los que la temperatura ha superado los 50? C, lo que ha causado varias muertes.
La elevada humedad que eso causa hace a sus habitantes especialmente vulnerables, seg¨²n ha advertido un estudio de la Universidad de Loyola y el Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts. Su modelo, para el que han desarrollado una medida combinada de temperatura y humedad (WBT), proyecta que si se mantiene el actual nivel de emisiones, el calentamiento de 4? C har¨¢ inhabitables Dub¨¢i, Abu Dhabi, Doha y las ciudades costeras de Ir¨¢n antes del a?o 2100. Sin embargo, con un recorte del CO2, aunque aumenta la temperatura, no llega a ser intolerable. De ah¨ª que las decisiones que se tomen en Par¨ªs afecten a las orillas del P¨¦rsico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.