Macri y Kirchner se pelean hasta por la banda presidencial
Guerra de nervios en los d¨ªas previos a la toma de posesi¨®n del presidente. No hay acuerdo para ver d¨®nde y c¨®mo se entrega simb¨®licamente el poder
Los argentinos ya sab¨ªan que el kirchnerismo no iba a entregar con facilidad el poder despu¨¦s de 12 a?os de control absoluto. Pero la tensi¨®n que se vive estos d¨ªas en Argentina con los preparativos para la sucesi¨®n del 10 de diciembre est¨¢ superando las expectativas. Despu¨¦s de una primera reuni¨®n fracasada entre Mauricio Macri, presidente electo, y la saliente, Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, ahora sus equipos no se ponen de acuerdo en casi nada. Ni siquiera logran pactar d¨®nde y c¨®mo se hace la ceremonia de la foto que todos esperan: la entrega de la banda presidencial de un mandatario a otro. Algo que en la mayor¨ªa de los pa¨ªses est¨¢ perfectamente pautado, en Argentina est¨¢ en discusi¨®n hasta el punto de que el n¨²mero dos del Gobierno y portavoz, An¨ªbal Fern¨¢ndez, ha ironizado en su habitual conferencia de prensa: ¡°No se puede hacer como uno quiere, no se le puede llevar la banda presidencial a Barrio Parque (el lujoso barrio en el que vive Macri) y entregarla en la casa del presidente electo¡±.
Parece una cuesti¨®n menor pero no lo es. La entrega simb¨®lica del poder es el momento televisivo por excelencia y la imagen quedar¨¢ durante a?os en la memoria de todos los argentinos. Lo que se est¨¢ discutiendo es c¨®mo ser¨¢ ese momento, c¨®mo empezar¨¢ Macri su mandato y se cerrar¨¢n 14 a?os de dominio del peronismo.
El kirchnerismo y el peronismo en general est¨¢n en plena batalla interna para recomponer su grupo y empezar a trabajar para recuperar el poder que no esperaban perder. Macri, seg¨²n el recuento definitivo, gan¨® solo por 678.774 votos, el 2,68% de los votantes. Un suspiro. Y el peronismo ya piensa en debilitarlo desde el primer d¨ªa. Tanto que se est¨¢ organizando un gran acto de homenaje a Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner y rechazo a Macri el mismo d¨ªa de la toma de posesi¨®n en la plaza del Congreso. Algunos incluso temen que se si se cruzan los kirchneristas que defienden a Cristina con los macristas que festejan la llegada del nuevo presidente puede haber tensiones en las calles.
En ese contexto, que muchos dirigentes de ambos grupos intentan suavizar, es clave d¨®nde y c¨®mo se hace el momento clave, la foto hist¨®rica, la entrega de los s¨ªmbolos del poder de Fern¨¢ndez de Kirchner a Macri. Este ¨²ltimo quiere recuperar una tradici¨®n que rompieron los Kirchner, esto es que esa entrega se hace en la Casa Rosada, sede del Gobierno. El presidente dar¨ªa as¨ª su discurso oficial en el Congreso, como se hizo siempre, y despu¨¦s recorrer¨ªa las calles en auto para recibir en la Casa Rosada la banda presidencial y el bast¨®n de mando. Pero el mensaje que ha trasladado la presidenta es claro: ella entregar¨¢ el bast¨®n de mando en el Congreso, el mismo lugar donde ella lo recibi¨® de su marido, N¨¦stor, fallecido en 2010, en una imagen ic¨®nica para el kirchnerismo.
Macri quiere evitar que esa entrega se produzca en el Congreso porque el peronismo suele llenar las tribunas de militantes con enormes banderas y c¨¢nticos que convierten la c¨¢mara en un gran mitin peronista. Eso sumado a miles de personas en la calle alabando a Fern¨¢ndez de Kirchner no es la imagen ideal con la que quiere arrancar un presidente que ha derrotado en las urnas al kirchnerismo y quiere trasladar al mundo y a los mercados la imagen de que es un mandatario con fuerza como para tomar medidas dif¨ªciles. Las negociaciones siguen pero parece muy dif¨ªcil alcanzar un acuerdo. Dirigentes tanto de los negociadores de Macri como los de Cristina consultados ven muy complicado lograr un punto de encuentro aunque lo que s¨ª parece confirmado es que ella entregar¨¢ esa banda y habr¨¢ foto simb¨®lica. En alg¨²n momento incluso se temi¨® que la presidenta pudiera alegar una excusa para no participar en el gesto m¨¢s claro de la entrega del poder.
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