Toda una noche sin dormir, pendientes de Ecuador

Carlos Gavil¨¢nez, un ecuatoriano de 38 a?os que vive en Madrid, estaba a punto de irse a dormir cuando comenz¨® a leer en Twitter que hubo un "temblor". Nada grave, pens¨® al inicio, porque viene de un pa¨ªs acostumbrado a que la tierra se mueva de vez en cuando. "Todav¨ªa no sab¨ªamos de qu¨¦ magnitud hab¨ªa sido, pero de pronto empec¨¦ a ver fotos y v¨ªdeos con puentes ca¨ªdos, casas destruidas, centros comerciales sin techos y me di cuenta de que era peor de lo que pensaba", cuenta este domingo, con ojeras m¨¢s pronunciadas que las de ayer: no fue capaz de dormir hasta las siete de la ma?ana, cuando supo que todos sus familiares y amigos estaban bien. "Empec¨¦ a escribirles a mis hermanos por WhatsApp y uno no aparec¨ªa. Tard¨¦ una hora m¨¢s o menos en ubicar a todos".

La tarea no era sencilla. Muchos salieron con lo puesto y, por miedo a las r¨¦plicas, algunos pasaron la noche en parques o casas de familiares. Otros corr¨ªan sin rumbo y, en el camino, ca¨ªdas o empujones. La electricidad se fue durante horas en gran parte de las provincias costeras m¨¢s afectadas, como Manab¨ª, Esmeraldas y, en menor medida, Guayas.

Mar¨ªa, por ejemplo, se vali¨® de su hermano en Guayaquil para saber que toda su familia estaba bien: era el ¨²nico que contestaba el tel¨¦fono casi a las tres de la ma?ana. Su madre estaba en un centro comercial de la ciudad de Samborond¨®n (Guayas) cuando ocurri¨® todo y esto fue lo que le cont¨® cuando al fin pudo hablar con ella: "La gente corr¨ªa desesperada y gritando. Me empujaron y me ca¨ª. Era como una pel¨ªcula: parec¨ªa el fin del mundo". Cuando sali¨® a la calle se encontr¨® con puentes y t¨²neles cerrados por precauci¨®n; tr¨¢fico congestionado en las calles; reportes de saqueos y gente pendiente de si se iba a emitir una alerta de tsunami, que finalmente fue descartada.

Los ecuatorianos en Espa?a ¡ªm¨¢s de 420.000, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica¡ª, a esa hora, ten¨ªan a mano sus m¨®viles e Internet como principales herramientas de comunicaci¨®n: redes sociales (Twitter y Facebook, principalmente), llamadas, WhatsApp, Skype... Los locutorios estaban cerrados. H¨¦ctor Bail¨®n, un ecuatoriano de 50 a?os, 17 de ellos en Espa?a, ya estaba dormido cuando ocurri¨® el terremoto. Se despert¨® por su "sue?o liviano" ante las continuas notificaciones de Facebook que no dejaban de sonar. La red social activ¨® la aplicaci¨®n Security Check para que aquellos usuarios que se encuentran cerca de las zonas de desastre comuniquen que est¨¢n bien. Las alertas llegaban a su m¨®vil una detr¨¢s de otra. Menos las de sus familiares en Quito y Loja.

"Al inicio no ten¨ªamos mucha informaci¨®n oficial y pas¨¦ toda la madrugada leyendo peri¨®dicos de Ecuador. As¨ª hasta que logr¨¦ hablar con ellos, ya a la una de la tarde, hora de Espa?a", relata Bail¨®n, desde Torrej¨®n de Ardoz (Madrid), donde cuenta que en Manab¨ª y Esmeraldas tiene excompa?eros de universidad y exalumnos que a¨²n no dan se?ales de vida.

El Ministerio de Relaciones Exteriores ha habilitado un call-center que, durante las 24 horas del d¨ªa, da informaci¨®n a los familiares de ecuatorianos ¡ªo de cualquier otra nacionalidad que residan o est¨¦n temporalmente en ese pa¨ªs¡ª que a¨²n no dan se?ales de vida. Uno de los operadores cont¨® a este peri¨®dico que su labor consiste, b¨¢sicamente, en ir armando una base de datos que se cruza con la informaci¨®n de fallecidos, heridos o desaparecidos. Quien llama (desde Espa?a: 900-935-930 o 013-948-900) debe entregar sus datos personales, los del familiar desaparecido y un n¨²mero de contacto para recibir informaci¨®n desde la Canciller¨ªa o sus oficinas consulares. El ministerio tambi¨¦n atiende a trav¨¦s de la p¨¢gina consuladovirtual.gob.ec, por chat o llamada web.

"Angustiada y sin informaci¨®n"

Andrea Resabala, una estudiante de marketing de 31 a?os, vive en Madrid desde noviembre y cuenta que nunca hab¨ªa vivido algo as¨ª, lejos de casa: "No s¨¦ qu¨¦ es peor: si estar all¨¢ y vivir todo eso, o estar aqu¨ª angustiada y sin informaci¨®n de tu familia y amigos". Ella estaba estudiando cuando empezaron a llegarle mensajes por WhatsApp. "Al inicio pensaba que era un temblor m¨¢s, pero cuando vi que empezaban a viralizarse fotos de puentes ca¨ªdos y casas destruidas, despert¨¦ a mi compa?era, que tambi¨¦n es ecuatoriana, y empezamos a llamar a Ecuador. Tambi¨¦n nos comunicamos con amigos ecuatorianos en Sevilla y Mallorca. Yo logr¨¦ hablar con mi mam¨¢ como a las tres y media de la madrugada".