Argentina se aferra al campo para salir de la crisis

El Gobierno argentino sufre estos d¨ªas una oleada de cr¨ªticas por la inflaci¨®n y la recesi¨®n que no cesan. Sin embargo, en medio de una presi¨®n creciente, el Ejecutivo de Mauricio Macri se aferra a un sector clave para la econom¨ªa argentina del que empiezan a llegar buenas noticias: el campo. Las exportaciones se est¨¢n recuperando, con aumentos de hasta el 225% en aceite de girasol o del 72% en el de soja. De momento no hay creaci¨®n de empleo destacable pero Luis Etchevehere, presidente de la Sociedad Rural Argentina, entusiasmado con el giro de pol¨ªtica del nuevo Gobierno ¨Clo primero que hizo fue eliminar el impuesto a las exportaciones agr¨ªcolas- es muy optimista: ¡°Este a?o se van a sembrar entre un 20% y un 40% m¨¢s. Eso son como m¨ªnimo 12.000 millones de d¨®lares nuevos. Ven¨ªamos de un a?o horrible y gracias al cambio de Gobierno las expectativas son muy buenas¡±, asegura.

Argentina ha vivido toda su historia reciente en una especie de lucha constante entre el campo y la industria. Con su enorme fertilidad, especialmente en la pampa h¨²meda, en el centro alrededor de Buenos Aires, la agricultura y ganader¨ªa llevaron a Argentina a lo m¨¢s alto y la sacaron de todas las crisis. El llamado granero del mundo sali¨® gracias al campo y en especial a la soja de la ¨²ltima gran crisis, la de 2001. Pero es la industria y los servicios, en especial en la periferia de Buenos Aires, la que se lleva buena parte del empleo del pa¨ªs.

En esa dial¨¦ctica entre un campo muy rentable pero con poco trabajo y una industria con mucho empleo y muchas veces subvencionada o protegida se escribe la historia econ¨®mica argentina. En los ¨²ltimos a?os el Gobierno kirchnerista se enfrent¨® al campo por los altos impuestos a la exportaci¨®n que les puso. Necesitaba ese dinero para hacer pol¨ªticas sociales, argumentaba. Nada m¨¢s llegar al poder, Macri elimin¨® o redujo esas retenciones, que en algunos casos eran del 35%, y ahora el campo vuelve a crecer. Macri ahora tiene al campo de su lado y sufre m¨¢s cr¨ªticas precisamente entre los trabajadores de la construcci¨®n o de la industria automovil¨ªstica que est¨¢ sufriendo con m¨¢s dureza la crisis.

¡°El campo lo pone en marcha todo en Argentina y este Gobierno ha sabido entenderlo. De los 25 productos que m¨¢s aumentaron sus exportaciones el primer trimestre de este a?o, 21 provienen del campo. Ven¨ªamos de un momento p¨¦simo por las reglas del juego del anterior Gobierno. Pr¨¢cticamente hab¨ªa prohibici¨®n de exportar. Nos han quitado las retenciones pero van a lograr m¨¢s ingresos gracias al impuesto a las ganancias y con eso podr¨¢n hacer las infraestructuras prometidas. La agricultura ya est¨¢ creciendo muy r¨¢pido, la ganader¨ªa va un poco m¨¢s lenta, y la leche a¨²n no se ha recuperado por los precios internacionales. Si el Gobierno sigue con estas reglas de juego el centro del pa¨ªs va a explotar en la segunda mitad del a?o¡±, se entusiasma Etchevehere.

Desde el Gobierno tambi¨¦n est¨¢n llenos de optimismo, sobre todo porque el campo parece ser uno de los pocos focos de buenas noticias en un momento especialmente delicado para el Ejecutivo. Desde el ministerio de Agricultura se?alan que en el primer trimestre han crecido un 70% las exportaciones de cereales y aseguran que ya hay 1,2 millones de nuevas cabezas de ganado despu¨¦s de a?os en los que se perdieron 12 millones porque la exportaci¨®n de carne argentina se fren¨® en seco.

En general el campo est¨¢ satisfecho, aunque no todos son tan entusiastas como la Sociedad Rural, siempre ligada a los mayores productores. Agust¨ªn Pizzichini, vicepresidente segundo de la Federaci¨®n Agraria Argentina (FAA), donde se agrupan peque?os y medianos productores, es m¨¢s cauto. "Estamos mejor ahora que en mayo del a?o pasado, hay un cambio de actitud, con un Gobierno que quiere hacer las cosas bien. Pero hay que esperar, porque lamentablemente todav¨ªa no hemos visto los beneficios. La baja de retenciones no toc¨® a los peque?os y medianos productores. Con el aumento del gasoil se diluyeron", asegura.

Jorge Figueroa, presidente de la Federaci¨®n Productores de Fruta de R¨ªo Negro y Neuqu¨¦n, era uno de los m¨¢s cr¨ªticos hace unos meses, cuando denunciaba que las econom¨ªas que depend¨ªan de la fruta estaban hundidas. Ahora admite el cambio aunque a¨²n no lo ve claro. ¡°Lo que ha cambiado es la expectativa. Todav¨ªa no hay un cambio real. La quita de retenciones llega al exportador pero no al productor. El incremento del precio del combustible o de la electricidad afecta much¨ªsimo a los productores. El Estado est¨¢ reconociendo la necesidad de recuperar el campo, la columna vertebral del pa¨ªs, pero a¨²n no vemos medidas concretas. El beneficio que tuvimos con la salida del cepo cambiario ya lo hemos perdido por la inflaci¨®n y el aumento de costes¡±, explica.

Daniel Aseff, gerente general del Coninagro, que agrupa a las cooperativas, va en la misma l¨ªnea de apoyo con dudas. ¡°No estamos 100% satisfechos, pero creemos que las mejoras son importantes y hay un aire de negocios distinto. Lo que pasa es que como sector ven¨ªamos de 12 a?os de castigo y existe una cierta ansiedad para que todo mejore. Pero las promesas de campa?a se viene cumpliendo¡±. El campo y el interior dan un poco de aire al Gobierno mientras en Buenos Aires las cr¨ªticas no cesan.