¡°No m¨¢s feminicidios, Rosa Elvira somos todos¡±
Protestas en Bogot¨¢ ante la Alcald¨ªa por acusar a una mujer de su asesinato
No bast¨® con que una funcionaria del Ayuntamiento de Bogot¨¢ se apartara del cargo ni que el alcalde de la ciudad, Enrique Pe?alosa, se retractara del pronunciamiento que sali¨® de su oficina y que culpaba de su tragedia a Rosa Elvira Cely, una mujer violada y asesinada en el a?o 2012, para que los colombianos dejaran de manifestar su indignaci¨®n. En la tarde de este lunes, decenas de personas se agolparon a las afueras del edificio del Gobierno local para gritar: "No m¨¢s feminicidios, Rosa Elvira somos todos".
"Este es un plant¨®n por Rosa Elvira Cely, por tantos atropellos burocr¨¢ticos, que merecen que rompamos el silencio", fue una de las tantas frases que se escucharon en la protesta, la primera de una serie de manifestaciones que se han organizado para los pr¨®ximos d¨ªas en Bogot¨¢, una ciudad en donde, seg¨²n la Defensor¨ªa del Pueblo, en los dos a?os siguientes a la muerte de Cely, al menos 21.000 mujeres fueron v¨ªctimas de violencia de g¨¦nero.
La protesta se gener¨® despu¨¦s de que se conociese un texto jur¨ªdico de una funcionaria del Ayuntamiento en el que catalogaba a la v¨ªctima como ¨²nica responsable de su muerte. "Puso en riesgo su integridad y vida, hasta el punto que Javier Velasco le cercen¨® su existencia; si Rosa Elvira Cely no hubiera salido con los dos compa?eros de estudio despu¨¦s de terminar sus clases en las horas de la noche, hoy no estuvi¨¦ramos lamentando su muerte", se lee en el documento, revelado por el diario El Espectador, y que fue enviado en nombre de la autoridad local al proceso de reparaci¨®n que se adelanta por la negligencia de las autoridades en la atenci¨®n al llamado que la mujer hizo tras el ataque.
El caso, que ya fue calificado por ONU Mujeres, como una muestra clara de tolerancia institucional que permite que se perpet¨²e la violencia contra las mujeres, ha generado una profunda reflexi¨®n sobre cu¨¢l es el tratamiento que se le da a los casos de feminicidio en el pa¨ªs, en donde seg¨²n cifras de Medicina Legal, entre los a?os 2009 y 2014, m¨¢s de 8.000 mujeres murieron v¨ªctimas de la violencia de g¨¦nero. "Mientras no haya una alineaci¨®n entre dicho marco normativo y su apropiaci¨®n por parte de las/os servidores p¨²blicos encargados de su aplicaci¨®n, el pa¨ªs no podr¨¢ tener avances de fondo en la erradicaci¨®n del flagelo evitable de la violencia contra las mujeres¡±, resalt¨® la ONU.
El historial del asesino
Uno de los reclamos que hace la familia de la v¨ªctima es que el agresor de Rosa Elvira Cely, Javier Velasco estaba en libertad pese a que se hab¨ªa comprobado que en el pasado ya hab¨ªa matado a otra mujer y dos de sus hijastros hab¨ªan sido v¨ªctimas de sus abusos.
"No entiendo como pretenden que las mujeres violentadas denuncien, si las culpables, para las autoridades, terminan siendo ellas", dice la hermana de la v¨ªctima, que el a?o pasado decidi¨® demandar a las autoridades por el descuido al que fue sometido el caso Cely.
El caso de Rosa Elvira, que conmocion¨® al pa¨ªs hace cuatro a?os cuando se conocieron detalles de la tortura a la que fue sometida, sigue indignando a los colombianos. La hermana de la v¨ªctima, Adriana Cely, recuerda la cadena de errores que terminaron con su muerte."Aunque ella alcanz¨® a llamar a pedir ayuda, la dejaron morir. Las autoridades se tardaron en llegar y una vez en el hospital no recibi¨® la atenci¨®n que necesitaba", dijo en di¨¢logo con este diario.
A Cely la encontraron dos horas despu¨¦s de su agonizante llamado. Estaba tirada en el pasto de un c¨¦ntrico parque semidesnuda, con s¨ªntomas de hipotermia y varias heridas de pu?al en su cuerpo. Los m¨¦dicos que la atendieron aseguraron que muri¨® de una peritonitis generada por un palo que su agresor le introdujo en el cuerpo. "Lo que sentimos hoy es como volver cuatro a?os atr¨¢s. Se siente el mismo dolor, la misma impotencia, la misma tristeza", ha dicho su hermana.
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