El ISIS redobla su ofensiva terrorista ante la p¨¦rdida de terreno del califato
La ola de atentados de la ¨²ltima semana causa unos 300 muertos en varios pa¨ªses
Al tiempo que el Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s) pierde territorio en Siria e Irak, sus secuaces incrementan el n¨²mero y envergadura de ataques fuera de las fronteras del califato. En tan solo una semana y finalizando el Ramad¨¢n (mes sagrado de ayuno musulm¨¢n), el ISIS ha matado a unas 300 personas en la ola de atentados suicidas que ha sacudido Turqu¨ªa (44 muertos), Banglad¨¦s (20), Irak (entre 165 y 213 seg¨²n las fuentes), Yemen (40) y L¨ªbano (5). Desde que Abu Baker el Bagdadi anunciara la creaci¨®n de su particular califato en junio de 2014, y por lo tanto la escisi¨®n definitiva de su mentor Al Qaeda, el ISIS ha perpetrado un centenar de atentados fuera de Siria e Irak, segando la vida de m¨¢s de 1.400 personas.
¡°El ISIS necesita mantener una imagen de ¨¦xito y victorias para atraer seguidores. Si no puede decir que est¨¢ construyendo un Estado Isl¨¢mico, y si de hecho est¨¢ perdiendo ese estado, necesita ganar en otros sitios¡±, valora en una entrevista v¨ªa correo electr¨®nico Daniel Byman, analista en el Brookings Institute.
En Siria, el ISIS pierde terreno y efectivos. El Ej¨¦rcito regular sirio, las milicias kurdas y rebeldes as¨ª como los bombarderos de la coalici¨®n internacional liderada por Estados Unidos amenazan a los yihadistas en su propia capital, Raqa.
En Irak, el Ej¨¦rcito nacional recuper¨® la estrat¨¦gica localidad de Faluya, expulsando al ISIS y abriendo el camino para hacerles frente en Mosul. ¡°ISIS ha perdido el 45% del territorio que controlaba en Irak y el 20% del sirio¡±, cifr¨® el Coronel Steve Warren, portavoz del operativo internacional lanzado contra el ISIS bajo el liderazgo de Washington.
Debilitado en su territorio, el Estado Isl¨¢mico se lanza en la guerra global, confirmando el giro en su modus operandi que inici¨® con la masacre de Par¨ªs en noviembre de 2015. Su internacionalizaci¨®n abre tanto nuevos desaf¨ªos para sus l¨ªderes, como inc¨®gnitas en la lucha antiterrorista. ¡°Implica un reto econ¨®mico y un dilema estrat¨¦gico para el ISIS a la hora de priorizar qu¨¦ objetivos y qu¨¦ grupos yihadistas financiar. Una expansi¨®n que tambi¨¦n conlleva una mayor exposici¨®n a los servicios de inteligencia en la lucha contra el terrorismo¡±, apostilla Byman.
Son ya 60 las naciones que se han sumado a la guerra internacional contra ISIS, sin por ello tener muy claro la naturaleza del enemigo al que se enfrentan. Con lobos solitarios como el del ataque de Orlando (Estados Unidos), grupos yihadistas locales como Jamaat al Muyahidin en Dacca (Banglad¨¦s), o redes afiliadas extranjeras en Estambul (Turqu¨ªa), ISIS diversifica tanto su log¨ªstica como estrategia. ¡°Los lobos solitarios siguen siendo el mayor desaf¨ªo para los servicios de inteligencia en la lucha contra el terrorismo. Son m¨¢s dif¨ªciles de monitorear que las redes ya asentadas, como en Turqu¨ªa, a las que llevan a?os sigui¨¦ndoles la pista¡±, puntualiza Maya Yahia directora del Centro Carnegie de Beirut.
En los dos a?os de existencia del ISIS, la guerra que libran los bombarderos occidentales desde el cielo y las botas de milicianos y soldados regulares sobre el terreno, ha logrado acabar con un tercio de los 35.000 yihadistas que se estiman conforman sus filas. A pesar de que los expertos coinciden en que el ISIS recluta menos y pierde territorio, el grupo se impone como l¨ªder ideol¨®gico en la lucha yihadista y ello ampliando su presencia en terceros pa¨ªses sumidos en guerras fratricidas. ¡°La v¨ªa militar no es en absoluto la soluci¨®n para deshacerse del ISIS. Mientras prevalezcan las causas por las que se enlistan en sus filas miles de j¨®venes frustrados sujetos a gobiernos represivos, a un vac¨ªo de legitimidad pol¨ªtica y religiosa, o al deficiente sistema educativo entre otros, el ISIS seguir¨¢ existiendo. Y si se le expulsa f¨ªsicamente de Irak o Siria, otro ISIS bajo otra forma vendr¨¢ a ocupar su lugar¡±, advierte Yahia.
?Hacia una re-Alqaedizaci¨®n del ISIS?
Los atentados perpetrados esta semana por ISIS confirman un giro en su estrategia. Sin embargo, ¨¦ste ha sufrido numerosas metamorfosis desde que se gestara una d¨¦cada atr¨¢s su primera versi¨®n en un centro de detenci¨®n clandestino de Irak, Camp Bucca, hasta devenir lo que hoy se conoce como Estado Isl¨¢mico. Inicialmente embarcados en una guerra de guerrillas contra el enemigo cercano: los gobiernos de Siria e Irak, el caos generado por el conflicto sirio ha permitido que ampl¨ªe sus objetivos en una guerra total contra milicias kurdas y rebeldes. ISIS se distanci¨® precisamente de su mentor Al Qaeda al que acus¨® de priorizar los objetivos internacionales, para emprender una campa?a de exterminio contra toda minor¨ªa religiosa en la regi¨®n, con un especial fervor contra los musulmanes chi¨ªes.
Hoy, la internacionalizaci¨®n del ISIS, evoca una re-Alqaedizaci¨®n del movimiento a trav¨¦s de sus tent¨¢culos en Occidente. Si embargo, los ataques contra objetivos internacionales y en suelo occidental siguen siendo la excepci¨®n, frente a su prioridad por ahondar la divisi¨®n sectaria regional. De hecho, todos los atentados perpetrados esta semana han tenido lugar en territorio musulm¨¢n. Seg¨²n Hassan Hassan, analista del instituto Chatham House, la transformaci¨®n del ISIS se produce sobre todo en el ¨¢mbito ideol¨®gico-religioso, en el que intenta colmar el vac¨ªo de un liderazgo sun¨ª con una interpretaci¨®n m¨¢s brutal y salvaje del salafismo yihadista. En esa competici¨®n ideol¨®gica radicalizada frente a Al Qaeda, ISIS tambi¨¦n castiga a las potencias sun¨ªes que rivalizan por el liderazgo regional como Turqu¨ªa y Arabia Saud¨ª.
¡°ISIS se ha ganado el apoyo de un n¨²mero importante de grupos yihadistas como Boko Haram en Nigeria, o Ansar Bayt al Maqdis en Egipto. En 2015 sum¨® siete provincias m¨¢s al Estado Isl¨¢mico, entre ellas en Libia y Yemen¡±, valora el experto norteamericano Daniel Byman. Compitiendo por ganarse la lealtad de la mir¨ªada de grupos yihadistas, ISIS suma a su guerra local y global un tercer frente a trav¨¦s de proxies. En Siria se enfrenta a Al Nusra y rama local de Al Qaeda, y en Yemen, al AQAP (rama local de Al Qaeda en la pen¨ªnsula Ar¨¢biga por sus siglas en ingl¨¦s).
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