La OTAN se prepara en Varsovia para ¡°un mundo m¨¢s peligroso¡±

Hasta hace apenas unos d¨ªas, la OTAN cre¨ªa tener diagnosticados todos los retos a los que se enfrenta. En el sur, la inestabilidad en ?frica y Oriente Pr¨®ximo contagia el fen¨®meno terrorista a muchos pa¨ªses aliados. En el este, la tensi¨®n con Rusia inquieta a los vecinos m¨¢s pr¨®ximos a Mosc¨². Pero la enorme resonancia que ha provocado un inesperado Brexit en pleno coraz¨®n de Europa est¨¢ llamada a marcar, directa e indirectamente, la cumbre bienal que los jefes de Estado y de Gobierno de los pa¨ªses de la Alianza inician este viernes en Varsovia.

Al margen de las discusiones informales que puedan surgir entre los aliados, hay dos encuentros donde la ruptura de Reino Unido con sus socios europeos tendr¨¢ un papel protagonista. El primero es el que mantendr¨¢n esta ma?ana el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, con los dos m¨¢ximos exponentes de la UE, el presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker, y el del Consejo Europeo, Donald Tusk. El l¨ªder estadounidense teme que la salida brit¨¢nica debilite los lazos entre Bruselas y Washington y quiere empezar a trabajar los diferentes escenarios. Aun as¨ª, la Administraci¨®n Obama no da por amortizada la trayectoria de Reino Unido en el seno de la UE.

Los dos presidentes europeos se entrevistar¨¢n tambi¨¦n con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. Aunque la Alianza Atl¨¢ntica ya hab¨ªa previsto estrechar la cooperaci¨®n con la UE a partir de esta cumbre, el futuro abandono brit¨¢nico convierte ese objetivo en perentorio. Reino Unido es, junto con Francia, la gran potencia militar de la UE. Sin Londres en la familia europea, las dos organizaciones con sede en Bruselas deber¨¢n comunicarse mejor para no perder capacidad estrat¨¦gica. ¡°Ahora m¨¢s que nunca, la UE debe ser un actor global de seguridad¡±, defienden fuentes diplom¨¢ticas comunitarias.

Contra el tr¨¢fico de migrantes

Para sellar ese compromiso, habr¨¢ un comunicado conjunto de la OTAN y la UE en el que por primera vez declarar¨¢n su voluntad de trabajar de manera complementaria, con una lista de tareas para que cada organizaci¨®n asuma su parte. La mayor novedad consistir¨¢n en cooperar en una actividad de la que en principio recelaba la OTAN: la lucha contra las redes de tr¨¢fico de migrantes.

Tras el despliegue en febrero pasado de una misi¨®n de vigilancia en el mar Egeo, la Alianza est¨¢ dispuesta ahora a extender ese modelo al Mediterr¨¢neo central e involucrarse en la operaci¨®n Sof¨ªa que la UE comanda en las aguas cercanas a Libia para intentar frenar los flujos. Una vez sellada ¨Cpr¨¢cticamente- la v¨ªa entre Turqu¨ªa y Grecia, la ruta desde Libia constituye el principal canal de tr¨¢fico de migrantes hacia la UE. M¨¢s all¨¢ de esa misi¨®n, tanto la OTAN como la UE tienen en la cajonera grandes planes para ayudar a estabilizar ese pa¨ªs, desestructurado y ahora cuna del yihadismo. Pero el nuevo Gobierno de acuerdo nacional es a¨²n demasiado d¨¦bil para poder pactar proyectos concretos.

Junto a esos retos internos, los externos no dejan de crecer. ¡°El mundo es hoy un lugar m¨¢s peligroso que hace unos a?os¡±, resumi¨® el jueves Stoltenberg en una comparecencia previa a la cumbre, que concluir¨¢ el s¨¢bado. La organizaci¨®n a¨²n contin¨²a pertrech¨¢ndose para hacer frente a la amenaza rusa, que ha guiado la acci¨®n de la Alianza Atl¨¢ntica durante los ¨²ltimos dos a?os. En el flanco este, los gobernantes consagrar¨¢n una ¡°presencia estable¡± de tropas, el eufemismo utilizado para evitar hablar de bases permanentes en el este de Europa, que la OTAN prometi¨® a Rusia no instalar. Habr¨¢ cuatro batallones (aproximadamente 1.000 soldados cada uno) distribuidos en los tres pa¨ªses b¨¢lticos y en Polonia, pa¨ªs anfitri¨®n de la cumbre y que ha presionado duramente para que la reuni¨®n pasara a la historia como la del refuerzo defensivo de la regi¨®n del Este.

Los mayores retos, pese a todo, est¨¢n al sur del Mediterr¨¢neo. Pese a la inestabilidad que reina en todo el vecindario de Siria y en el Sahel, la OTAN deja todo el campo de acci¨®n a la coalici¨®n internacional contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s) que lidera Estados Unidos. El secretario general ha insistido en los ¨²ltimos meses en que, concluida la gran misi¨®n de combate en Afganist¨¢n, la nueva estrategia aliada debe basarse en ayudar al desarrollo militar en esos pa¨ªses (por ejemplo, entrenando tropas). Pese al esfuerzo dial¨¦ctico que se har¨¢ estos d¨ªas por convencer de que la atenci¨®n prestada al sur es equivalente a la del este, el nivel de ambici¨®n es muy superior en las proximidades de la frontera con Rusia.