Donald Trump se desploma en las encuestas

En Estados Unidos se suele hablar del efecto convenci¨®n, que es una subida en las encuestas que experimenta el candidato presidencial tras el c¨®nclave en el que el partido lo ha coronado. La convenci¨®n puede ser una inyecci¨®n de optimismo: consiste en cuatro d¨ªas de discursos y de encuentro de republicanos o dem¨®cratas de todo el pa¨ªs que se unen para confirmar lo buenos que son ellos y lo malos que son los contrarios. El mensaje se amplifica en los medios y esa notoriedad positiva se refleja en las encuestas.

Seg¨²n los datos a nivel nacional difundidos este jueves por la Fox, la pareja republicana, formada por el empresario neoyorquino y su candidato a vicepresidente, Mike Pence, lograr¨ªa un apoyo del 39% en las elecciones del 8 de noviembre, mientras que el d¨²o formado por la aspirante dem¨®crata y su n¨²mero dos, Tim Kaine, se llevar¨ªa el 49%.

Esta vez, hubo un efecto convenci¨®n positivo para Donald Trump, especialmente durante la propia reuni¨®n conservadora de Cleveland, pero r¨¢pidamente qued¨® amortiguado por el efecto convenci¨®n de Hillary Clinton, que se celebr¨® en Filadelfia justo la semana siguiente. Pero el empresario neoyorquino atraviesa estos d¨ªas tambi¨¦n su propio efecto, una tormenta desatada dentro de su partido a cuenta de las pol¨¦micas por su enfrentamiento a la familia de un ca¨ªdo en combate o con dos pesos pesados republicanos como Paul Ryan y John McCain.

Otras encuestas recientes, a nivel de Estado, otorgan ventajas notables a Clinton en puntos clave, que pueden tener una importante influencia en el resultado final, como Pensilvania (11 puntos), New Hampshire (15 puntos), Michigan (nueve puntos) o Florida (seis puntos).

Ryan, presidente de la C¨¢mara de Representantes, advirti¨® este jueves en una entrevista de radio de que el apoyo que brind¨® a Trump ¡°no es un cheque en blanco¡±, y recalc¨® la necesidad de reenfocar la campa?a republicana ¡°en Hillary Clinton, en todas sus deficiencias¡±. Tambi¨¦n Ben Carson, uno de los aspirantes m¨¢s conservadores en las primarias, asegur¨® que a partir de ahora se iba a ver a un Trump m¨¢s centrado en su oponente dem¨®crata y menos propenso a meterse en jardines.

Poca estructura

Los problemas de Trump con el establishment, sin embargo, contrastan con la buena racha de las donaciones modestas, lo que refleja la contradicci¨®n. El dinero recaudado para elevar al magnate hacia la Casa Blanca es algo m¨¢s que un s¨ªmbolo, porque la diferencia de fondos respecto a Clinton era m¨¢s que considerable. Un rasgo caracter¨ªstico de la estrategia del candidato conservador es que, durante toda la fase de primarias, ten¨ªa poca estructura y se beneficiaba de su permanente presencia gratuita en los medios de comunicaci¨®n.

Este julio, seg¨²n informaron desde su campa?a, ha batido su m¨¢ximo de recaudaci¨®n con 80 millones de d¨®lares, frente a los 90 que logr¨® Hillary Clinton, una diferencia mucho m¨¢s estrecha que en el pasado. Pero, aparte de los d¨®lares contantes y sonantes que cada uno recaude, Clinton cuenta con el respaldo p¨²blico de grandes magnates como Warren Buffett o Michael Bloomberg. Tambi¨¦n hay big money del lado de Trump, como Sheldon Adelson, due?o del imperio de casinos radicado en Las Vegas; Carl Icahn, uno de los inversores m¨¢s influyentes en las decisiones de las empresas cotizadas, o Peter Thiel, accionista de varias firmas de Silicon Valley.

Mientras, el que parece haber logrado su propio efecto convenci¨®n es el presidente, Barack Obama, que este jueves cumpli¨® 55 a?os con una buena noticia: seg¨²n la CNN, su ratio de aprobaci¨®n est¨¢ en el m¨¢ximo de su segunda legislatura, en el 54%.