El tr¨¢gico retrato de Argentina

Cinthia Pok es una mujer cercana a los 60 que ha sido protagonista de un episodio orwelliano. En el 2007, Cinthia se ocupaba de medir cu¨¢ntos pobres hab¨ªa en la Argentina. Si se quiere, era un trabajo burocr¨¢tico, en el buen sentido del t¨¦rmino. Cada seis meses, el Instituto de Estad¨ªstica revelaba el porcentaje de pobres, en un estudio que era todo un retrato de la sociedad argentina. Y ella estaba a cargo del asunto.?

Ese a?o no lo pudo hacer m¨¢s porque la echaron, y de muy mala manera.

Unos meses antes de su despido, el gobierno de N¨¦stor Kirchner hab¨ªa intervenido el Instituto de Estad¨ªstica, disgustado porque inform¨® de que la inflaci¨®n hab¨ªa dado un respingo. Pusieron ah¨ª a un funcionario con aires de comisario pol¨ªtico, nombr¨® en cargos clave a personajes violentos, que llegaron a amenazar a t¨¦cnicos a punta de pistola, y as¨ª comenzaron a inventar una realidad paralela. Por decreto, los precios no aumentaban, aunque en verdad lo hicieran, la econom¨ªa crec¨ªa aunque no fuera siempre as¨ª, y la pobreza desaparec¨ªa, contra toda evidencia.

Pok se neg¨® a convalidar el disparate. La pobreza se mide en funci¨®n de la comparaci¨®n entre los ingresos de la gente y el valor de una canasta de productos. Si este ¨²ltimo dato es adulterado, toda la operaci¨®n se torna imposible, argument¨®. La sacaron a patadas, la golpearon en una asamblea, le armaron causas judiciales. Ella y un grupo de t¨¦cnicos muy valientes resolvieron denunciar, mes tras mes, a?o tras a?o, la destrucci¨®n deliberada de las estad¨ªsticas oficiales, aun en tiempos en que parec¨ªa que el kirchnerismo ser¨ªa eterno. La lucha por defender las estad¨ªsticas parece algo rid¨ªcula si se mira desde afuera, pero en este caso fue noble: era una pelea por la verdad, contra la prepotencia y el realismo m¨¢gico de los comisarios.?

Mientras esto ocurr¨ªa los funcionarios hac¨ªan papelones. Un jefe de Gabinete dijo que en la Argentina hab¨ªa menos pobres que en Alemania. Un ministro explic¨® que no se med¨ªa la cantidad de pobres porque ser¨ªa ¡°estigmatizarlos¡±. Durante una entrevista televisiva, otro ministro dijo ¡°me quiero ir¡±, cuando le preguntaron cu¨¢l era la cifra de inflaci¨®n.

Cinthia Pok no es simpatizante del Ejecutivo actual. Sin embargo, desde el cambio de Gobierno volvi¨® a su cargo anterior y hace unos d¨ªas cont¨® una vez m¨¢s cu¨¢l es la realidad social del pa¨ªs. Sus n¨²meros son estremecedores. Para el organismo oficial de estad¨ªsticas, el 32,5% de los argentinos vive por debajo de la l¨ªnea de pobreza. A medida que se desciende en edad, los porcentajes suben: el 50% de los ni?os argentinos son pobres. La desocupaci¨®n en el pa¨ªs roza el 10%, pero se duplica cuando se trata de los j¨®venes y se triplica cuando el universo es el de los j¨®venes humildes. El informe termina con la f¨¢bula de que la pobreza hab¨ªa ca¨ªdo al 5%, como sosten¨ªa Cristina Kirchner. Pero tambi¨¦n advierte que el n¨²mero de pobres subi¨® en m¨¢s de un mill¨®n desde que asumi¨® Mauricio Macri.

Dif¨ªcilmente un turista perciba esta realidad si visita la rica y sofisticada ciudad de Buenos Aires. Las im¨¢genes desesperantes son m¨¢s visibles en capitales como el distrito federal mexicano, Caracas o R¨ªo de Janeiro. Los pobres est¨¢n ah¨ª, sobre los cerros. Sin embargo, a 20 kil¨®metros de Buenos Aires, m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n no tiene agua corriente, y mucho menos cloacas, o camina kil¨®metros para acceder a transporte p¨²blico, no goza de las ventajas del gas de red, y sus hijos son atendidos por escuelas y hospitales desbordados.

Para corregir eso, el primer paso es (re)conocerlo.?

La historia kafkiana de Cinthia Pok, v¨ªctima de un gobierno que reaccionaba con violencia ante la difusi¨®n de una simple verdad, parece haber terminado.

El drama de la Argentina, su derrota, su herida m¨¢s lacerante, ha quedado expuesto: es el gran fracaso, y por tanto el principal desaf¨ªo, de la democracia recuperada en 1983.