Canad¨¢ da por fracasada la negociaci¨®n del acuerdo comercial con la UE
El l¨ªder de la regi¨®n franc¨®fona belga, Paul Magnette, rechaza las concesiones de Bruselas
Los valones se ponen flamencos. El Parlamento de Valonia sigue bloqueando el acuerdo comercial con Canad¨¢, a pesar del ultim¨¢tum de la UE. El l¨ªder de la regi¨®n franc¨®fona belga, el socialista Paul Magnette, ha explicado este viernes que las concesiones de Bruselas no son suficientes y se resiste a dar luz verde al CETA, el pacto comercial con los canadienses. Valonia apuesta por retrasar la cumbre con Canad¨¢ ¨Cprevista para el pr¨®ximo jueves¡ª e incluso por reabrir el acuerdo, extremo al que se niegan los socios europeos. Las presiones de la regi¨®n belga han tenido efecto y Canad¨¢ ha dado por fracasada la negociaci¨®n. Tanto, que su ministra de Comercio, Chrystia Freeland, ha optado por regresar a casa. Pese a esto, la Comisi¨®n Europea no da por muerto el acuerdo.
"Durante los ¨²ltimos meses, hemos trabajado mucho con la Comisi¨®n y los Estados miembros. Pero parece evidente que la UE no es capaz ahora mismo de lograr un acuerdo internacional, ni siquiera con un pa¨ªs con unos valores tan europeos como Canad¨¢, ni siquiera con un pa¨ªs que ha sido tan amable y paciente. Canad¨¢ est¨¢ decepcionado, yo estoy personalmente decepcionada", ha manifestado la ministra.
Para los valones, el principal escollo es el mecanismo para dirimir las disputas entre los inversores y los Estados, un tribunal independiente que, seg¨²n las ONG y los grupos pol¨ªticos m¨¢s cr¨ªticos con el acuerdo, no presenta suficientes garant¨ªas jur¨ªdicas.
La presi¨®n es m¨¢xima para Valonia, una peque?a regi¨®n belga en franco declive industrial de apenas 3,5 millones de habitantes, que impide un pacto que afectar¨ªa a m¨¢s de 500 millones de personas con una mezcla de argumentos antiglobalizaci¨®n, suspicacias respecto a los beneficios de la liberalizaci¨®n comercial y razones m¨¢s oscuras, relacionadas con la pol¨ªtica belga. "Si no logramos ese pacto comercial con Canad¨¢ no veo c¨®mo vamos a lograr un solo acuerdo m¨¢s en otras partes del mundo", explic¨® la madrugada pasada ante la prensa el jefe de la Comisi¨®n Europea, el luxemburgu¨¦s Jean-Claude Juncker. El primer ministro belga, el liberal franc¨®fono Charles Michel, ha afirmado esta ma?ana que ve dif¨ªcil el pacto por ¡°la radicalizaci¨®n de las posiciones¡±. Michel apoya ese acuerdo. Pero no puede firmar sin el visto bueno de los valones.
El Gobierno federal y la Comisi¨®n Europea han negociado toda la noche con la delegaci¨®n de Valonia, unas conversaciones a las que se une hoy incluso el Ejecutivo canadiense. Magnette considera que ha habido avances, pero que las dificultades se centran en el mecanismo de arbitraje de conflictos entre empresas y Estados. Las presiones se recrudecen incluso en casa: los empresarios valones del sector tecnol¨®gico aseguran hoy que el acuerdo comercial tendr¨ªa ¡°grandes ventajas¡±, informa la radio p¨²blica belga RTBF.
Se trata de un cap¨ªtulo adicional de una vieja historia. Reuniones in extremis, suspense inacabable y paseos al borde del abismo: lo que val¨ªa para la fase m¨¢s aguda de la crisis del euro vuelve a servir para la pol¨ªtica comercial de la UE, metida en una suerte de estado de excepci¨®n permanente. El bloqueo de la regi¨®n belga de Valonia al acuerdo con Canad¨¢ oblig¨® anoche a la Uni¨®n a convocar una reuni¨®n de emergencia. ¡°Est¨¢ en juego la credibilidad de Europa¡±, ha apuntado el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk. "Las negociaciones no son f¨¢ciles", ha explicado de madrugada la canciller Angela Merkel. "Si no logramos ese pacto comercial con Canad¨¢ no veo c¨®mo vamos a lograr un solo acuerdo m¨¢s en otras partes del mundo", ha explicado ante la prensa el jefe de la Comisi¨®n Europea, el luxemburgu¨¦s Jean-Claude Juncker. Los l¨ªderes de la UE, junto con el Gobierno canadiense, seguir¨¢n negociando con el Ejecutivo val¨®n para desbloquear el acuerdo comercial con el pa¨ªs norteamericano en las pr¨®ximas horas.
Los l¨ªderes europeos se reunieron a mediados de septiembre en Bratislava y trazaron un plan maestro: avanzar en lo que haya acuerdo y dejar de lado todo lo que divida a la Uni¨®n en un momento de crisis existencial, tras el refer¨¦ndum sobre la salida de Reino Unido de la UE. Un mes despu¨¦s, la declaraci¨®n de Bratislava queda en suspenso hasta nuevo aviso. No hay avances en ning¨²n cap¨ªtulo, al menos de momento. E incluso la pol¨ªtica comercial, una de las banderas de la Uni¨®n durante d¨¦cadas, genera controversia. El Parlamento val¨®n mantiene esta ma?ana, a pesar de la tensi¨®n, el bloqueo al pacto comercial con Canad¨¢. Las concesiones que ofrece Bruselas no son suficientes.
Uno de cada siete empleos en Europa depende de las exportaciones, pero los acuerdos comerciales en la UE, el mayor bloque econ¨®mico del mundo, se han convertido en la nueva v¨ªctima del descontento ciudadano con el poder. La pol¨ªtica comercial, ense?a de la Europa comunitaria durante a?os, es ahora un claro s¨ªntoma de que algo no funciona. Los jefes de Estado y de Gobierno intentan poner la artiller¨ªa pesada en la cumbre para desbloquear un asunto que en otros momentos no habr¨ªa suscitado m¨¢s inter¨¦s que el de los ministros de Comercio. Levantar los vetos al acuerdo urge para evitar la embarazosa situaci¨®n de tener que anular la cumbre de la pr¨®xima semana con Canad¨¢, en la que estaba prevista la firma del pacto.
¡°El de Canad¨¢ ser¨¢ el ¨²ltimo acuerdo comercial de la UE si no convencemos a los europeos de que esto les favorece¡±, ha asegurado Tusk, en la l¨ªnea de Juncker. Los Veintiocho redoblan la presi¨®n: todos los l¨ªderes suscribieron ayer una ¨²ltima propuesta de Bruselas, que ofrece una declaraci¨®n jur¨ªdicamente vinculante en los asuntos m¨¢s sensibles para evitar el cortocircuito. El Gobierno val¨®n se resiste a firmar, aunque reunir¨¢ al Parlamento el viernes para fijar una posici¨®n. Las ONG y un nutrido grupo de europarlamentarios apoyan el veto val¨®n, en contra de acuerdos como el canadiense, antesala del TTIP con Estados Unidos.
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