El presidente de Ir¨¢n materializa su promesa electoral de impulsar los derechos sociales
Rohan¨ª, que se enfrenta a la reelecci¨®n en mayo, presenta una Carta de Derechos de los Ciudadanos
El presidente de Ir¨¢n, Hasan Rohan¨ª, ha presentado este lunes una Carta de Derechos de los Ciudadanos destinada a garantizar, entre otros, la libertad de expresi¨®n y de manifestaci¨®n, el derecho a la vida privada o a tener un juicio justo. Se trataba de un compromiso adquirido por el mandatario durante su campa?a electoral y que muchos votantes le acusaban de haber olvidado en su empe?o por lograr el acuerdo nuclear.
¡°Estoy muy contento de que una de mis promesas m¨¢s importantes vea la luz hoy y de cumplir as¨ª uno de mis m¨¢s antiguos sue?os¡±, ha declarado Rohan¨ª al presentar la Carta en una ceremonia televisada.
Fue precisamente su promesa de ampliar las libertades sociales lo que llevo a muchos votantes reformistas a apoyarle en las presidenciales de 2013, donde se impuso en la primera vuelta a los candidatos conservadores favorecidos por el l¨ªder supremo. Que a seis meses vista de los pr¨®ximos comicios, haya rescatado un compromiso que muchos daban por olvidado tiene sin duda una lectura electoralista, pero tambi¨¦n transmite un mensaje de confianza por su parte, justo cuando los escasos r¨¦ditos econ¨®micos del acuerdo nuclear alentaban rumores sobre su p¨¦rdida de apoyos en el establishment.
¡°La legitimidad y autoridad de un Estado est¨¢ garantizada por el consentimiento de sus ciudadanos y la realizaci¨®n de sus derechos¡±, ha se?alado el presidente, seg¨²n la traducci¨®n de la web de su oficina. Aunque la mayor¨ªa de los principios que menciona la Carta ya est¨¢n recogidos en la Constituci¨®n iran¨ª, Rohan¨ª ha anunciado el texto, que todav¨ªa no es una ley, como ¡°un punto de referencia¡± para juzgar el desempe?o de las instituciones oficiales. En consecuencia, el Gobierno va a nombrar un encargado de vigilar su cumplimiento.
Los observadores apuntan a que su alcance ser¨¢ limitado, ya que algunos de los centros de poder m¨¢s importantes, como la Judicatura o los Guardianes de la Revoluci¨®n (Pasdar¨¢n), est¨¢n controlados por la l¨ªnea dura del r¨¦gimen y escapan a la autoridad del presidente. Desde esos sectores ya han llegado las primeras cr¨ªticas.
¡°Mientras la gente espera con impaciencia mejoras econ¨®micas tras el acuerdo nuclear, el Gobierno se acuerda de los derechos humanos. Es una broma¡±, se?alaba la web conservadora Osulgara News, citada por France Presse.
Sin embargo, los derechos humanos, o m¨¢s bien su falta de respeto, son un asunto esencial para mejorar la imagen de Ir¨¢n en el mundo. El pa¨ªs es frecuentemente acusado de violaciones por distintas organizaciones internacionales y el relator especial de la ONU para Ir¨¢n, Ahmed Shaheed, no ha sido autorizado a visitarlo desde su nombramiento en 2011, tal como recordaba en su ¨²ltimo informe el pasado marzo.
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