¡°Si los Estados fr¨¢giles se convierten en fallidos todos tenemos un problema¡±

Uno viste traje y corbata, el otro una camiseta y botas negras, pendientes y gafas redondas de cristal azulado. Uno es el empresario estadounidense m¨¢s rico del mundo; el otro, una superestrella del rock. Uno (1955) es estadounidense, fundador de Microsoft; otro (1960), irland¨¦s, cantante de U2. Bill Gates y Bono acudieron la semana pasada a la Conferencia de Seguridad de M¨²nich, el foro internacional en el que se juntaron l¨ªderes de un mundo ya no tan unido. La sombra de Donald Trump presente en toda reuni¨®n o conversaci¨®n. Orden mundial, ej¨¦rcitos, terrorismo, vallas, refugiados, Siria, ?frica, fake news, asistencia humanitaria, bioterrorismo y pobreza... palabras repetidas en los grandes discursos. El pa¨ªs anfitri¨®n, Alemania, que da un paso al frente e impulsa un nuevo plan para ?frica, un intento de Africa first, nuevas responsabilidades de pol¨ªtica y desarrollo global. Altos cargos estadounidenses que acuden a tranquilizar las aguas revueltas y pedir aumento de inversi¨®n militar.

Los dos entrevistados son cabeza de dos organizaciones, la Fundaci¨®n Bill y Melinda Gates y ONE. Est¨¢n aqu¨ª para lanzar un mensaje p¨²blico y sonoro: la seguridad en salud global y la disminuci¨®n de la desigualdad en el mundo son armas tan importantes y ¨²tiles como las otras. Invertir en ellas debe ser una prioridad. Pensemos, cuentan, en pandemias, en su control, en lo que suceder¨ªa si ¨¦stas brotan en Estados fr¨¢giles, convulsos, empobrecidos, superpoblados; pensemos en lo que ha mejorado el estado del mundo en las ¨²ltimas d¨¦cadas con la receta de la colaboraci¨®n internacional; en lo que vendr¨¢ en las pr¨®ximas gracias a los avances de la tecnolog¨ªa, la ciencia, la conectividad... Y m¨¢s si pol¨ªtica y solidaridad van unidas. Est¨¢n sentados uno junto al otro y charlan con gusto. Se conocen bien. Frente a ellos, tres periodistas de medios europeos: La Repubblica, Die Welt y ELPA?S. Uno es m¨¢s reservado, discreto, observador y a menudo levanta el brazo derecho como abarcando un mundo pleno de retos e historias esperando ser contadas. "Nosotros amamos los medios", asegura. El otro, m¨¢s dicharachero, es activista declarado, un narrador nato. "La pobreza es sexista", afirma. Bill Gates bebe Coca-Cola Light y Bono un simple vaso de agua. ?Qu¨¦ diablos est¨¢n haciendo juntos?

¡°La cuesti¨®n es si la gente comprende que, despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial, el hecho de que los pa¨ªses colaboren ha sido absolutamente fant¨¢stico para la paz y el desarrollo¡± (Bill Gates)

Bill Gates. Nuestra relaci¨®n se remonta bastante en el tiempo. Nos conocimos en la cumbre de Davos celebrada en Nueva York, justo despu¨¦s del 11-S.

Bono. ?S¨ª, t¨² te estabas comiendo una Big Mac!

BG. Yo convenc¨ª a Bono para que aportase su labor y experiencias en ?frica. La fundaci¨®n estaba entonces en una fase muy inicial; la Alianza GAVI y el Fondo Mundial reci¨¦n comenzaban, y desde entonces hemos apoyado y amado el trabajo de ONE. Y hemos tenido muy buenos resultados.

B. Tras nuestro primer encuentro¡­ y el consejo diet¨¦tico (risas), fui a ver a Bill y Melinda intentando conseguir algo de financiaci¨®n para ONE, formalizar nuestra relaci¨®n y poder as¨ª contratar a la gente mejor y m¨¢s preparada para nuestra tarea. Pero tras la primera entrevista, lo que me qued¨® grabado fue: ¡°?No, aqu¨ª no se trata de dinero! Son estas dos personas las que ser¨¢n nuestra mayor ventaja¡±.

BG. Bueno, ¨¦ramos muy ingenuos¡­ En aquel momento nuestra teor¨ªa del cambio se basaba principalmente en ayudar a inventar nuevas herramientas, encontrar vacunas y f¨¢rmacos. No comprend¨ªamos bien entonces c¨®mo suministrarlos, lo dif¨ªcil que era hacerlos llegar a todos los ni?os pobres y vacunarlos; c¨®mo hab¨ªa problemas de cobertura, y cu¨¢nto depend¨ªamos de la ayuda exterior para obtener las vacunas existentes y las nuevas. Todo ese asunto de la distribuci¨®n y la ayuda exterior y la necesidad de aliarse con los diferentes Gobiernos se consigui¨® de hecho en a?os posteriores. Y lo que hizo ONE fue mostrar d¨®nde iban funcionando las cosas, buscar pol¨ªticos a los que realmente les interesasen estos temas y darnos la oportunidad de conocerlos. Los dos hemos aprendido mucho a este respecto. Y hay que contar la historia de la salud, que es una historia asombrosa. Hemos conseguido grandes avances en 15 a?os. Y suponiendo que la generosidad siga siendo fuerte, tendremos otros 15 a?os buen¨ªsimos, porque la ciencia nos lo permitir¨¢. Somos mucho menos ingenuos que cuando nos conocimos respecto a la capacidad de llevar estas cosas a cabo.

"Es extraordinario que los militares parecen ir a veces por delante de sus jefes en la necesidad de invertir en las personas, m¨¢s en previsi¨®n que en intervenci¨®n" (Bono)

B. He repetido a la gente en los ¨²ltimos d¨ªas que si los titulares les causan pesimismo, si les deprime el estado del mundo, que lean la carta anual de Bill y Melinda. Es literalmente la mejor noticia del mundo. Es incre¨ªble: 122 millones de ni?os se han salvado desde 1990. Es una locura: creo que son m¨¢s de 13.000 al d¨ªa, algo parecido. ?Es algo tremendo! Y, oye, si tu vida no te parece ¨²til, implicarte en un movimiento como ONE te da una gran sensaci¨®n de estar haciendo algo, porque realmente tienes impacto. De modo que yo les dir¨ªa ¡°¨²nete, participa¡±, porque realmente funciona.

Pregunta. Han asistido a la Conferencia de Seguridad de Munich para concienciar sobre las enfermedades como un riesgo para la seguridad mundial. ?Est¨¢n satisfechos con la Conferencia?

BG. Estamos satisfechos, porque la conciencia de la conexi¨®n que existe entre prosperidad, desarrollo y seguridad, y la relaci¨®n entre salud y seguridad, son muy fuertes aqu¨ª. As¨ª que calculo que hoy hablaremos mucho de epidemias, y de que es necesario colaborar con los organismos de seguridad y hacer inversiones y estar m¨¢s preparados. Y la canciller Merkel ha asegurado que, aunque est¨¢ dispuesta a aumentar los gastos en defensa, siempre hay que pensar conjuntamente en el gasto en desarrollo.

B. Esto es lo extraordinario, que los militares parecen ir a veces por delante de sus jefes en lo referente a la necesidad de invertir en las personas, la necesidad de invertir m¨¢s en previsi¨®n que en intervenci¨®n. Pienso que probablemente es porque conocen mejor que nadie el precio del conflicto. Y ya no hay nadie en Europa que piense que lo que ocurre en el norte de ?frica carece de importancia. Hace cinco a?os, era f¨¢cil pensar ¡°no me importa, est¨¢ lejos¡±, pero ahora sabemos lo cerca que est¨¢ el continente y yo creo que eso le ha dado prioridad a nuestro trabajo, el que hace la Fundaci¨®n Gates en relaci¨®n con la salud, las mejoras agr¨ªcolas, y el nuestro, que consiste en alentar a los pol¨ªticos que est¨¢n dispuestos a hacer las cosas bien.

P. ?Qu¨¦ opinan ustedes acerca de la nueva estrategia de desarrollo del Gobierno alem¨¢n, y de su impulso al llamado Plan Marshall para ?frica?

BG. Ahora mismo este Plan no dispone de cifras y forma concretas, pero lo que es fant¨¢stico es ver que se est¨¢ pidiendo la aportaci¨®n de los africanos. As¨ª que anoche [por el viernes pasado] cen¨¦ aqu¨ª en M¨²nich con grandes inversores del sector privado en ?frica y estoy aprendiendo de ellos. ?Qu¨¦ nos impide invertir m¨¢s all¨ª? ?Cu¨¢l es el problema? ?Qu¨¦ pueden hacer los Gobiernos de pa¨ªses ricos comprometidos en esto como Alemania? ?Y qu¨¦ deben hacer los africanos?

Los grandes actores del desarrollo son el sector privado y los Gobiernos. La filantrop¨ªa, ya sabe, es mi vida, pero en el gran guion de las cosas es s¨®lo una nota a pie de p¨¢gina" (Bill Gates)

B. Vi al ministro Wolfgang Sch?uble ayer [por el viernes pasado] y me impresion¨® la pasi¨®n que pon¨ªa en este proyecto, el Compacts for Africa del G20 (el Pacto Mundial por ?frica). Mostr¨® mucha pasi¨®n al afirmar que Alemania, Europa de hecho, necesitan Estados pr¨®speros, mantener una estrategia de Estados pr¨®speros. Hay tambi¨¦n buenas razones para hablar de Estados fr¨¢giles, porque los fr¨¢giles se convierten en fallidos, y entonces todos tenemos un verdadero problema... No existe nada peor que un espacio sin gobierno; en el caos, el radicalismo se impone. Debemos empezar a mirar a ?frica de otro modo. Hay riesgo, pero es una gran oportunidad. Hemos visto lo que ha sucedido cuando Siria, un pa¨ªs de 22 millones, cae en el olvido... ?Puede usted imaginarse un pa¨ªs 10 veces m¨¢s grande? Eso es Nigeria. Es objetivo declarado de Boko Haram que Nigeria falle. No s¨¦ si conocen la expresi¨®n "zona gris". ?Han o¨ªdo hablar de ella? La zona gris es la zona en la que cristianos y musulmanes se entienden, y de hecho y en general, en Nigeria hay una gran relaci¨®n. Es una comunidad muy interreligiosa. Eso es lo que se llama la zona gris. Si eres un extremista querr¨¢s destruirla. Acabo de estar en Borno, al noreste de Nigeria, y he visto¡­ lo qu¨¦ es tener m¨¢s de dos millones de desplazados: es un caos. [Bono participa ma?ana en la Conferencia de Donantes de Oslo para conseguir fondos y ayudar en la zona del Lago Chad). La idea que hay tras ese pacto mundial por ?frica es que teniendo Estados pr¨®speros, la gente no querr¨¢ salir de su pa¨ªs. El a?o pasado visit¨¦ campamentos de refugiados en cuatro pa¨ªses. El gran tema de conversaci¨®n com¨²n era ¡°queremos volver a casa¡±. No quieren subirse a una embarcaci¨®n para cruzar el mar. Hay que acercarse a las personas, ir donde est¨¢n y ayudarles a avanzar y prosperar. Y me entusiasma o¨ªr hoy a la canciller Merkel hablar de educaci¨®n, y de la de las ni?as en concreto, porque las estad¨ªsticas son una locura. Un ni?o que nace de una madre alfabetizada tendr¨¢ un 50% m¨¢s de probabilidades de superar los cinco a?os.

P. Y usted mismo le ha dado incluso el programa en su discurso durante esta Conferencia de Seguridad: las tres ¡°es¡± lo llam¨®: educaci¨®n, empleo y empoderamiento¡­

B. S¨ª, intentaba apoyarlo. Lo que se est¨¢ viendo del G20 alem¨¢n es en realidad extremadamente estrat¨¦gico e inteligente. No se trata solo de compasi¨®n y ayuda inteligente. Se trata de revisar una relaci¨®n de tal modo que si hay pa¨ªses dispuestos a enfrentarse a la corrupci¨®n, dispuestos a poner a las personas primero, dispuestos a establecer un buen gobierno, nosotros los apoyemos. Nosotros nos ponemos de su lado. Quiz¨¢, y Bill es realmente firme en esto, podamos ayudar a acelerar las conexiones.

P. ?Y qu¨¦ pasa con su estrategia para los refugiados? Ustedes [la Fundaci¨®n Gates] empezaron a trabajar el a?o pasado con la causa de los refugiados, con Siria¡­

¡°Ya no hay nadie en Europa que piense que lo que ocurre en el norte de ?frica carece de importancia¡± (Bono)

BG. S¨ª, como parte de nuestras actividades, no es gigantesco. Nuestra principal experiencia es en salud, y, de hecho, en saneamiento y servicios financieros por m¨®vil. As¨ª que dijimos, vale, aportemos lo que sabemos hacer bien y asegur¨¦monos de que los refugiados se benefician. Queremos asegurarnos de que est¨¢n llegando las vacunas a los campamentos, que disponen de retretes para evitar la difusi¨®n de enfermedades y tener una calidad de vida decente.

P. ?Les preocupa la creciente desconfianza que hay en Occidente hacia la vacunaci¨®n?

BG. Mire, las vacunas son totalmente seguras. En mi primera reuni¨®n con el presidente Trump iba a discutirlo con ¨¦l. El mensaje cal¨®. Ha habido algunos pa¨ªses ricos en los que las vacunaciones han ca¨ªdo por debajo del umbral de seguridad, y los casos de tosferina y sarampi¨®n han llegado incluso a causar muertes¡­ Es realmente tr¨¢gico. Es cierto que los rumores negativos a veces se mueven mejor que los datos positivos. A los datos positivos les resulta dif¨ªcil seguir el ritmo de las falsedades. Incluso eso sobre el autismo y la vacunaci¨®n, que se demostr¨® que era falso hace casi 20 a?os, ese art¨ªculo se retir¨® pero sigue circulando por ah¨ª. La comunicaci¨®n es un reto en el que debemos seguir trabajando.

Y por eso, en parte, tenemos tanto cuidado con la seguridad de las vacunas, porque si una vacuna tuviese problemas, perjudicar¨ªa a la percepci¨®n de la gente sobre todas las dem¨¢s, de modo que no podemos permitirnos riesgos, porque cualquier error perjudicar¨ªa todo el esfuerzo. Por eso la seguridad es tan importante, y esto hace que nos lleve mucho m¨¢s tiempo obtener la aprobaci¨®n de las vacunas de lo que se deber¨ªa, pero esto es algo que apoyamos firmemente.

P. Y si el presidente Trump decide recortar el presupuesto para programas de planificaci¨®n familiar, de educaci¨®n¡­ ?Qu¨¦ puede ocurrir con ?frica?

"S¨ª, librarnos de estas enfermedades infecciosas, a eso voy a dedicar el resto de mi vida. La Ciencia nos dar¨¢ cada vez mejores herramientas" (Bill Gates)

BG. Estados Unidos es en conjunto el mayor donante, unos 30.000 millones de d¨®lares al a?o, y aproximadamente 10.000 millones para temas de salud, entre ellos la malaria y el VIH. El Gobierno de Trump no ha presentado a¨²n su presupuesto, de modo que por ahora no lo ha reducido. Siempre que hay nuevos dirigentes, es imprescindible que la sociedad civil y organizaciones como las nuestras dejen claro que incluso en este contexto de America first, la estabilidad que se consigue, el rol econ¨®mico que se consigue al evitar una epidemia que podr¨ªa llegar a nuestras costas, estas son buenas inversiones. Conozco a Rex Tillerson, el nuevo Secretario de Estado, me reunir¨¦ con ¨¦l, en su nueva funci¨®n, dentro de unas semanas. Va a ser un reto, porque el presupuesto estadounidense est¨¢ muy ajustado, hay muchas prioridades, de modo que¡­ Y el asunto de la ayuda exterior siempre es duro, porque est¨¢ lejos, y te llega el cuento de que el 2% no se ha gastado adecuadamente, y eso contamina el otro 98%. Estamos en una ¨¦poca en la que realmente tenemos que hablar de la multitud de beneficios. Por eso estamos aqu¨ª.

B. Creo que los estadounidenses se vuelven m¨¢s patriotas cuando hablan de lo que su Gobierno hace para luchar contra el VIH/sida. Se sienten muy orgullosos, y esta es la mayor intervenci¨®n sanitaria en la historia de la medicina. Y fue un conservador quien la encabez¨®, el presidente Bush. Yo estuve en el Despacho Oval y le dije: ¡°Estas pastillas¡­ Puede usted pintarlas de rojo, blanco y azul, se?or presidente, y ser¨¢n la mejor publicidad de Estados Unidos que jam¨¢s consiga. Y ¨¦l se rio, pero llev¨® adelante el proyecto, y de hecho, la opini¨®n a favor de Estados Unidos es realmente elevada en ?frica. Pienso que mantener esa relaci¨®n podr¨ªa ser un imperativo no solo moral, sino tambi¨¦n estrat¨¦gico. Ya veremos¡­

P. Pero en muchos pa¨ªses occidentales, incluido, por supuesto, Estados Unidos, se est¨¢n ganando elecciones exigiendo poner su pa¨ªs por delante. Tambi¨¦n en Europa hay este debate. ?Piensa usted que esta conducta podr¨ªa afectar a sus proyectos internacionales, en ?frica, por ejemplo?

BG. Bien¡­ por supuesto, cada pa¨ªs se pone a s¨ª mismo primero. De modo que esas palabras por s¨ª solas no son un problema. La cuesti¨®n es si la gente comprende que, despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial, el hecho de que los pa¨ªses colaboren ha sido absolutamente fant¨¢stico para la paz y el desarrollo. Mi opini¨®n, por lo tanto, es que s¨ª, en Estados Unidos siempre hemos puesto nuestros intereses por delante y, redunda en nuestro inter¨¦s ser grandes donantes; la amistad con Europa y la colaboraci¨®n con Europa ha redundado en nuestro inter¨¦s. Y por lo tanto, creo que el peligro est¨¢ en que la poblaci¨®n se fije exclusivamente en el corto plazo, que no se d¨¦ cuenta de lo que se ha avanzado, y eso s¨ª es un reto.

"Visto lo sucedido en Siria, pa¨ªs con unos 22 millones de habitantes, ?qu¨¦ suceder¨ªa si fuera Nigeria, con 170 millones?" (Bono)

B. Setenta a?os de paz¡­ mediante la colaboraci¨®n mundial. Pienso que el recuerdo de un mundo en guerra se ha esfumado, y esa es la raz¨®n por la que Roosevelt y otros intentaron re-imaginar un mundo de cooperaci¨®n. Naciones Unidas, las instituciones de Bretton Woods, la OTAN¡­ Creo que probablemente es hora de volver a fijarse en ellas, pero fijarse en ellas en el sentido de mejorarlas, si es posible¡­ Tenemos que hacer eso con todo. Y creo que no hay opci¨®n, es decir, realmente no hay opci¨®n, no se puede mantener esta especie de mentalidad de isla, de izar los puentes levadizos. Las pandemias, las enfermedades, no respetan las ¨®rdenes. Esta globalizaci¨®n est¨¢ con nosotros. Nos hemos convertido en una especie de rey Canuto. ?Conoce la leyenda? Intent¨® parar las olas, y ya se sabe que eso es imposible. Tenemos que entender que las poblaciones han sufrido momentos duros. La crisis financiera mat¨® a Irlanda¡­ y muchos estaban furiosos, y sab¨ªan que no era culpa suya¡­ pero les toc¨® llevarse la peor parte. De modo que la gente se enfad¨® con la globalizaci¨®n, en algunas comunidades sobre todo.

Sabemos que la globalizaci¨®n ha sacado de la pobreza a cientos de millones de personas. Y ha sido buena para la econom¨ªa en general, pero no para todos. Y pienso que el capitalismo es una especie de bestia y tiene que recibir ¨®rdenes sobre c¨®mo comportarse. No podemos dejar que nos diga lo que tenemos que hacer. Y creo que eso es lo que est¨¢ ocurriendo. Hay un reinicio, y que este es un momento breve. Volveremos a un tiempo en el que las personas conf¨ªen unas en otras. La gente habla de posverdad, poshechos¡­ Podr¨ªamos estar en la posconfianza y pienso que reconstruirla va a ser muy importante. Y para lograrlo se necesita contar bien las historias.

¡°No hay nada peor que un pa¨ªs sin gobierno; en el caos, el radicalismo se impone¡± (Bono)

P. En su opini¨®n, ?salvar¨¢ la filantrop¨ªa el mundo o lo salvar¨¢ la pol¨ªtica?

BG. Bueno, la filantrop¨ªa es una parte muy peque?a de la econom¨ªa mundial. Incluso en Estados Unidos, donde tenemos una base muy amplia de todos los niveles, asciende al 2% de la econom¨ªa. Pero puede influir mucho. A veces, hay problemas que nadie del sector privado puede resolver, como la malaria. A menudo, estos requieren creatividad y aceptaci¨®n de riesgos, algo para lo que los Gobiernos quiz¨¢ no sean los mejores. La filantrop¨ªa puede financiar cosas geniales, como por ejemplo muchas de las nuevas vacunas que est¨¢n a punto de desarrollarse. Hemos logrado ponernos al frente de eso de un modo que no han conseguido los gobiernos. Pero cuando se trata de otra escala ¨Chablamos de la educaci¨®n de las ni?as, de sistemas agr¨ªcolas, de estabilidad, de justicia¨C dependemos por completo de los Gobiernos. De modo que los grandes actores de este mundo son el sector privado y los Gobiernos. La filantrop¨ªa, ya sabe, esa es mi vida, pero en el gran gui¨®n de las cosas es s¨®lo una nota a pie de p¨¢gina, cuyos proyectos piloto pueden ayudar a los dos grandes sectores a trabajar mejor.

P. Hay quien piensa que usted invierte gran cantidad de dinero en su fundaci¨®n porque siempre gana algo. ?Por qu¨¦ lo hace?

BG. Aparte de creer que todas las vidas tienen el mismo valor, no me imagino otra motivaci¨®n para financiar vacunas contra la malaria, o f¨¢rmacos contra la malaria, o para que Melinda viaje a Mali e intente reunirse con madres para saber cu¨¢les son sus necesidades de anticonceptivos, o realmente para mejorar la atenci¨®n primaria en comunidades rurales del norte de Nigeria. Y as¨ª es como gastamos el dinero. Ganamos dinero, ya sabe que Microsoft tuvo mucho ¨¦xito y proporcion¨® aproximadamente la mitad de los recursos de la fundaci¨®n, y ahora esta es la forma de devolverlo. No hay otro motivo. Es un trabajo muy placentero y va muy bien. Por eso me gusta dedicarle muchas horas, porque estoy entusiasmado con el progreso.

P. Bono, ?cu¨¢l es su motivaci¨®n personal para luchar en este terreno?

B. Valorar todas las vidas humanas por igual, y ese es el punto de partida. La ¨²nica raz¨®n de que podamos estar viendo c¨®mo el potencial humano se desperdicia y no hagamos nada es creer que esas vidas no son tan valiosas como las nuestras. El hecho de que se est¨¦ desperdiciando potencial humano realmente me enloquece. Cuando veo a un sin techo en la calle, pienso que podr¨ªa ser pintor o jugador de ajedrez; veo personas que por haber recibido una mala educaci¨®n de sus padres no consiguen ir a la universidad, porque fueron desgraciadas durante la adolescencia¡­ Veo todo esto alrededor. Pienso que la gente lo entender¨¢ de esta forma: debemos verlo pensando que el amor existe, y existe, el amor sirve a la idea del potencial humano. Y sea lo que sea, lo opuesto a eso se regocija desperdiciando el potencial humano.

Es asombroso alinearse con las fuerzas del amor, por ser abstracto, si me lo permite, porque cuando lanzas un pu?etazo, es mucho mayor el pu?etazo que esta estrellita de rock es capaz de dar, o incluso este gigantesco fil¨¢ntropo es capaz de dar. Te est¨¢s alineando con algo m¨¢s, pienso¡­ ?Y eso te hace sentir bien? S¨ª, eso de estar en el lado correcto de la historia. Y lo que hemos aprendido, siento repetirme, es que cre¨ªamos que la libertad, la justicia para todos, la igualdad¡­, cre¨ªamos que todas estas cosas nos eran dadas, que eran en cierto modo inevitables. Yo crec¨ª creyendo esto: que cada d¨ªa era un poco mejor, el respeto mutuo, los derechos de gais, los derechos de las mujeres, todo parec¨ªa avanzar hacia delante. Solo recientemente tenemos la sensaci¨®n de que esto podr¨ªa estarse ralentizando y uno piensa, vale, tal vez no era algo dado eso de avanzar y ahora tengamos que manifestarnos con mucha fuerza, con independencia de nuestro color pol¨ªtico. Ahora es el momento de colocarse donde uno quiere ser en esta conversaci¨®n, en esta marcha hacia la decencia.

P. ?Les preocupa el aumento de las noticias falsas?

BG. ?Por supuesto! No solo la noticias falsas, que son un problema, sino tambi¨¦n la idea de un lugar com¨²n, donde las personas leen las mismas cosas y ven solo aquello con lo que est¨¢n de acuerdo. Y mire, esto es una cr¨ªtica a la libertad digital que en ocasiones permite a algunos aislarse del mundo. Y creo que incluso est¨¢ forzando a quienes ven la tecnolog¨ªa como algo fenomenal a pensar en c¨®mo afrontarlo. De verdad creo que son sistemas que se corrigen a s¨ª mismos, que los datos falsos conducir¨¢n a la la gente a un callej¨®n sin salida y que al final esto no abrumar¨¢ a la ciudadan¨ªa. Pero es interesante que se est¨¦ debatiendo tanto.

"No solo las noticias falsas son un problema, sino la idea de ese lugar com¨²n, donde las personas leen las mismas cosas y ven solo aquello con lo que est¨¢n de acuerdo" (Bill Gates)

B. Tiendo a confiar en la direcci¨®n que sigue la tecnolog¨ªa de la informaci¨®n: avanza hacia una mejor informaci¨®n. Y ahora mismo estamos atravesando un periodo en el que se puede dar mala informaci¨®n y tal vez carezcamos de un mecanismo corrector. Pienso que se introducir¨¢n mecanismos de correcci¨®n en los sistemas. Hacer comprobaciones de datos no deber¨ªa ser tan dif¨ªcil, de hecho, porque hay verdades emp¨ªricas, la verdad es que las hay.

Y hay una reacci¨®n ante este tipo de noticias falsas. Estamos viendo ya surgir p¨¢ginas que hacen comprobaciones. Los ciudadanos empiezan a familiarizarse con esas p¨¢ginas. El control de la informaci¨®n, sin embargo, es lo que hay que vigilar, porque se puede hacer de dos maneras: impidiendo el acceso ¨Ces lo que aut¨®cratas y similares intentan hacer¨C o mediante la desinformaci¨®n. Eso es lo que tenemos que vigilar, all¨ª donde la verdad pierde credibilidad. Es algo muy, muy peligroso. Pero al final, no creo que el futuro est¨¦ en los hombres fuertes, pienso que est¨¢ en las mujeres instruidas.

P. Una ¨²ltima pregunta, su sue?o. ?Se erradicar¨¢ la malaria?

BG. Conseguir liberarnos de la polio [la batalla actual, quedan una treintena de casos] ser¨¢ un gran triunfo para la salud mundial, y dar¨¢ energ¨ªa y credibilidad a todo lo que hacemos y, creo yo, dar¨¢ energ¨ªa en especial a lo que ser¨¢ un esfuerzo de varias d¨¦cadas para librarnos de la malaria. La primera d¨¦cada de dicho esfuerzo se dedicar¨¢ a regiones determinadas, Sudam¨¦rica, sur de ?frica y sureste de Asia, para demostrar que podemos lograr erradicaciones regionales. Esos lugares no son tan dif¨ªciles como ?frica central. Pero si lo logramos en esas zonas y las herramientas y conocimientos siguen mejorando, por fin, en la segunda d¨¦cada, nos centraremos en ?frica ecuatorial, donde la malaria est¨¢ m¨¢s extendida. S¨ª, librarnos de estas enfermedades infecciosas, a eso voy a dedicar el resto de mi vida. No me cansar¨¦ de resaltar que la ciencia nos dar¨¢ cada vez mejores herramientas. Es cierto que debemos hablar de financiaci¨®n, es importante, pero estaremos mucho mejor armados dentro de cinco, de diez a?os. Y eso es muy emocionante.