Argentina reivindica el legado de Rodolfo Walsh a 40 a?os de su asesinato
Pionero del Nuevo Periodismo, muri¨® tiroteado por los marinos un d¨ªa despu¨¦s de denunciar los cr¨ªmenes de la dictadura en una carta abierta
"El primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acci¨®n de gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman aciertos son errores, los que reconocen como errores son cr¨ªmenes y lo que omiten son calamidades", afirm¨® Rodolfo Walsh en su Carta abierta de un escritor a la Junta Militar del 24 de marzo de 1977. Un d¨ªa despu¨¦s, un grupo de tareas de la Armada lo mataba a tiros en una esquina de Buenos Aires. "Colmadas las c¨¢rceles ordinarias, crearon ustedes en las principales guarniciones del pa¨ªs virtuales campos de concentraci¨®n donde no entra ning¨²n juez, abogado, periodista, observador internacional", denunci¨® Walsh en el texto. La carta ha sido le¨ªda como su testamento y a d¨ªa de hoy, 40 a?os despu¨¦s, se mantiene como un testimonio inigualable de los horrores de la ¨²ltima dictadura argentina (1976-1983).
Tras dispararle, los militares trasladaron a Walsh al mayor de los centros de exterminio y tortura que revelaba en su misiva, la Escuela Superior de Mec¨¢nica de la Armada (ESMA). Los asesinos de Walsh hicieron desaparecer su cuerpo, pero fracasaron en silenciar a una de las voces m¨¢s inc¨®modas y comprometidas contra la dictadura argentina. El escritor, periodista y militante montonero es homenajeado estos d¨ªas en art¨ªculos, exposiciones y actos por toda Argentina y sus escritos suman cada vez m¨¢s lectores, dentro y fuera del pa¨ªs.
Nacido en Choele-Choel e hijo de un mayordomo de origen irland¨¦s, Rodolfo Walsh (1927-1977) dio sus primeros pasos en literatura dentro del g¨¦nero policial hasta que, a los 29 a?os, la investigaci¨®n de los fusilamientos clandestinos ocurridos en un basural de la localidad bonaerense de Jos¨¦ Le¨®n Su¨¢rez en 1956 cambi¨® su vida. La reconstrucci¨®n de estos cr¨ªmenes atroces dio origen a Operaci¨®n Masacre (1957), una de las obras cumbre de Walsh y con la que inaugur¨® el Nuevo Periodismo nueve a?os antes que Truman Capote con A sangre fr¨ªa.
"En ese momento era tan ingenuo y tan ajeno a la militancia pol¨ªtica que pens¨® que lo pod¨ªa sacar en Life y ganar un Pulitzer. Pens¨® que todos los medios se lo disputar¨ªan", recuerda el periodista y exmilitante Miguel Bonasso, quien trabaj¨® con Walsh en el diario Noticias. Al contrario de lo que imaginaba, una editorial tras otra rechaz¨® su investigaci¨®n sobre ese episodio de represi¨®n perpetrado durante la dictadura del general Pedro Eugenio Aramburu y sali¨® primero por fasc¨ªculos en los diarios Revoluci¨®n Nacional y Mayor¨ªa.
"Ah¨ª comenz¨® a operarse una transformaci¨®n en su conciencia que lo llevar¨¢ hasta a arriesgar su propia vida", afirma Bonasso. Operaci¨®n Masacre le hizo saltar de la literatura al periodismo y el periodismo lo llev¨® a la militancia en la organizaci¨®n Montoneros, en la que fue oficial de inteligencia. "Walsh debe ser recordado de manera integral, como escritor, periodista y militante. Ejerci¨® las tres cosas con un compromiso absoluto", agrega. Bonasso recuerda que en la carta a la Junta Walsh ya deja sentado que se trata de una dictadura c¨ªvico-militar. "En la pol¨ªtica econ¨®mica de ese Gobierno debe buscarse no s¨®lo la explicaci¨®n de sus cr¨ªmenes, sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada", escribi¨® Walsh.
Operaci¨®n Masacre es tambi¨¦n el coraz¨®n de la muestra que la Biblioteca Nacional inaugurar¨¢ en homenaje a Walsh la pr¨®xima semana. En sus vitrinas se exhibir¨¢n las pruebas de galera de la tercer edici¨®n de ese libro que Walsh actualiz¨® hasta cuatro veces. Tambi¨¦n se mostrar¨¢n otras de sus obras, como El caso Satanowsky (sobre el asesinato del abogado Marcos Satanowsky, ocurrido en 1957), Qui¨¦n mat¨® a Rosendo (sobre el homicidio del sindicalista Rosendo Garc¨ªa, en 1966) y las recopilaciones de cuentos Un kilo de oro y Los oficios terrestres.
Otra muestra reci¨¦n inaugurada en el Museo Sitio de la Memoria ESMA reconstruye a partir de testimonios judiciales de supervientes el ¨²ltimo cuento de Walsh, Juan se iba por el r¨ªo, y el traslado de Walsh a la ESMA. Su hija, la exdiputada y periodista Patricia Walsh, sigue buscando el cuento y, en especial, los restos de su padre.
'Asaditos' macabros
"Mi padre desconfiaba de los homenajes", asegura Patricia Walsh, a quien la dictadura arrebat¨® tambi¨¦n a su hermana, Victoria. A 40 a?os de la desaparici¨®n de Rodolfo Walsh, Patricia pide saber qu¨¦ hicieron los militares con ¨¦l despu¨¦s de asesinarlo. "?D¨®nde est¨¢ el cuerpo? ?Alguien lo busca? La respuesta es no, aunque es probable que pueda estar en el Campo de Deportes Ernesto del Monte, que pertenec¨ªa a la ESMA", denuncia. "Si no era mi¨¦rcoles, el d¨ªa de los vuelos de la muerte, los llevaban all¨ª y hac¨ªan lo que llamaban 'el asadito', incineraban los cuerpos para deshacerse de ellos", contin¨²a. La exlegisladora exige que la Justicia busque a su padre en ese lugar y que, paralelamente, ese siniestro pasado quede reflejado en carteles in situ.
Patricia Walsh critica tambi¨¦n la lentitud con la que avanza el tercer juicio por los cr¨ªmenes perpetrados en la ESMA, que est¨¢ ya en su cuarto a?o. Considera que la dilataci¨®n temporal supone una "vuelta a la impunidad" en forma de "impunidad biol¨®gica", es decir, que los represores mueran sin condena o se les concede el arresto domiciliario debido a su avanzada edad. Igualmente, pelea para que la ¨²ltima casa en la que se ocult¨® su padre -y que fue destrozada y saqueada por los militares horas despu¨¦s de matarlo- sea expropiada a los familiares del polic¨ªa que viven en ella y convertida en un sitio de memoria.
"La memoria no se silencia", advierte Patricia. La carta que Rodolfo Walsh escribi¨® a la Junta Militar no fue publicada por ninguno de los medios que la recibieron por correo ese 25 de marzo. Pero 40 a?os despu¨¦s, pocos argentinos hay que no la conozcan.
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