En Argentina se discute hasta el color de la bandera: ?Debe ser albiceleste?
Cient¨ªficos descubren que uno de los primeros estandartes del pa¨ªs no era celeste sino azul y se reaviva la pol¨¦mica sobre los s¨ªmbolos patrios
?Azul celeste, azul o celeste? El dise?o de la bandera argentina es una pol¨¦mica que lleva dos siglos y que, en realidad, sirve de pre¨¢mbulo de un debate mayor, en el que se pone en juego el car¨¢cter e identidad de la independencia argentina. Ahora, un grupo de cient¨ªficos del Conicet, el prestigioso centro de investigaciones argentino, analizaron un pabell¨®n que data de 1814 y descubrieron que el verdadero color no es celeste, sino azul. El hallazgo, que puede sonar intrascendente, en realidad puede servir para determinar cuan negociada estuvo la libertad de las tierras en las que ahora se sit¨²a Argentina. Sin embargo, la bandera analizada, obsequiada por el primer gobernador de la provincia de Tucum¨¢n, Bernab¨¦ Ar¨¢oz, al Templo de San Francisco, es dos a?os m¨¢s nueva que la de macha, la primera que se enarbol¨®.
¡°Cuando triste la Patria esclavizada con valor sus v¨ªnculos rompi¨®¡±, reza una estrofa de la marcha a la bandera argentina. La pieza, cantada por primera vez por los soldados en Campo de Mayo a fines de 1906, es una oda al pabell¨®n creado por Manuel Belgrano e izado por primera vez en la ciudad de Rosario, el 27 de febrero de 1812, en ocasi¨®n de la apertura de los fuertes Independencia y Libertad, dos t¨¦rminos que estaban prohibidos en ¨¦pocas de incipiente emancipaci¨®n, cuando la rep¨²blica era apenas una idea que tomaba forma en algunas pocas cabezas de la ¨¦poca.
Independencia y libertad
¡°EXCELENT?SIMO SE?OR:
En este momento que son las seis y media de la tarde se ha hecho la salva en la bater¨ªa de la Independencia y queda con la dotaci¨®n competente para los tres ca?ones que se han colocado, las municiones y la guarnici¨®n.
He dispuesto para entusiasmar las tropas y estos habitantes, que se formasen todas aqu¨¦llas y les habl¨¦ en los t¨¦rminos de la copia que acompa?o.
Siendo preciso enarbolar Bandera, y no teni¨¦ndola la mand¨¦ hacer blanca y celeste conforme a los colores de la escarapela nacional; espero que sea de la aprobaci¨®n de V.E.
Dios guarde a V.E. muchos a?os. Rosario, 27 de febrero de 1812.
Excelent¨ªsimo Se?or
Manuel Belgrano
Pero claro, la dinast¨ªa borb¨®nica todav¨ªa presente en el R¨ªo de la Plata obligaba una salida concertada. Es ah¨ª donde la figura de Belgrano se vuelve fundamental para que la soberan¨ªa argentina se construya sin herir susceptibilidades. Entonces, ?Es la bandera argentina un mensaje pol¨ªtico para los realistas propios y ajenos?
¡°Si, es un mensaje pol¨ªtico¡±, responde a EL PA?S el historiador Felipe Pigna, autor del libro Manuel Belgrano-El hombre del Bicentenario (Planeta, 2016). ¡°En principio, porque cuando ¨¦l hace la bandera, que se basa en la escarapela, tiene que ver con varias cuestiones, la m¨¢s importante es la relaci¨®n con Espa?a. Tenemos la propia descripci¨®n de Belgrano que habla de la bandera azul celeste, que se asemeja a la que usaron los borbones, la orden de Carlos III.
En aquel contexto, en el que no pod¨ªamos decir que quer¨ªamos ser independientes parec¨ªa l¨®gico un emblema con los colores borb¨®nicos¡±, argumenta, y recuerda: ¡°Cuando la crea, en febrero del a?o 12, Rivadavia era la autoridad. Se trata de un hombre conservador y allegado a Gran Breta?a que lo reprende. ¡®?C¨®mo vamos a tener una bandera propia?¡¯, le dice y la manda a destruir. Hay un mensaje claro en Belgrano que se complementa con un acto colateral que es la creaci¨®n de las bater¨ªas en las costas del Paran¨¢ a las cuales llama Independencia y Libertad¡±.
El que sale al cruce es Manuel Belgrano, aunque no el pr¨®cer muerto en 1820 sino su chozno, presidente del Instituto Nacional Belgraniano: ¡°En 1815, Belgrano estaba en Londres y se hace pintar un retrato que tiene en el fondo una escena de guerra en la que aparecen tres banderas, todas celestes. Ese es un documento muy importante porque el celeste no era un color her¨¢ldico, o sea que el retratista, que era un franc¨¦s, no iba a inventarse el color. Eso determina que as¨ª lo pidi¨® Belgrano¡±.
¡°No discuto que eran los colores borb¨®nicos y no hay que olvidar que todav¨ªa est¨¢bamos bajo los juramentos de fidelidad a Fernando VII. Cuando Manuel Belgrano hace la bandera estaba convencido que no iba m¨¢s esa fidelidad y ese es un punto muy importante. El dice ¡®Siendo preciso enarbolar Bandera, y no teni¨¦ndola la mand¨¦ hacer blanca y celeste conforme a los colores de la escarapela nacional¡¯¡±, completa el descendiente de Belgrano, licenciado en Administraci¨®n Agraria. ¡°Me enoja cuando a un s¨ªmbolo patrio se lo lleva para un lado u otro con tantas dudas que prestan a la confusi¨®n de los ciudadanos¡±, se ofusca, y algo de raz¨®n tiene: hace 200 a?os que el desconcierto flamea con los vientos.
"Como el cielo refulgente"
Carlos Della V¨¦dova, uno de los cient¨ªficos a cargo de la investigaci¨®n es quien arm¨® ¡°un rompecabezas de todos los pigmentos utilizados en la ¨¦poca y descubrimos que el color amarillo pertenece a un mineral denominado crocroita (cromato de plomo). Tambi¨¦n encontramos sales de esta?o homog¨¦neamente distribuidas en la bandera, tal vez, para que no se la coman las polillas¡±. El sol incaico incorporado en 1818 en forma oficial a la bandera argentina refuerza a¨²n m¨¢s la teor¨ªa de mensaje pol¨ªtico hecho bandera.
Manuel Belgrano se comprometi¨® a incluir en el pabell¨®n una se?al de complicidad con la iglesia cat¨®lica, para que la uni¨®n entre la nueva naci¨®n y el Vaticano sea eterna. Incluye en el dise?o un sol que deb¨ªa tener 33 rayos, en evocaci¨®n a la edad que ten¨ªa Jesucristo al morir. Pero el gesto hubiese significado para el pr¨®cer una violaci¨®n a sus principios, dado que era un defensor de la causa de los pueblos originarios, ya enfrentados al poder eclesi¨¢stico. El enga?o consisti¨® en hacer un sonriente sol que a la postre se reconoci¨® como incaico, pero no con 33 rayos, sino con 32.
No es casual: Manuel Belgrano fue un defensor de los pueblos originarios. Esa relaci¨®n lo llev¨® a proponer otra idea revolucionaria. Oscar Tabernise, un dramaturgo que hizo un documental sobre esta historia, la cuenta: ¡°Encontramos documentos que hablan del proyecto de Belgrano y San Mart¨ªn -que estuvo a dos d¨ªas de concretarse- de proponer una monarqu¨ªa inca a cargo de Juan Bautista Tupac Amaru, el hermano del mayor revolucionario ind¨ªgena; los registros estaban en el cementerio de la recoleta porque all¨ª est¨¢ su b¨®veda aunque nunca se encontr¨® el cuerpo. Es un desaparecido m¨¢s. Fiel a la historia m¨¢s oscura de Argentina¡±.
¡°Belgrano sabe que esa proclamaci¨®n es imposible pero logra desactivar el proyecto mon¨¢rquico, muy fuerte en el Congreso, que era coronar a pr¨ªncipes europeos. El argumento de los defensores de la monarqu¨ªa es como van a coronar a un inca, que es una propuesta ex¨®tica, y Belgrano responde que es mucho m¨¢s ex¨®tico coronar a un pr¨ªncipe europeo¡±, relata Pigna, y concluye: ¡°Para ¨¦l, la creaci¨®n de la bandera es un hecho menor en su vida, al punto que nunca lo destac¨® como ejemplar, pero es una figura que siempre politiz¨® sus acciones¡±.
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