Europa endurece las directrices de negociaci¨®n del ¡®Brexit¡¯
Los socios europeos escenifican en Bruselas una postura unitaria frente a Londres en la negociaci¨®n del 'Brexit'
Firmeza, unidad y una puesta en escena arrolladora. Los l¨ªderes de los Veintisiete aprobaron este s¨¢bado por unanimidad y de forma fulminante ¡ªel debate dur¨® cuatro minutos: algo in¨¦dito en Bruselas¡ª las l¨ªneas maestras de la negociaci¨®n sobre el divorcio con el Reino Unido. El reloj del Brexit est¨¢ en marcha. Y Europa endurece su posici¨®n: empezar¨¢ hablando de dinero, de Irlanda y tiene ya una lista de derechos de los europeos en las islas (y de los brit¨¢nicos en la UE). Solo cuando haya ¡°avances suficientes¡± en esos asuntos se negociar¨¢ la futura relaci¨®n comercial de Reino Unido y Europa, la gran obsesi¨®n de Londres.
Los Veintisiete gobiernos comunitarios est¨¢n decididos a mostrar a Londres que las deserciones tienen un coste. Las directrices de la negociaci¨®n dejan claro que si Reino Unido pretende beneficiarse de un futuro acuerdo de asociaci¨®n con Europa, primero tendr¨¢ que pagar las facturas pendientes ¡ªde 40.000 a 60.000 millones, seg¨²n las primeras estimaciones¡ª y garantizar los derechos de los tres millones de ciudadanos de la UE que viven en las islas (y como contrapartida, la Uni¨®n garantizar¨¢ los del mill¨®n y medio de brit¨¢nicos en suelo continental). Los chantajes brit¨¢nicos no han hecho mella, hasta ahora, en la posici¨®n europea. Los llamamientos a la unidad han funcionado en un club en el que las divisiones son casi un clich¨¦; un lugar com¨²n. La prueba es que los l¨ªderes tardaron apenas unos minutos en aprobar los principios de la negociaci¨®n, con un tono algo m¨¢s duro de lo previsto.
#EUCO: Unity in action: #EU27 adopt #Article50 Guidelines in less than 15 minutes. #Brexit
— Jean-Claude Juncker (@JunckerEU) April 29, 2017
Ser¨¢ una negociaci¨®n por fases, en la que el futuro acuerdo comercial tardar¨¢ en empezar a discutirse: justo lo contrario de lo que quer¨ªa Londres. Y Europa ni siquiera evita poner el dedo en el ojo en asuntos espinosos, como Gibraltar y la reunificaci¨®n de Irlanda. Los brit¨¢nicos ¡°no deber¨ªan hacerse ilusiones¡± acerca de un acuerdo r¨¢pido que les permita el acceso al enorme mercado interior de la UE, afirm¨® la canciller Angela Merkel. ¡°El adi¨®s a la UE tiene un precio¡±, subray¨® el franc¨¦s Fran?ois Hollande. Las ocho p¨¢ginas de las directrices de negociaci¨®n ofrecen varias muestras de dureza, pero la ret¨®rica de los l¨ªderes europeos no le va a la zaga: ¡°Los brit¨¢nicos han subestimado las dificultades¡±, resumi¨® el presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker.
</IL>Europa est¨¢ dispuesta a regatear en la factura del Brexit, pero quiere que Londres pague lo que le toca. Y pondr¨¢ el mayor grado de firmeza en lo relativo a los derechos de la ciudadan¨ªa. No basta un acuerdo de caballeros: los Veintisiete exigen por escrito que Londres ofrezca garant¨ªas ¡°efectivas, vinculantes, no discriminatorias y completas, incluido el derecho de adquirir la residencia permanente tras un periodo ininterrumpido de cinco a?os de residencia legal¡±. Europa ha identificado un ¡°c¨®ctel¡± con 25 condiciones legales para los europeos que viven en Reino Unido, que el Gobierno de May debe respetar si quiere un acuerdo. Con todo, Bruselas considera que ese asunto no ser¨¢ un escollo insalvable, a la vista de que May se muestra dispuesta, sobre el papel, a zanjar ese cap¨ªtulo cuanto antes.
Eso s¨ª, ¡°tiene que haber garant¨ªas reales¡±, que se apliquen en la pr¨¢ctica sin trabas burocr¨¢ticas injustificadas, explic¨® el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk: Bruselas teme que Londres acceda a sus demandas, pero acabe poniendo problemas por la puerta de atr¨¢s.
La pista del dinero
Esa es la prioridad europea, pero los l¨ªderes saben que para desentra?ar el Brexit, como en las novelas policiacas, hay que seguir la pista del dinero. Londres lleva meses diciendo que no est¨¢ por la labor de seguir pagando al presupuesto comunitario. Solo muy recientemente ha filtrado, a trav¨¦s del Daily Mail, que podr¨ªa seguir con sus contribuciones hasta 2020 y m¨¢s all¨¢. Bruselas calcula en 60.000 millones esa factura, aunque alg¨²n primer ministro indic¨® este s¨¢bado que la cuenta podr¨ªa reducirse a 40.000 millones. Los brit¨¢nicos piensan que la cifra final ser¨¢ inferior. Y su plan es esperar y ver: la inquebrantable unidad europea podr¨ªa empezar a resquebrajarse por esa l¨ªnea de falla. Reino Unido es la segunda econom¨ªa de Europa y uno de los mayores contribuyentes netos: unos 10.000 millones al a?o.
La UE tendr¨¢ que funcionar con 10.000 millones anuales menos u obligar a las capitales a poner el dinero. Los contribuyentes netos (los socios m¨¢s ricos) no quieren o¨ªr hablar de eso; los receptores advierten que no tolerar¨¢n rebajas en lo que perciben. ¡°La unidad mostrada es sorprendente, pero cuando se planteen las cuestiones presupuestarias habr¨¢ problemas¡±, se sincer¨® Juncker. La cumbre sirvi¨® para ver los primeros escarceos: en el debate pol¨ªtico posterior a la aprobaci¨®n de las directrices, cada uno de los jefes de Estado o de Gobierno empez¨® con su particular qu¨¦ hay de lo m¨ªo, seg¨²n las fuentes consultadas.
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