?Apoyar a Macron o abstenerse y ayudar a Le Pen? La duda de los votantes de M¨¦lenchon
Pese a la amenaza ultraderechista, los seguidores de Francia Insumisa dudan entre votar a Macron o la abstenci¨®n
Votar a Emmanuel Macron, hacerlo en blanco u optar por la abstenci¨®n. Son las decisiones a las que se enfrentan los seguidores de Francia Insumisa, la plataforma liderada por el izquierdista Jean-Luc M¨¦lenchon de cara a la segunda vuelta de las presidenciales francesas que se celebrar¨¢ el domingo que viene. El candidato de la izquierda radical, que consigui¨® reunir el 19,6% de los votos, ha preferido por el momento no dar ninguna consigna de voto a sus electores. ¡°No soy ni un gur¨² ni un gu¨ªa¡±, insisti¨® M¨¦lenchon en su arenga del viernes a trav¨¦s de su exitoso canal de YouTube.
Ser¨¢n las bases de la formaci¨®n las que fijar¨¢n una posici¨®n com¨²n a trav¨¦s de una votaci¨®n en Internet que concluir¨¢ el pr¨®ximo martes. 450.000 personas que se inscribieron en la p¨¢gina web de Francia Insumisa antes de la primera vuelta est¨¢n llamadas a votar para encontrar una posici¨®n com¨²n de cara a la recta final de los comicios. Estos militantes sin carn¨¦ no pagan cuotas: bastaba con dar un nombre y un c¨®digo postal para ser considerado miembro del movimiento. La decisi¨®n del l¨ªder izquierdista ha convertido a sus electores en objeto de numerosas cr¨ªticas. Se les acusa de seguir el juego a los ultras del Frente Nacional especulando con la abstenci¨®n. Consciente de la magnitud de este dilema, la candidata Marine Le Pen multiplica los mensajes para evitar que, cuando llegue el domingo, los melenchonistas introduzcan un voto por su rival (Macron) en la urna.?
450.000 simpatizantes de Francia Insumisa deciden la consigna de voto para la segunda vuelta a trav¨¦s de una votaci¨®n por Internet
El sentimiento principal es, de momento, la duda. Incluso en la c¨²pula de la organizaci¨®n. Jean-Charles Lallemand, polit¨®logo de 44 a?os y miembro de la ejecutiva del Partido de Izquierda, uno de los pilares de Francia Insumisa, aprueba el silencio de M¨¦lenchon en nombre de la unidad del partido, y duda entre votar en blanco o por Macron. ¡°Su opini¨®n [del l¨ªder de Francia Insumisa] es importante, pero las consignas no son eficaces. Cada uno decidir¨¢ en la cabina electoral¡±, explicaba el viernes en la p¨¢gina web, donde la opci¨®n de votar por Le Pen no figura entre las propuestas. ¡°Esa ser¨¢ la ¨²nica consigna que daremos: ning¨²n voto debe ir a la ultraderecha¡±, afirma. Pese a todo, un sondeo reciente de IFOP apunta que el 18% de los simpatizantes de Francia Insumisa votar¨¢ por Le Pen. Un 47% lo har¨¢ por Macron, mientras que el 35% restante se abstendr¨¢.?
Frente a esas cifras, las bases tambi¨¦n vacilan. Claire, fot¨®grafa parisina de 44 a?os, se politiz¨® hace pocos meses gracias a M¨¦lenchon. ¡°No hab¨ªa votado en la vida porque no creo en la democracia participativa. Hasta que lo escuch¨¦ hablar en televisi¨®n. Me pareci¨® que hablaba de humanos y no de n¨²meros¡±, relata. Tras muchas dudas, el domingo votar¨¢ a Macron. ¡°Si ganara Le Pen, me sentir¨ªa demasiado culpable¡±, explica. Igual que ella, Marie-Maude, gestora de datos de 40 a?os, se resigna a votar por el centrista. ¡°Intento recordar que el Frente Nacional es un partido racista, aunque sin excusar a los neoliberales ni olvidar que son responsables de su ascenso¡±, sostiene. Tambi¨¦n Violaine, directora art¨ªstica de 33 a?os, apostar¨¢ por Macron: ¡°Lo votar¨¦ sin dudarlo, pero entiendo a los abstencionistas. Estamos hartos de que nos hagan chantaje con el FN¡±.?
Vincent, t¨¦cnico en la construcci¨®n de 62 a?os, coordina uno de los 2.700 comit¨¦s de apoyo a M¨¦lenchon que existen en el territorio franc¨¦s. Es de los que a¨²n no se han decidido. ¡°Nos hacen escoger entre el odio al extranjero y el odio al pobre. A mi edad me cuesta hacer concesiones, porque acumulo m¨¢s decepciones que un elector joven¡±, asegura. Pero entre los militantes menos veteranos tampoco hay unanimidad. Estas son las primeras presidenciales de Arthur, estudiante de Ciencias Pol¨ªticas de 20 a?os. El domingo votar¨¢ en blanco. ¡°La extrema derecha me asusta, pero terminar¨¢ por llegar al poder de todas formas. Si no es ahora, ser¨¢ dentro de cinco a?os¡±. No teme cargar con la culpa si Le Pen se impone en las urnas. ¡°En un solo a?o de campa?a, hemos logrado que el FN baje. Ni Macron ni los socialistas deber¨ªan darnos lecciones, porque son ellos quienes contribuyeron a que subiera¡±, asegura.?
La tentaci¨®n abstencionista aumenta cuando uno se aleja de la capital. En algunos puntos de la Lorena francesa, donde el FN hace estragos desde que las minas cerraron, M¨¦lenchon obtuvo excelentes resultados. Por ejemplo, en la peque?a localidad de Val de Briey logr¨® el 25% de los votos, aunque Le Pen le superara en dos puntos. Muchos de los electores del izquierdista no ir¨¢n a votar en la segunda vuelta. Por ejemplo, Claude, jubilado de 74 a?os que trabaj¨® como ferroviario y transportista. ¡°La abstenci¨®n implica un peligro, pero lo asumo totalmente. Si Le Pen gana, nos enfrentaremos a ella¡±, afirma. En el pueblo vecino de Moutiers, Francia Insumisa obtuvo el 35% de los votos, cinco puntos por encima de Le Pen. Mary-Annick, comercial de 68 a?os, tambi¨¦n se abstendr¨¢. ¡°S¨¦ que es grave, pero no veo otra soluci¨®n. Creo que Le Pen ganar¨¢, pero puede acabar siendo bueno. Necesitamos un shock. Tal vez la ultraderecha deba llegar al poder para que los franceses entiendan lo que es¡±.
¡°La peste o el c¨®lera¡±
Desde su casa, en la localidad fronteriza de Longwy, Daniel Cano otea tres pa¨ªses a la vez: Francia, B¨¦lgica y Luxemburgo. Este hijo y nieto de republicanos espa?oles, de 66 a?os, que antes fue teniente de alcalde ecologista, preside el comit¨¦ local de apoyo a M¨¦lenchon. Compara su dilema con ¡°escoger entre la peste y el c¨®lera¡±. ¡°Mi familia qued¨® destrozada por el franquismo. Mi t¨ªo fue fusilado y mi abuelo pas¨® siete a?os en la c¨¢rcel. Para m¨ª es inconcebible que gane Le Pen¡±, afirma. A la vez, est¨¢ casi seguro de abstenerse. Solo ir¨¢ a votar si los sondeos apuntan a un empate. ¡°Si Le Pen no est¨¢ a m¨¢s del 40%, Macron puede prescindir de mi voto¡±, afirma Cano, quien cree que una eventual victoria de la ultraderecha podr¨ªa desencadenar en ¡°otra guerra civil¡±.
De regreso a Par¨ªs, el chileno Christian Rodr¨ªguez, responsable de relaciones internacionales en la campa?a de M¨¦lenchon, tambi¨¦n conoce el fascismo de cerca. Lleg¨® a Francia como refugiado pol¨ªtico en 1982, tras pasar un a?o encarcelado por el r¨¦gimen de Augusto Pinochet por su activismo como l¨ªder estudiantil. ¡°Yo nunca he votado a la derecha y, a¨²n menos, a la extrema derecha. Pero tampoco voy a apoyar un proyecto que propone la destrucci¨®n del c¨®digo laboral y la continuidad del neoliberalismo¡±, resume. De cara al domingo que viene, Rodr¨ªguez duda entre el voto en blanco y la abstenci¨®n. ¡°Entre la extrema finanza y la extrema derecha¡±, como plante¨® M¨¦lenchon. Esa es la cuesti¨®n.
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