Le Pen y Macron endurecen sus ataques y agitan el miedo
La jefa del FN acusa a su rival de ser el candidato de la banca y ¨¦l replica que ella es la anti-Francia
![Marc Bassets](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fauthor-service-images-prod-us-east-1.publishing.aws.arc.pub%2Fprisa%2F77e7b3c3-f032-4be1-9b04-8d2f44667555.png?auth=743de4a55c2711401b95c7ca3206c9372e5d2c3a6ed91cc9bf3f9d64eec6d78a&width=100&height=100&smart=true)
![El candidato centrista Emmanuel Macron canta la Marsellesa al final de su mitin en Par¨ªs](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/NAC2MFRAC4JYPUEMFJGXYNGRPY.jpg?auth=fa7ad8ee8d2b8a0ab373e6933c42147f587d8cf24faea20916b80c6267b98b02&width=414)
Marine Le Pen y Emmanuel plantean las elecciones del domingo en Francia como una cuesti¨®n existencial, un momento en que est¨¢ en juego la supervivencia de la naci¨®n y la democracia. A falta de cinco d¨ªas para la segunda vuelta de las presidenciales, ambos agitan el miedo. Miedo al extranjero, a la disoluci¨®n de la identidad francesa y a la p¨¦rdida de la soberan¨ªa que, seg¨²n Le Pen, ocurrir¨¢n ineluctablemente si gana Macron, el candidato de la ¡°casta¡±, dijo. O miedo a la llegada al poder de un partido de extrema derecha ¡ªde ¡°la anti-Francia¡±¡ª que hace peligrar la paz y las libertades.
Le Pen y Macron dieron ayer los ¨²ltimos grandes m¨ªtines programados en esta campa?a, ambos en la regi¨®n parisina, a 25 kil¨®metros uno de otro y con cinco horas de diferencia, miles de militantes movilizados y una ret¨®rica cada d¨ªa m¨¢s agresiva.
El mensaje de Le Pen: el 7 de mayo se enfrentan el pueblo contra las ¨¦lites, los trabajadores contra los banqueros, la naci¨®n independiente contra la globalizaci¨®n ciega. ¡°Nuestro Gobierno no ser¨¢ el de la casta, sino el de todos los franceses¡±, dijo ante unas seis mil personas en su gran mitin en un fr¨ªo centro de convenciones en Villepinte, en las afueras de Par¨ªs.
El mensaje de Macron, en un hangar en el barrio multicultural de La Villette, en Par¨ªs: el Frente Nacional de Le Pen es un partido de extrema derecha, con un pasado radical y violento apenas disimulado, un partido cuyas medidas econ¨®micas dinamitar¨ªan el bienestar franc¨¦s y cuya respuesta al terrorismo podr¨ªa precipitar al pa¨ªs en la guerra civil. ¡°El Frente Nacional¡±, dijo, ¡°es el partido de la anti-Francia¡±.
En la recta final de estas elecciones ¡ªelecciones que decidir¨¢n la posici¨®n de Francia en Europa y, por tanto, el rumbo de Europa¡ª ambos candidatos forcejean por definir al otro en los t¨¦rminos m¨¢s negativos posibles. Macron, seg¨²n Le Pen es un t¨ªtere movido por oscuros intereses, el hombre del establishment pol¨ªtico, econ¨®mico y medi¨¢tico. Mientras, Macron intenta arrinconar a Le Pen recordando el ADN ultra y el pasado colaboracionista del FN con gestos como la visita el domingo al memorial de la shoa y la deportaci¨®n, o la participaci¨®n este lunes a un homenaje a Brahim Bourram, asesinado en 1995 por militantes ultras.
Los sondeos reflejan una ventaja c¨®moda para Macron, un exbanquero y exministro de Econom¨ªa con el presidente socialista Fran?ois Hollande. Macron sacar¨ªa un 59% de votos y Le Pen un 41%, seg¨²n dos sondeos recientes de los institutos Odoxa y Kantar Sofres-OnePoint para Le Point y Le Figaro. En ambos casos la distancia se reduce levemente, pero no lo suficiente para retirar al candidato de En Marcha! la condici¨®n de ¡°claro favorito¡±, como escribe el conservador Le Figaro.
Ambos est¨¢n obligados a ampliar su campo magn¨¦tico. Desde el centro, Macron debe atraer a los votantes de la izquierda y la derecha. Su mitin estuvo lleno de gui?os a ambos campos. Hay que reformar Europa, dijo mirando a la izquierda el candidato europe¨ªsta, y tambi¨¦n el capitalismo, a?adi¨® ¨¦l, el que quiere llevar un aire de liberalismo en el modelo estatalista franc¨¦s. Mirando a la derecha, a los jubilados que temen por su pensi¨®n, o los empresarios que no quieren sobresaltos, avis¨® del terremoto que supondr¨ªa la salida del euro y de la UE que promete Le Pen.
¡°Ma?ana, muchos de los que me apoyan combatir¨¢n mi proyecto o algunos de estos aspectos. Lo s¨¦ y lo respeto¡±, dijo a estos votantes. Pero una victoria de Le Pen, seg¨²n Macron, amenazar¨ªa la misma existencia de un debate de ideas. ¡°Mi combate¡±, a?adi¨®, ¡°es el que har¨¢ posible vuestro combate sin aplastar ni negar nuestras diferencias¡±.
Le Pen debe ampliar su radio de acci¨®n desde el rinc¨®n de la extrema derecha, el estigma de apellido y las siglas ¡ªsu padre, el patriarca ultra Jean-Marie Le Pen, fund¨® el partido¡ª que elecci¨®n tras elecci¨®n la dejan a las puertas del poder.
Las aristas m¨¢s desagradables ¡ªla ret¨®rica contra el extranjero¡ª o impopulares ¡ªla promesa de salir del euro¡ª quedaron revestidas en el mitin de Villepinte de declaraciones vagas sobre la defensa de las fronteras nacionales o la renegociaci¨®n de los tratados europeos y su eventual salida. Ella busca confederar a las personas de todo color pol¨ªtico con un mensaje transversal. La inclusi¨®n del autoproclamado gaullista Nicolas Dupont-Aignan en el ticket electoral ¡ªle ha designado como primer ministro¡ª va en este sentido.
Le Pen record¨® el discurso electoral de Hollande de 2012 en Le Bourget, cerca de Villepinte. All¨ª el entonces candidato dijo que el verdadero enemigo de Francia era la finanza, pero era un enemigo sin rostro. "Hoy tiene un rostro", dijo la candidata. "Se llama Emmanuel Macron¡±.
La palabra clave, que repiti¨® hasta tres veces: casta. Los de arriba y los de abajo. No importa que Le Pen creciese en un palacete en el barrio acomodado Saint-Cloud o que siempre haya vivido de la pol¨ªtica o en el entorno a ella.
Todo esto importa poco, o nada, a seguidores como Vincent Lecaillon, un profesor de historia y geograf¨ªa de la Alta Savoya. ¡°Esperamos que se unan a nosotros electores de izquierdas y de derecha. Patriotas¡±, dijo mientras esperaba a que Le Pen comenzase a hablar. ¡°Porque el voto de Marine es un voto de clase. En el sentido marxista. Las clases populares y las clases medias desclasadas votan a Marine¡±.
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