Alumnos de la Universidad de Texas exigen medidas de seguridad tras el ataque

Dos d¨ªas despu¨¦s del ataque con un cuchillo en la Universidad de Texas que cost¨® la vida a un alumno e hiri¨® a otros tres, los estudiantes demandan cambios a las autoridades del campus. Entre la inseguridad, la tristeza y la rabia de los momentos posteriores al asalto, los j¨®venes universitarios lamentan la falta de respuesta de las autoridades y la ausencia de medidas que garanticen su protecci¨®n ante posibles actos similares en el futuro.

Despu¨¦s de mucha especulaci¨®n, la polic¨ªa local confirm¨® que el atacante, Kendrex J. White, ¡ªuno de los alumnos¡ª ten¨ªa problemas mentales. White, estudiante afroamericano de biolog¨ªa, asesin¨® a Harrison Brown, un alumno de primer a?o. Las autoridades descartaron este mi¨¦rcoles que actuara por motivos racistas, pero eso no ha dado consuelo a los alumnos de la universidad, que ahora m¨¢s que nunca se sienten desprotegidos en el lugar donde viven, estudian, comen y pasan la mayor parte de su tiempo.

¡°Estoy asustado, enojado, porque siento que no hubo un buen sistema a nuestra disposici¨®n para responder a esto. Mi pap¨¢ estaba al tanto de todo antes incluso que me llegara el primer aviso de la polic¨ªa y la universidad¡±, explic¨® a EL PA?S Leonardo Angulo, estudiante de segundo a?o de la Universidad de Texas en Austin.

¡°Todo el mundo est¨¢ paranoico. Hubo una amenaza de bomba minutos despu¨¦s que se reportara todo esto. Hoy en mi clase de qu¨ªmica, que en general tiene m¨¢s de 200 alumnos, hab¨ªa no m¨¢s de 45 personas¡±, agreg¨®. ¡°Pas¨® a plena luz del d¨ªa, en una calle principal, al frente de la librer¨ªa donde hay miles de estudiantes. Definitivamente no me siento seguro. Desde hace tiempo que trato de estudiar en casa y no salir en la noche a menos que tenga transporte¡±.

El incidente ocurri¨® a las 13:30h del pasado lunes en el ¨¢rea del gimnasio del campus central, uno de los lugares m¨¢s concurridos del recinto, y esa es una de las razones que ha aumentado el miedo entre los alumnos. ¡°Cada mes practicamos el sistema de alarmas de emergencia, que suenan por todo el campus y esta vez no lo activaron. Se tardaron m¨¢s de 40 minutos en mandar el primer mensaje. Los estudiantes somos quienes estamos caminando todo el d¨ªa, expuestos y aqu¨ª no estamos seguros¡±, lamenta Angulo.

¡°Yo me enter¨¦ por mi novio y pas¨® un poco menos de una hora antes que la Universidad nos informara qu¨¦ pas¨® y d¨®nde. Eso a pesar que es un sitio muy p¨²blico y visitado¡±, a?ade Matilde Castro. ¡°La universidad promete que tiene recursos para ayudar a estudiantes con problemas mentales, pero el estado est¨¢ recortando el financiamiento de estos programas. Cuando ocurri¨® el ataque nos dijeron que fu¨¦ramos al centro de orientaci¨®n y apoyo, pero no tienen personal suficiente¡±.

El a?o pasado, la universidad fue el escenario de otro crimen cuando la estudiante Haruka Weiser fue asesinada en el campus. La polic¨ªa acus¨® a Meechaiel Criner, un joven de 17 a?os sin hogar que deambulaba por el campus.El ataque perpetrado por White ocurri¨® tambi¨¦n a poca distancia del edificio de administraci¨®n y de la torre del reloj, escenario de la balacera masiva m¨¢s letal en la historia de Estados Unidos, ocurrida en 1966.

El jefe de polic¨ªa de la Universidad de Texas David Carter dijo que White estuvo en un centro de salud mental y hab¨ªa sido dado de alta. "Obviamente estaba sufriendo problemas particulares", declar¨®. White est¨¢ bajo custodia y este mi¨¦rcoles fue acusado de intento de asesinato. Pero en su declaraci¨®n jurada el joven dijo que no recordaba el ataque. Cuando la polic¨ªa le pregunt¨® por qu¨¦ lo hab¨ªan detenido dijo que ¡°por empujar a alguien y al parecer usar un arma blanca¡±.

El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott dijo en una declaraci¨®n que convers¨® con el presidente de la universidad Greg Fenves y ¡°ofreci¨® todos los recursos disponibles del estado para asistir en cualquier esfuerzo¡±, pero no entreg¨® detalles.

Los estudiantes han iniciado esfuerzos propios para ayudar a las familias afectadas con el ataque. Los amigos de una de las v¨ªctimas, Stuart Bayliss, han creado una p¨¢gina para recaudar fondos que cubrir¨¢n los gastos m¨¦dicos y de recuperaci¨®n tras una cirug¨ªa de cinco horas por las pu?aladas que recibi¨® en su brazo y mano.

El director del Departamento de Seguridad P¨²blica (DPS), Joe Ortiz explic¨® que su agencia aumentar¨¢ la seguridad en el campus, incluyendo patrullas 24 horas del d¨ªa, de lunes a domingo. Sin embargo, es probable que la atenci¨®n del caso disminuya cuando se inicien las vacaciones de verano en junio.

Castro coment¨® que la universidad ya tiene programas de protecci¨®n que le dan confianza como el aumento de la presencia de la polic¨ªa, ¡°Caminata segura¡±, donde estudiantes se acompa?an unos a otros, as¨ª como la posibilidad que sea la polic¨ªa quien los traslade.

Los estudiantes aseguran, sin embargo, que la posibilidad de portar armas en el campus tambi¨¦n hes hace sentir m¨¢s desprotegidos. El a?o pasado el Estado aprob¨® una legislaci¨®n que permiti¨® esta pr¨¢ctica en las universidades, a pesar de la oposici¨®n de las autoridades acad¨¦micas. "No s¨¦ cu¨¢l de mis compa?eros tiene armas y tambi¨¦n eso crea una atm¨®sfera tensa. Cuando m¨¢s gente tiene armas, m¨¢s gente muere¡±, dijo Castro.