Urbano, proeuropeo... y laborista
El auge del partido de Corbyn se forj¨® en zonas que apoyaron la permanencia, lo que puede convertirlo en una fuerza que suavice el Brexit


Pocas veces veinte votos significaron tanto. Puede que alguno estuviera en Kensington Palace Gardens, junto a la casa de 125 millones de libras del oligarca ruso Roman Abramovich, propietario del club de f¨²tbol del Chelsea. O un poco m¨¢s al norte, en las mansiones de estuco de Notting Hill donde tienen su residencia londinense los Beckham. Quiz¨¢s en la torre Trellick, esa monstruosa joya brutalista de Erno Goldfinger, codiciada ahora por sofisticados amantes del dise?o. O en las humildes viviendas sociales que rodean a la torre Grenfell, devorada por las llamas este mi¨¦rcoles. Tuvieron que recontar tres veces. Fue la ¨²ltima circunscripci¨®n electoral del pa¨ªs en proclamar sus resultados en las elecciones del pasado 8 de junio. Pero el pasado viernes, por una diferencia de 20 votos sobre los tories, por primera vez en la historia, Kensington se convirti¨® en laborista.
La circunscripci¨®n electoral de Kensington y Chelsea era uno de los pocos bastiones conservadores del centro de Londres. Es solo uno de los cuatro esca?os de la capital que la izquierda arrebat¨® a los tories, pero tuvo una importante carga simb¨®lica en una jornada feliz para el laborismo de Jeremy Corbyn.
Las urnas volvieron a exponer un pa¨ªs polarizado. Los dos grandes partidos sumaron el 82,3% del voto: 42,3% los conservadores y 40% los laboristas. Pero si se miran los resultados en un mapa, se ver¨¢ una gran superficie azul (Partido Conservador) salpicada de peque?as manchas rojas (Partido Laborista). Eso es porque el voto laborista est¨¢ concentrado en las ciudades, donde las circunscripciones electorales, debido a la mayor densidad de poblaci¨®n, son mucho m¨¢s peque?as geogr¨¢ficamente que en las zonas rurales.
¡°Est¨¢ la grieta entre j¨®venes y mayores, entre m¨¢s y menos educados. Pero estas elecciones han confirmado que, m¨¢s que cualquier otra separaci¨®n, el gran eje que divide a Reino Unido es el que separa lo rural y lo urbano¡±, explica Tim Bale, profesor de la Universidad Queen Mary de Londres y estudioso de los partidos pol¨ªticos brit¨¢nicos. ¡°Es la misma divisi¨®n que se vio en el refer¨¦ndum del Brexit. Por un lado est¨¢ el joven urbano, cosmopolita, usuario de redes sociales, con una visi¨®n positiva sobre la inmigraci¨®n. Por el otro, la comunidad rural, m¨¢s euroesc¨¦ptica, m¨¢s contrario a la inmigraci¨®n¡±.
Theresa May ofreci¨® una imagen distante y rob¨®tica en la campa?a. Resulta interesante la imagen que escogi¨® para entrar, fugazmente, en el terreno personal. ¡°?Qu¨¦ es lo m¨¢s gamberro que ha hecho usted en su vida?¡±, le pregunt¨® un periodista de televisi¨®n. Despu¨¦s de titubear un poco, la primera ministra respondi¨®: ¡°Debo confesar que, cuando yo y mi amiga corr¨ªamos por los campos de trigo, a los granjeros aquello no les gustaba demasiado¡±.
Hija de un vicario de provincias, la primera ministra quiso subrayar ¡ªo incluso exagerar¡ª sus or¨ªgenes rurales. Ella misma representa, desde 1997, la circunscripci¨®n de Maidenhead, apacible refugio aristocr¨¢tico para huir de la ruidosa capital.
May quiso apelar a la Inglaterra media, rompiendo con la imagen de David Cameron, su predecesor en el 10 de Downing Street, que encarnaba el clich¨¦ de la privilegiada ¨¦lite londinense a los ojos del resto del pa¨ªs. Vistos los resultados, lo que logr¨® la l¨ªder conservadora fue evaporarse de las grandes ciudades.
¡°El partido ha cometido un profundo error al alejarse de los votantes metropolitanos, de los profesionales urbanos¡±, dijo el excanciller del Exchequer, George Osborne, mano derecha de Cameron y hoy director del Evening Standard, el principal diario vespertino de Londres.
El laborismo, en cambio, cada vez tiene un car¨¢cter m¨¢s urbano y, particularmente, londinense. El propio Corbyn representa la circunscripci¨®n de Islington North, h¨¢bitat de la cosmopolita bohemia burguesa capitalina. ¡°Desde 1997 el Partido Laborista lo ha hecho mejor en Londres que en el resto del pa¨ªs, mientras que los conservadores han crecido menos en la capital que a escala nacional. Incluso al comienzo de esta campa?a, cuando los sondeos le auguraban un resultado nefasto en el pa¨ªs, los laboristas manten¨ªan su poder en Londres¡±, explica Tony Travers, de la London School of Economics.
En el refer¨¦ndum sobre el Brexit, hace ahora un a?o, el eje rural-urbano result¨® tambi¨¦n decisivo. El voto por la permanencia en la UE fue m¨¢s fuerte en las ciudades y el voto por la ruptura, en el campo. Se trata, seg¨²n el profesor John Curtice, experto en comportamiento electoral de la Universidad de Strathclyde, del mismo fen¨®meno sociol¨®gico que ha marcado estas ¨²ltimas elecciones: ¡°El voto conservador y laborista se ha vuelto m¨¢s polarizado respecto al Brexit: los que optaron por salir de la UE han votado mayoritariamente a los conservadores y los que optaron por la permanencia, a los laboristas¡±, explica.
Los pocos esca?os que los conservadores arrebataron a los laboristas el pasado 8 de junio fueron en zonas donde el voto por el Brexit en el refer¨¦ndum de junio de 2016 super¨® el 60%. En cambio, las zonas que votaron por la permanencia, particularmente en la capital, apoyaron en estas elecciones al laborismo.
Esto puede tener importantes lecturas para los laboristas, de cara a las negociaciones de salida de la UE que est¨¢n a punto de comenzar. El europeo era un terreno inc¨®modo para un partido que trataba de contentar, a la vez, a la burgues¨ªa urbana cosmopolita y a la clase obrera castigada por la globalizaci¨®n. Ese delicado equilibrio produc¨ªa una postura, cuando menos, tibia con el Brexit. Pero la evoluci¨®n demogr¨¢fica de su voto, constatada en estas elecciones, tiene el potencial de convertir al laborismo en una fuerza decisiva para suavizar la ruptura con la Uni¨®n Europea.
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