Brasil emprende el mayor programa de privatizaciones en dos d¨¦cadas

Fuera del programa anunciado, que incluye una docena de aeropuertos y la Casa de la Moneda, quedan el gigante petrolero Petrobras o la poderosa banca p¨²blica. El programa, no obstante, carece de detalles, as¨ª como una estimaci¨®n total de lo que pudiera obtenerse. El Ministerio de Energ¨ªa ha precisado que solo la operaci¨®n de Eletrobras puede suponer unos 5.400 millones de euros.

La mayor ola privatizadora de las ¨²ltimas d¨¦cadas en Brasil se registr¨® durante el primero de los dos mandatos de Fernando Henrique Cardoso, presidente entre 1995 y 2003. ¡°El paquete de Temer es sin duda el mayor desde Cardoso. Incluye aeropuertos, sistemas de saneamiento, el sector el¨¦ctrico, cuestiones que contribuir¨¢n a cambiar la estructura de la econom¨ªa en los pr¨®ximos dos a?os¡±, explica Alexandre Galv?o, profesor de la escuela de negocios Fundaci¨®n Don Cabral. Algunos de los activos en venta tienen adem¨¢s una fuerte carga simb¨®lica, como la propia Eletrobras, la joya de la corona de la propuesta, creada en 1956 en pleno auge de la pol¨ªtica de desarrollismo estatal del presidente Get¨²lio Vargas.

El plan supone una escalada m¨¢s en el giro a la derecha que vive Brasil despu¨¦s del impeachment que el a?o pasado acab¨® con la presidencia de Dilma Roussef y puso fin a la etapa del PT. Pero tambi¨¦n es consecuencia de la debilidad pol¨ªtica de un presidente acosado por los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n. El ambicioso programa reformista de Temer ¡ªdel mercado de trabajo hasta las pensiones¡ª se ha visto atenuado por las resistencias del Congreso. Muchos diputados pusieron adem¨¢s un elevado precio al voto que, el pasado d¨ªa 3, permiti¨® que la C¨¢mara frenase la denuncia del fiscal general de la Rep¨²blica, Rodrigo Janot, contra el presidente, acusado de cobrar sobornos. Esas concesiones econ¨®micas de Temer a las regiones para salvar su puesto representaron un aumento del gasto p¨²blico y obligaron al Gobierno a rebajar los objetivos de su ajuste fiscal para este a?o. Ahora, uno de los objetivos del programa privatizador es precisamente recaudar dinero para aliviar las cuentas del Estado, junto a reactivar, en la medida de lo posible, una econom¨ªa que, aunque ha dejado de caer, presenta unas expectativas de crecimiento este a?o de apenas el 0,5%.

¡°Toda la motivaci¨®n del programa es la necesidad de captar recursos para el tesoro nacional. Eletrobras ya no ven¨ªa desempe?ando un papel estrat¨¦gico en el sector el¨¦ctrico, en buena medida a causa de sus problemas financieros¡±, apunta Nivalde de Castro, especialista del Instituto de Econom¨ªa de la Universidad Federal de R¨ªo de Janeiro.

El Ejecutivo afirma que su objetivo es devolver la eficiencia a una compa?¨ªa que acumula una deuda de m¨¢s de 6.000 millones de euros. El Ministerio de Minas y Energ¨ªa detalla que en los ¨²ltimos 15 a?os, Eletrobras ha absorbido recursos p¨²blicos por unos 65.000 millones de euros que ¡°podr¨ªan ser invertidos en seguridad, educaci¨®n y sanidad¡±.

La crisis econ¨®mica ha castigado las cuentas de la firma, que tampoco se ha visto libre de los m¨²ltiples esc¨¢ndalos de corrupci¨®n destapados en el pa¨ªs. A evaporar sus ganancias contribuy¨® adem¨¢s la decisi¨®n de Rousseff de rebajar por decreto un 20% las tarifas el¨¦ctricas. Rousseff, quien fue ministra de Energ¨ªa del presidente Lula da Silva, critic¨® de inmediato el anuncio de la privatizaci¨®n: ¡°Esto significa dejar el pa¨ªs a merced de los apagones, como ocurri¨® en 2001 con Cardoso. El consumidor va a pagar una cuenta de luz estratosf¨¦rica¡±.

Deuda p¨²blica

Cardoso privatiz¨® 80 empresas estatales solo en su primer mandato, entre ellas el gigante minero Vale do Rio Doce y Telebras, que ten¨ªa el monopolio en el sector de las telecomunicaciones. Como ahora, el Gobierno intentaba contener el aumento de la deuda p¨²blica. Hay un cierto consenso entre los especialistas en considerar que la privatizaci¨®n de las telecomunicaciones result¨® un ¨¦xito, pero que la urgencia por recaudar llev¨® a vender empresas como Vale por debajo de su valor de mercado.

Con la llegada de Lula se frenaron las privatizaciones y los sucesivos Gobiernos del PT centraron sus relaciones con el sector privado en acuerdos para concesiones temporales, principalmente de autov¨ªas e hidroel¨¦ctricas. Rousseff continu¨® ese modelo y, poco antes del impeachment, hab¨ªa anunciado un programa que inclu¨ªa la concesi¨®n de puertos, aeropuertos y v¨ªas f¨¦rreas con la expectativa de recaudar m¨¢s de 50.000 millones de euros. Pero casi nada lleg¨® a salir del papel.