Lista la candidatura del Partido Verde para las presidenciales en Colombia

El viernes pasado el Partido Verde oficializ¨® a su candidata presidencial para los comicios del pr¨®ximo a?o en Colombia. Despu¨¦s de una especie de encuesta-consulta realizada en m¨¢s de 40 municipios del pa¨ªs, Claudia L¨®pez se impuso a Antonio Navarro. El Partido Verde es una estructura minoritaria en el Congreso de la rep¨²blica, pero parad¨®jicamente las fuerzas alternativas son las que mejor marcan en las encuestas presidenciales, y los partidos mayoritarios tienen muchos problemas para encontrar candidatos. Pareciera que existe una crisis en la representaci¨®n pol¨ªtica, y personas como L¨®pez o Sergio Fajardo registran muy bien en las encuestas. Mientras que entre los liberales y el Partido de la U existe una gran crisis y sus candidatos no superan el margen de error.

Si bien el objetivo de Claudia L¨®pez es ganar la Presidencia, ella sabe que sola no podr¨¢ hacerlo, se requiere una coalici¨®n. Por ello desde hace algunos meses, se estableci¨® una alianza entre Sergio Fajardo, Jorge Robledo y el Partido Verde. L¨®pez y Fajardo siempre est¨¢n entre los cuatro primeros en las diferentes encuestas y una alianza entre ellos causar¨ªa un verdadero remes¨®n en la carrera presidencial. No se debe olvidar que el uribismo apuesta a ganar en primera vuelta, pues sabe que en segunda la tendr¨¢ perdida. Y el ex vicepresidente Germ¨¢n Vargas Lleras apuesta a que no exista ninguna coalici¨®n y as¨ª llegar a segunda vuelta, en la que recibir¨¢ el apoyo de todo el centro y la izquierda de forma gratuita y obviamente con eso le bastar¨ªa para ganar. Es decir, con tal de que no gan¨¦ el uribismo todos los perdedores en primera vuelta presidencial le dar¨ªan el respaldo a Vargas Lleras.

En todo caso la coalici¨®n a¨²n no est¨¢ armada, no ser¨¢ f¨¢cil llegar a un acuerdo, pero claro, ya existen conversaciones avanzadas, por lo menos se sabe que est¨¢ muy cerca la posibilidad de tener listas conjuntas a C¨¢mara y Senado, lo cual les dar¨ªa mucha fuerza en las elecciones de marzo y tambi¨¦n se sabe que existe avance en lo program¨¢tico.

Todo parece indicar que la idea de Claudia L¨®pez es la siguiente. En primer lugar, lograr unas listas fuertes a Congreso de la Rep¨²blica, que permitan pasar de 5 senadores, o 10 si se cuentan Verdes y Polo, a no menos de 14 senadores y al menos a 10 C¨¢maras regionales. Igualmente, el mismo d¨ªa de las elecciones a congreso se realizar¨ªa una gran consulta interpartidista. M¨ªnimo entre L¨®pez, Fajardo y Robledo, pero de ser posible, incluir al Partido Liberal, o al menos a Humberto de La Calle. Con ello, seg¨²n este c¨¢lculo la coalici¨®n sacar¨ªa a Vargas Lleras en primera vuelta y la segunda ser¨ªa contra el uribismo.

Sin embargo, existen dos grandes peligros: por un lado, no lograr la coalici¨®n, y por otro lado, aun logr¨¢ndola, con una consulta en marzo y siendo la primera vuelta presidencial en mayo, es muy complicado armar una buena campa?a en dos meses. Es decir, la consulta podr¨ªa significar una gran ola electoral, donde se logre aglutinar al menos cuatro millones de votantes y con ello arrastrar ese optimismo hasta mayo y ah¨ª lograr cinco millones de votos. Sin embargo, tambi¨¦n una consulta a dos meses de elecciones presidenciales puede traer una gran frustraci¨®n pol¨ªtica.

En lo que algunos analistas coinciden es que hay que buscar alguna f¨®rmula para noviembre de 2017. Es decir, L¨®pez, Fajardo y Robledo, deber¨ªan hacer la consulta o una encuesta grande y resolver quien ser¨ªa el candidato. A la vez que liberales y el partido de la U hagan lo mismo, para que la consulta en marzo sea entre dos candidatos. Con este tipo de coalici¨®n la cifra de votos podr¨ªa llegar a 6.5 millones.

Lo cierto hasta el momento es que lograr armar esta coalici¨®n no ser¨¢ tarea f¨¢cil, aunque s¨ª no hay coalici¨®n no se puede ganar. Lo m¨¢s complicado es que el tiempo se agota y tanto el uribismo como Vargas Lleras ya arrancaron con toda la maquinaria electoral. Como se dice popularmente todo est¨¢ para ¡°alquilar balc¨®n¡±.