Londres mejora su oferta sobre derechos de los ciudadanos

Apenas dos d¨ªas antes de arrancar la nueva ronda negociadora, el Gobierno brit¨¢nico ha enviado este martes a Bruselas la en¨¦sima oferta mejorada sobre los derechos de los ciudadanos directamente afectados por el Brexit (los 3,2 millones de europeos en Reino Unido y los 1,3 millones de brit¨¢nicos en suelo comunitario). Londres refuerza las garant¨ªas de que todo aquel ciudadano europeo que solicite quedarse tras el Brexit ver¨¢ aprobada su demanda, con derecho a presentar recurso si es rechazada, seg¨²n inform¨® el Ejecutivo brit¨¢nico en un comunicado. ¡°Hemos dejado claro que salvaguardar los derechos de los ciudadanos de la UE es nuestra gran prioridad en las negociaciones¡±, se?al¨® el ministro brit¨¢nico para el Brexit, David Davis. Londres promete que la solicitud no ser¨¢ m¨¢s cara que un pasaporte brit¨¢nico.

Pese a la enorme voluntad mostrada por ambas partes, el hecho de que ni siquiera este aspecto de la negociaci¨®n ¡ªel m¨¢s sencillo de pactar¡ª est¨¦ finiquitado tras casi cinco meses de contactos revela la complejidad del proceso. Tanto Londres como Bruselas tienen inter¨¦s mutuo en que este colectivo de ciudadanos permanezca donde est¨¢ ahora, pero son incapaces de encontrar un encaje que garantice su estatus. M¨¢s all¨¢ de otros flecos pendientes, el principal problema sigue siendo el papel del Tribunal de Justicia de la UE. El negociador europeo, Michel Barnier, insiste en que este ¨®rgano garantice para siempre los derechos de los ciudadanos afectados por el Brexit, mientras Davis se resiste a aceptar la autoridad de esta instancia judicial una vez Reino Unido quede fuera de la UE.

Ese ajuste de derechos de los ciudadanos ser¨¢ uno de los asuntos de la sexta ronda negociadora del Brexit, que comienza este jueves en Bruselas, con solo dos d¨ªas de duraci¨®n. Se trata de la m¨¢s breve de las mantenidas hasta ahora. Pese a todos los obst¨¢culos, el cap¨ªtulo de ciudadan¨ªa es el ¨²nico que registra avances. Los otros dos apartados que conforman la fase del divorcio van mucho m¨¢s retrasados. El primero es la frontera entre Irlanda del Norte, territorio brit¨¢nico, y la vecina Rep¨²blica de Irlanda. Los negociadores buscan ¡°soluciones imaginativas¡± para evitar barreras f¨ªsicas que retrotraigan a ¨¦pocas pasadas, pero Bruselas admite la dificultad de alcanzar esa meta.

El segundo cap¨ªtulo, a¨²n menos desarrollado, es el ajuste de cuentas que se le exige a Reino Unido antes de abandonar la UE. Bruselas ha advertido reiteradamente de que la falta de propuestas en este terreno est¨¢ empantanando la negociaci¨®n. Pese a todo, Londres se resiste a asumir unos compromisos financieros muy pol¨¦micos para su opini¨®n p¨²blica, que asumi¨® que el Brexit solo les reportar¨ªa ventajas econ¨®micas.