El dimitido Hariri asegura que volver¨¢ a L¨ªbano muy pronto
El ex primer ministro liban¨¦s habla en una televisi¨®n de su pa¨ªs pero no despeja las dudas sobre su pol¨¦mica estancia en Arabia Saud¨ª
El dimitido primer ministro liban¨¦s, Saad Hariri, abandon¨® este domingo el mutismo de los ¨²ltimos ocho d¨ªas para anunciar que ¡°regresar¨¢ muy pronto a L¨ªbano¡± desde Arabia Saud¨ª, donde sigue sin esclarecerse si est¨¢ retenido. En una entrevista con una televisi¨®n libanesa, Hariri asegur¨® que es libre de marcharse. Admiti¨® que presentar su dimisi¨®n desde Riad, ¡°no es la manera usual¡± de hacerlo, pero aleg¨® que est¨¢ ¡°tomando medidas de seguridad¡± para protegerse. Al dimitir afirm¨® que tem¨ªa por su vida.
¡°Todo lo que diga Hariri est¨¢ sujeto a la sospecha¡±, advirti¨® antes del anuncio el presidente liban¨¦s, Michel Aoun. Y asegur¨® que las visitas al primer ministro est¨¢n siendo controladas. ¡°Se le ha impedido recibir las llamadas de varios de sus familiares¡±, afirm¨®. En los ¨²ltimos d¨ªas, la residencia de Hariri ¡ªque tiene nacionalidad saud¨ª¡ª en Riad ha vivido un ajetreado vaiv¨¦n de oficiales y diplom¨¢ticos internacionales. No obstante, ninguno de ellos ha esclarecido si el exmandatario est¨¢ en arresto domiciliario desde que anunci¨® su dimisi¨®n a trav¨¦s de la televisi¨®n saud¨ª el pasado 4 de noviembre.
"Estoy aqu¨ª en el reino libre y tengo la capacidad de abandonarlo en cualquier momento, pero no quiero que mi familia vuelva a vivir lo que yo viv¨ª cuando mi padre fue asesinado", asegur¨® Hariri, en una referencia al atentado con coche bomba en Beirut que acab¨® con la vida de Rafik Hariri en 2005. El ex primer ministro asegur¨® que est¨¢ en la diana del Gobierno sirio y los grupos yihadistas como el ISIS, y que por ello se ha visto obligado a "crear una red de seguridad" en torno a su figura. Hariri asegur¨® tambi¨¦n en su primera entrevista tras la dimisi¨®n, que se est¨¢ urdiendo un plan "para meter al L¨ªbano en los ejes de conflicto" que rodean a su pa¨ªs "y por ¨®rdenes iran¨ªes".
¡°No voy a permitir que nadie lance una guerra regional contra L¨ªbano¡±, remach¨® antes de subrayar que Arabia Saud¨ª no ha intervenido en los asuntos del pa¨ªs desde que accedi¨® al cargo a finales de 2016 y apuntar al pacto de Gobierno con el partido-milicia chi¨ª Hezbol¨¢. ¡°No estoy en contra de Hezbol¨¢ como partido pol¨ªtico, pero no se puede permitir que sabotee el L¨ªbano¡±, lanz¨® Hariri, quien destac¨® que el movimiento apoyado por Ir¨¢n ¡°tiene que entender que el inter¨¦s del L¨ªbano es mantener relaciones con todos los pa¨ªses¡± de la zona.
Controvertida dimisi¨®n
Pese a todo, la entrevista no ha terminado de despejar las dudas sobre su estancia en Arabia Saud¨ª. Inmediatamente despu¨¦s de su intervenci¨®n, el responsable de Exteriores de Reino Unido, Boris Johnson, inst¨® a Hariri a regresar a L¨ªbano "sin demorarse m¨¢s". En un comunicado, Johnson explic¨® que hab¨ªa hablado con su hom¨®logo liban¨¦s, Gebran Bassil, para reiterarle su apoyo y alert¨® de que L¨ªbano no debe usarse como campo de batalla para librar los conflictos de las potencias de la regi¨®n. Una llamada de alerta en torno a la tensi¨®n entre Arabia Saud¨ª e Ir¨¢n que hizo hace un par de d¨ªas tambi¨¦n el secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson.
El presidente Aoun reiter¨® este domingo que rechaza la dimisi¨®n de Hariri y mantuvo que la rodean ¡°extra?as circunstancias¡±. Varios pol¨ªticos libaneses tambi¨¦n han denunciado que Hariri no puede moverse libremente. Desde que renunci¨® a su puesto alegando temer por su vida y arremeti¨® contra la injerencia iran¨ª en L¨ªbano, Hariri s¨®lo ha abandonado Arabia Saud¨ª en una ocasi¨®n: durante una visita rel¨¢mpago a Abu Dabi, estrecho aliado de Riad. El s¨¢bado, las televisiones saud¨ªes retransmitieron im¨¢genes en las que se le ve¨ªa en el aeropuerto de Riad, en la comitiva de bienvenida al rey Salm¨¢n, que hab¨ªa viajado a Medina.
Este s¨¢bado, los libaneses manifestaron su apoyo a su dimitido ex primer ministro. Numerosos participantes en el marat¨®n anual de Beirut portaron pancartas con mensajes pidiendo su regreso al pa¨ªs.
Su inesperado cese ha provocado un terremoto cuyas ondas se extienden en la regi¨®n. Riad ha convocado una reuni¨®n extraordinaria de la Liga ?rabe para tratar las ¡°agresiones iran¨ªes¡±. Mientras que el conflicto sirio parec¨ªa haber dado un respiro a los libaneses en la guerra fr¨ªa que libran Arabia Saud¨ª e Ir¨¢n en la regi¨®n, L¨ªbano vuelve a ocupar su tradicional rol como tablero de enfrentamientos entre las dos potencias regionales. Las victorias contra un califato a punto de extinguir junto a las derrotas sufridas por las milicias islamistas financiadas por las monarqu¨ªas del Golfo en Siria han llevado a Riad a emprender una agresiva campa?a contra su archienemigo chi¨ª.
Ambas potencias han alimentado los resentimientos confesionales entre libaneses chi¨ªes y sun¨ªes libaneses en su beneficio. Sin embargo, la indignaci¨®n levantada por las extra?as circunstancias que rodean a la permanencia de Hariri en Riad ha logrado el efecto contrario aparcando las diferencias confesionales y uniendo a pol¨ªticos y ciudadanos por el retorno de su primer ministro.
Unos 220.000 libaneses expatriados en Arabia Saud¨ª ¡ªque proveen 1.700 millones de euros de remesas anuales a su pa¨ªs¡ª temen ser expulsados ante la creciente escalada. Mientras, cuatro pa¨ªses del Golfo (Arabia Saud¨ª, Emiratos ?rabes, Kuwait y Bahr¨¦in) han instado a sus ciudadanos a abandonar de inmediato L¨ªbano. Por su parte, Hasan Nasral¨¢, l¨ªder de Hezbol¨¢, ha acusado a Riad de intentar forzar a Israel a una guerra contra su brazo armado en L¨ªbano.
Desde Damasco, los sirios siguen at¨®nicos y expectantes el desenlace del caso Hariri. ¡°S¨®lo tenemos abierta la frontera con L¨ªbano, si pasa algo estamos perdidos", comenta Mahmoud, quien regenta una tienda de alimentos en el barrio cristiano de Bab Touma. Igualmente otros temen no poder ir a visitar a sus familiares en L¨ªbano, pa¨ªs que acoge a 1,5 millones de refugiados sirios.
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