Erdogan irrita a Grecia por sus exigencias en la primera visita de un presidente turco en 65 a?os
El mandatario pide revisar las fronteras y la extradici¨®n de ocho oficiales huidos tras el golpe
En una visita hist¨®rica ¡ªla primera de un mandatario turco a Grecia desde 1952¡ª, el presidente Recep Tayyip Erdogan ha dejado la diplomacia a un lado y ha exigido a sus anfitriones la revisi¨®n de algunos puntos del Tratado de Lausana, que en 1923 traz¨® las fronteras de la Turqu¨ªa moderna y dio a Grecia el control de las islas del Egeo. Tambi¨¦n ha reclamado la extradici¨®n de ocho oficiales turcos refugiados en el pa¨ªs vecino tras el fallido golpe de Estado de julio de 2016. ¡°En Turqu¨ªa no se tortura a los presos¡±, ha declarado en referencia a las cautelas expresadas por el Supremo griego para rechazar la petici¨®n de extradici¨®n.
Con Atenas blindada como una fortaleza mediante un escudo de 2.800 polic¨ªas, cortes de tr¨¢fico y restricciones al transporte p¨²blico, as¨ª como la prohibici¨®n de cualquier protesta callejera, el viaje de Erdogan, dise?ado en teor¨ªa para reforzar la delicada, y tantas veces hostil, relaci¨®n bilateral, ha causado incomodidad, cuando no abierto enfado, entre sus anfitriones y se ha convertido en munici¨®n contra el Gobierno para la oposici¨®n. Pol¨¦mica fue tambi¨¦n una referencia del presidente turco a la nacionalidad de los imanes que ejercen en la regi¨®n de Tracia, hogar de la minor¨ªa musulmana griega (120.000 personas, casi el 1% de la poblaci¨®n) y segunda etapa de su viaje. En Lausana se definieron tambi¨¦n los derechos de las minor¨ªas, por eso la cr¨ªtica de Erdogan a que los muftis sean nombrados por el Estado griego, ha resultado igualmente embarazosa. Erdogan, al que acompa?an 200 miembros de su servicio de seguridad, contar¨¢ en su visita a Tracia con la protecci¨®n de 65 agentes turcos, el mismo n¨²mero que ha velado por ¨¦l este jueves en Atenas.
Como elefante en una cacharrer¨ªa ¡ªo sult¨¢n de visita en un millet (provincia) otomano¡ª, Erdogan ha prescindido de los matices al enarbolar la lista de agravios hist¨®ricos. Sobre el contencioso de Chipre ¡ªGrecia y Turqu¨ªa son, con Reino Unido, pa¨ªses garantes del statu quo de la isla¡ª, ha arrojado a la cara a sus anfitriones que las cosas no estar¨ªan como est¨¢n ¡ªfracasado el di¨¢logo¡ª si se hubiera elegido el plan de paz de Annan (rechazado en las urnas en 2004 por los grecochipriotas). Erdogan incluso ha aludido a la biso?ez de Tsipras, nacido en julio de 1974, el mismo mes en que el Ej¨¦rcito turco invadi¨® Chipre, a la hora de abordar un conflicto de d¨¦cadas.
En una comparecencia de prensa conjunta, Tsipras ha recurrido a la habitual diplomacia en estas lides, sin dejar de replicar a todas las demandas de su invitado. ¡°Creemos en la amistad grecoturca, la cual debe basarse en el respeto mutuo, el derecho internacional, la observancia de los tratados internacionales [en referencia al de Lausana] y la integridad territorial de los dos pa¨ªses¡±, ha resumido. A su vez, el presidente griego, Prokopis Pavl¨®pulos, que rechaz¨® cualquier revisi¨®n de Lausana, testimoni¨® a Erdogan el apoyo de Grecia a la entrada de Turqu¨ªa en la UE, con la que Ankara mantiene un pacto migratorio que ha frenado masivamente la llegada de refugiados a Grecia y que ambas partes acordaron seguir implementando. En su l¨ªnea, Erdogan ha criticado tambi¨¦n que las ayudas econ¨®micas prometidas por la UE para gestionar el flujo migratorio no se hayan concretado.
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