?D¨®nde metemos los millones de la marihuana?
California se plantea crear un banco p¨²blico solo para las ganancias del cannabis recreativo porque los bancos no las aceptan por venir de una droga ilegal en EE UU
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La actividad bancaria que se da por supuesta en cualquier negocio, como abrir una cuenta corriente, tener una l¨ªnea de cr¨¦dito, hacer transferencias o aceptar el pago con tarjeta, es impensable en el negocio de la marihuana en Estados Unidos. Es ilegal. Los bancos que aceptan un dispensario de marihuana como su cliente est¨¢n colaborando con el narcotr¨¢fico a ojos del Gobierno federal. Existe un pacto t¨¢cito entre Washington y los estados de no perseguir policialmente la marihuana legal mientras est¨¦ fuertemente regulada, pero los bancos no se la juegan. Este es el principal problema asociado al mercado de la marihuana, que ya es legal en ocho estados de EE UU y el 1 de enero de 2018 se estrena en el m¨¢s grande de ellos, California.
El secretario del Tesoro de California, John Chiang, public¨® un informe a principios de noviembre en el que advert¨ªa de que esta es una realidad que obligar¨¢ a almacenar y transportar enormes cantidades de efectivo en un mercado que, seg¨²n sus propios c¨¢lculos, puede llegar a los 7.600 millones de d¨®lares en ventas en solo dos a?os. La cuesti¨®n ya es un problema en otros estados como Colorado o Washington, donde se est¨¢n produciendo asaltos a mano armada a los dispensarios, con botines que alcanzan los 100.000 d¨®lares en efectivo.
¡°El acceso normal a los servicios bancarios es esencial para sacar a la industria del cannabis de las sobras y establecerla como una parte de la econom¨ªa de California transparente, regulada y que paga impuestos¡±, dice el informe de Chiang. El secretario del Tesoro (que est¨¢ en campa?a electoral para ser gobernador) estima que los ingresos fiscales por la venta legal de cannabis en California llegar¨¢ a los 1.000 millones de d¨®lares al a?o.
En esta situaci¨®n, la m¨¢xima autoridad de las finanzas de California hace varias recomendaciones. La primera, que entre todos los implicados se contraten servicios de seguridad privados para recolectar los impuestos en efectivo. Despu¨¦s, ser¨ªa el Gobierno de California, no los negocios, el que har¨ªa el dep¨®sito en el banco. Pero la recomendaci¨®n principal que hace Chiang es que se estudie seriamente la creaci¨®n de un banco espec¨ªfico para manejar el dinero de la industria del cannabis. El estudio debe explorar la posibilidad de que sea una instituci¨®n p¨²blico-privada y que est¨¦ montado de forma que no viole las leyes federales.
¡°Incluso el sistema mejor regulado no tendr¨¢ ¨¦xito si la industria del cannabis no se convierte en un miembro de la comunidad que paga impuestos de forma transparente y respeta la ley¡±, escribe Chiang. Sin embargo, ¡°no se podr¨¢ alcanzar una soluci¨®n definitiva al dilema bancario del cannabis hasta que el Gobierno federal lo retire de su lista de drogas peligrosas o hasta que el Congreso apruebe leyes que protejan a las instituciones financieras que sirven a los negocios del cannabis¡±.
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