Macron conf¨ªa en un nuevo impulso europeo tras el acuerdo en Alemania

El presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, conf¨ªa en un nuevo impulso en la integraci¨®n europea despu¨¦s de que las bases del Partido Socialdem¨®crata de Alemania (SPD) aprobasen un acuerdo de gran coalici¨®n con la Uni¨®n Democristiana/Uni¨®n socialcristiana b¨¢vara (CDU/CSU). La renovaci¨®n de la gran coalici¨®n en Alemania bajo el liderazgo de la canciller Merkel es ¡°una buena noticia para Europa¡±, dijo el domingo una fuente del El¨ªseo. ¡°Alemania y Francia trabajar¨¢n juntas, a partir de las pr¨®ximas semanas, para desarrollar nuevas iniciativas y hacer avanzar el proyecto europeo¡±, a?adi¨® esta fuente.

El presidente franc¨¦s nunca ha escondido que el acuerdo entre los democristianos de Merkel y el SPD era su f¨®rmula preferida. Macron es un centrista que en su gobierno ha integrado, como si fuese una gran coalici¨®n informal, a personalidades procedentes del Partido Socialista franc¨¦s y de Los Republicanos, el partido hermano en Francia de la CDU.

La gran coalici¨®n en Alemania permite desatascar la ambiciosa iniciativa del presidente franc¨¦s para la UE, hasta ahora pendiente de la resoluci¨®n de las negociaciones de Gobierno en Alemania. La iniciativa, presentada en un discurso en oto?o en la Universidad de la Sorbona, en Par¨ªs, contempla, entre otras medidas para reforzar la integraci¨®n europea, la creaci¨®n de un presupuesto com¨²n y un superministro del euro. Francia carece de la fuerza suficiente para impulsarlo sin la ayuda de Alemania, primera econom¨ªa del continente y fuerza pol¨ªtica central. Una de las prioridades de Macron desde que en mayo gan¨® las elecciones presidenciales es lo que ¨¦l llama la ¡°refundaci¨®n¡± de la UE. La situaci¨®n de provisionalidad en Berl¨ªn ¡ªunida el repliegue de Reino Unido por el Brexit; a la campa?a electoral italiana; al ensimismamiento del Gobierno espa?ol ocupado por la crisis catalana; y al giro nacionalista en varios pa¨ªses de Europa central y oriental¡ª dej¨® a Macon como principal voz europea en el mundo. Al mismo tiempo, su capacidad para imponer su agenda a escala global se ve¨ªa mermada por la ausencia de un gobierno estable en Alemania. La primera alternativa que explor¨® Merkel ¡ªuna alianza con los liberales del FDP¡ª desgradaba a Par¨ªs, por la evoluci¨®n euroesc¨¦ptica de FDP.

El nuevo gobierno en Alemania guarda paralelismos con el de Francia. En ambos pa¨ªses gobernar¨¢ una amplia coalici¨®n que va del centroizquierda al centroderecha. En ambos esta configuraci¨®n deja espacio a los partidos populistas como principal alternativa pol¨ªtica. La diferencia es que la gran coalici¨®n de Macron, aunque integra a socialdem¨®cratas, centristas y conservadores, se ha construido sobre las ruinas de los viejos partidos hegem¨®nicos. Los equivalentes en Francia a la CDU/CSU y el SPD est¨¢n hoy en la oposici¨®n.