California demanda al Gobierno de Trump por relajar los l¨ªmites de contaminaci¨®n

La demanda, presentada en los juzgados federales del Distrito de Columbia (sede del Gobierno federal) es un ataque preventivo. El pasado 2 de abril, Scott Pruitt, el pol¨¦mico esc¨¦ptico sobre el medio ambiente al que Trump ha puesto como director de la Agencia de Protecci¨®n Medioambiental, anunci¨® su decisi¨®n de rebajar los est¨¢ndares de emisiones de gases contaminantes que deber¨¢n tener los coches en el periodo de 2022 a 2025.

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Esos est¨¢ndares, los primeros en Estados Unidos, fueron negociados entre el Gobierno de Barack Obama, la industria automovil¨ªstica y California en el a?o 2012. Bajo la Ley de Aire Limpio (Clean Air Act), los fabricantes est¨¢n obligados a hacer mejoras en los veh¨ªculos para conseguir una eficiencia media de 54.5 millas por gal¨®n de gasolina (23 kil¨®metros por litro) en el a?o 2025. Es m¨¢s o menos el consumo de un Toyota Prius en la actualidad.

La industria del autom¨®vil presion¨® para rebajar estos objetivos y encontr¨® en Pruitt la respuesta a sus demandas. Sus argumentos son que ya se ha hecho un esfuerzo muy grande y que la inversi¨®n tecnol¨®gica necesaria para cumplir los objetivos fijados por Obama es demasiado costosa. Pruitt anunci¨® el pasado 2 de abril que estaba de acuerdo con la industria en que el objetivo no era realista y se propon¨ªa rebajarlo. Seg¨²n algunas estimaciones, lo dejar¨ªa en 42 millas por gal¨®n (17,8 kil¨®metros por litro).

De todas las batallas legales que California ha planteado contra el Gobierno de Trump (en un a?o ha demandado a la Administraci¨®n m¨¢s de una veintena de veces), la de la contaminaci¨®n de los coches era una de las m¨¢s evidentes. California puede fijar sus propios l¨ªmites, m¨¢s estrictos que los federales, gracias a un permiso que le concede el Gobierno dentro de la ley medioambiental. Lo que quiere hacer Pruitt es rebajar los est¨¢ndares y eliminar ese permiso, que fragmentar¨ªa el mercado de coches. Hay 12 estados que siguen lo que diga California.

En total, a la demanda se han sumado Connecticut, Delaware, Distrito de Columbia, Illinois, Iowa, Maine, Maryland, Massachusetts, Minnesota, Nueva Jersey, Nueva York, Oreg¨®n, Pennsylvania, Rhode Island, Vermont, Virginia y Washington. En la presentaci¨®n de la demanda este martes, el gobernador de California, Jerry Brown, dijo que estos estados representan el 43% del mercado automovil¨ªstico del pa¨ªs y en ellos viven 140 millones de estadounidenses.

Estos estados ¡°van a defender los est¨¢ndares de emisi¨®n del pa¨ªs para incrementar la eficiencia y reducir la contaminaci¨®n del aire¡±, dijo Brown. El gobernador lanz¨® una andanada contra la Administraci¨®n, a la que acus¨® de querer que aumente el consumo de petr¨®leo. ¡°Quieren que la gente compre m¨¢s gasolina y contamine m¨¢s. Es dif¨ªcil de creer, pero esos son los hechos. Esto no va a hacer Am¨¦rica grande, va a hacer Am¨¦rica de segunda clase y probablemente pondr¨¢ en peligro la industria automovil¨ªstica de Estados Unidos¡±.

Para Brown, la decisi¨®n del Gobierno Trump amenaza la supervivencia de los fabricantes de coches de EE UU, ya que si no hacen el esfuerzo de lograr veh¨ªculos m¨¢s eficientes ser¨¢n China y otros pa¨ªses los que desarrollen coches con cero emisiones. La jefa del Consejo de Recursos del Aire de California, Mary Nichols, record¨® que la industria ya est¨¢ en camino de conseguir esos est¨¢ndares, que fueron basados en estudios t¨¦cnicos rigurosos. La demanda dice que el Gobierno de Trump quiere eliminar esos l¨ªmites de manera ¡°arbitraria y caprichosa¡±, y que no ha aportada ninguna evidencia de que sea necesario.

Los pol¨ªticos de California, especialmente de la zona de Los ?ngeles, suelen recordar en sus discursos sobre medio ambiente que en los a?os 80 y 90 era habitual que se prohibiera a los ni?os jugar fuera de casa, o incluso ir al colegio, por picos elevados de smog. El gobernador republicano Arnold Schwarzenegger, junto con los dem¨®cratas en el Legislativo estatal, aprobaron una ley de l¨ªmites de emisiones de gases de efecto invernadero que colocaba a California a niveles europeos en lucha contra el cambio clim¨¢tico, y muy por delante del resto del pa¨ªs.

El a?o pasado, el gobernador dem¨®crata Jerry Brown consigui¨® los votos necesarios de la oposici¨®n republicana para continuar y profundizar en esos objetivos. Aparte de la trascendencia pol¨ªtica, la votaci¨®n tuvo el simbolismo de confirmar que se trata de un asunto de Estado para California, gobierne quien gobierne. El estado pretende bajar sus gases contaminantes un 40% por debajo de los niveles de 1990 para 2030. Los coches han superado a las centrales t¨¦rmicas de carb¨®n como la primera causa de contaminaci¨®n en Estados Unidos.