Alemania e Italia encabezan la lista de los pa¨ªses m¨¢s expuestos a Ir¨¢n

Bruselas comienza a esbozar el parte de da?os por la retirada estadounidense del acuerdo nuclear con Ir¨¢n. M¨¢s all¨¢ de los intereses que mantienen gigantes como la petrolera francesa Total o el fabricante aeron¨¢utico Airbus, un entramado de peque?as y medianas empresas de toda la Uni¨®n Europea se arriesgan a sufrir el impacto de las sanciones estadounidenses. Alemania, Italia, Austria, Suecia y Dinamarca encabezan la lista de las m¨¢s expuestas, seg¨²n datos de las instituciones europeas.

Tras la paz nuclear de 2015, la comunidad internacional levant¨® las sanciones que aplicaba al r¨¦gimen iran¨ª por las sospechas de que su programa nuclear tuviese fines militares. Desde entonces, Europa ha exportado a Ir¨¢n por valor de 19.000 millones de euros y ha importado algo m¨¢s de 15.000 millones, con gran presencia de medianas empresas en comercio e inversi¨®n. El impacto mortal que ha asestado Washington a este marco avalado por la ONU amenaza los flujos.

¡°El discurso del secretario Pompeo no demuestra c¨®mo salir del acuerdo nuclear har¨¢ m¨¢s segura la regi¨®n en cuanto a la proliferaci¨®n nuclear o c¨®mo nos coloca en una posici¨®n mejor para influir en la conducta de Ir¨¢n en ¨¢reas ajenas al pacto¡±, critic¨® en un comunicado la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, que alud¨ªa al anuncio del secretario de Estado, Mike Pompeo, sobre la enorme dimensi¨®n que tendr¨¢ el castigo estadounidense a Ir¨¢n.

Sus palabras debilitan aun m¨¢s la incierta potencia del escudo que ya ha comenzado a desplegar Bruselas para salvaguardar esos n¨²meros. La norma legal que exime a las empresas europeas de cumplir cualquier penalizaci¨®n aplicada por la Administraci¨®n estadounidense amenaza con convertirse en un arma de doble filo. Porque el texto contempla sanciones europeas para las firmas que acaten el castigo impuesto por Washington. Podr¨ªa darse la paradoja de que un inversor perjudicado por las medidas extraterritoriales que imponga Estados Unidos reciba tambi¨¦n represalias europeas ¡ªlas fijar¨¢n las autoridades nacionales¡ª por plegarse a ese castigo.

¡°No existe una bala de plata para proteger esos intereses. En ¨²ltima instancia, es una decisi¨®n empresarial¡±, admiten fuentes comunitarias que exigen anonimato.

Tampoco el grifo de cr¨¦dito que prepara Bruselas est¨¢ exento de riesgos. Para permitir que empresas europeas e iran¨ªes con intereses en el pa¨ªs puedan librarse de los vetos de los bancos estadounidenses, la UE va a incluir a Ir¨¢n en la lista de pa¨ªses beneficiarios del Banco Europeo de Inversiones (BEI). Este banco p¨²blico cuenta con un programa exterior dotado con 32.000 millones de euros. Pese a todo, buena parte de ese dinero ya ha sido adjudicado porque estaba presupuestado para el periodo 2014-2020.

El propio BEI, que para financiarse emite bonos tambi¨¦n en Nueva York, puede verse directamente impactado por el castigo estadounidense. El ejemplo evidencia las dificultades para aislar los intereses europeos de la decisi¨®n de Donald Trump.