Un naufragio en la costa libia deja un centenar de desaparecidos

Cada vez que suena el NAVTEX, uno de los sistemas de comunicaci¨®n para alertas de navegaci¨®n, alguien de la tripulaci¨®n del Open Arms corre a verificar su contenido. Es ah¨ª donde llegan normalmente los avisos de rescate de embarcaciones saliendo de Libia. La ma?ana de este viernes sobre las 10.30 aparec¨ªa en la pantalla el aviso desde el centro de coordinaci¨®n de salvamento de Malta: una embarcaci¨®n de goma con cerca de 100 personas a bordo hab¨ªa naufragado. El mensaje informaba de que el barco se encontraba en zona de rescate de los guardacostas libios.

M¨¢s informaci¨®n

Unas 100 personas muertas por un naufragio en las costas de Libia

Desbordada la atenci¨®n a los inmigrantes en C¨¢diz

El infierno libio de Joshua, un migrante sierraleon¨¦s rescatado por el ¡®Aquarius¡¯

El aviso no era nuevo para tripulaci¨®n, lo hab¨ªan escuchado informalmente en una conversaci¨®n entre un avi¨®n militar europeo y un barco de salvamento libio en una frecuencia de radio com¨²n. Pero solo lleg¨® como alerta oficial una hora y media m¨¢s tarde.

Aunque no hay una confirmaci¨®n oficial de que se trate de la misma embarcaci¨®n, horas despu¨¦s la guardia costera libia informaba de que se hab¨ªan recogido del mar los cad¨¢veres de tres beb¨¦s y que un centenar de personas se daba por desaparecidas tras el naufragio de una lancha neum¨¢tica en la que viajaban alrededor de 120 migrantes. Seg¨²n AFP, apenas 16 personas fueron rescatadas.

Las tripulaciones del Open Arms y del Astral, que le acompa?a como misi¨®n de observaci¨®n, han denunciado que no se haya contado con ellos para el salvamento. Estaban lejos, a unas 70 millas del lugar, y su desplazamiento hasta la zona habr¨ªa tardado cerca de siete horas. Pero ambos barcos, un buque y un velero, cuentan con lanchas, mucho m¨¢s r¨¢pidas. ¡°Con el barco era imposible llegar a tiempo, ni siquiera a toda velocidad. Pero con las lanchas habr¨ªamos llegado en un par de horas, casi el tiempo que tardaron en lanzar el Mayday¡±, lamenta el jefe de misi¨®n del Open Arms, Guillermo Ca?ardo.

Ca?ardo y el resto del equipo mantienen que se les ha ignorado deliberadamente para dejar en manos de los guardacostas libios los rescates. ¡°En ning¨²n momento nos han pedido que vayamos. Les comunicamos diariamente nuestra posici¨®n y llevamos dos a?os trabajando con el centro de coordinaci¨®n de Roma. Saben lo que hacemos. Si nos hubiesen avisado inmediatamente habr¨ªamos llegado¡±.