Juncker visita a Trump para frenar la guerra comercial
La amenaza de Washington de imponer aranceles a los autom¨®viles europeos planea sobre la reuni¨®n clave entre el presidente de la Comisi¨®n Europea y el de EE UU
Bajo la amenaza de una creciente guerra comercial con Estados Unidos, Europa deposita en el presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker, sus escasas esperanzas de lograr un entendimiento con el err¨¢tico Donald Trump. La reuni¨®n, este mi¨¦rcoles en la Casa Blanca, entre el mandatario estadounidense y el l¨ªder comunitario, servir¨¢ para calibrar el alcance de la brecha abierta entre Washington y Bruselas. Aunque la relaci¨®n econ¨®mica monopolizar¨¢ la cita, tambi¨¦n est¨¢ previsto que se aborden otros asuntos de tensi¨®n, como la seguridad transatl¨¢ntica o el acuerdo nuclear con Ir¨¢n.
Estados Unidos y Europa viven cada vez m¨¢s en universos paralelos. Mientras cuestiona el orden liberal levantado hace siete d¨¦cadas, Trump se aleja de sus socios europeos y estos admiten que deben confiar menos en la primera potencia mundial. Apenas han pasado dos semanas de la turbulenta visita del republicano a Bruselas, donde reclam¨® de malas formas a los pa¨ªses miembros de la OTAN un aumento del gasto militar, aleccion¨® a Alemania por su dependencia energ¨¦tica de Rusia y se fue afirmando que la ¡°Uni¨®n Europea es un enemigo, por lo que nos hace en el comercio¡±. La confrontaci¨®n contrast¨® con la simpat¨ªa mostrada pocos d¨ªas despu¨¦s por Trump con el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin.
La espada de Damocles que pende sobre la reuni¨®n de Trump y Juncker es la amenaza de la Casa Blanca de imponer un arancel del 20% a los veh¨ªculos importados, lo que en el caso de la UE supondr¨ªa golpear un negocio de 50.000 millones de d¨®lares con EE UU, afectando especialmente a la industria automovil¨ªstica alemana. Ser¨ªa la segunda fase de la guerra comercial iniciada en junio cuando, bajo un pol¨¦mico argumento de la seguridad nacional, EE UU activ¨® impuestos al acero (25%) y al aluminio (10%) procedentes de la Uni¨®n Europea, M¨¦xico y Canad¨¢. En paralelo, ha impuesto otros aranceles a China. La UE respondi¨® con sus propias represalias a sectores ic¨®nicos de la econom¨ªa estadounidense, como las motocicletas Harley Davidson o el whisky Bourbon.
En la v¨ªspera de su encuentro con Juncker, Trump no tuvo reparos en llamar a la UE un ¡°gran abusador¡± comercial y en burlarse, sin citar nombres, del af¨¢n negociador de algunos de los socios de EE UU para evitar nuevas barreras. ¡°Todos vienen a la Casa Blanca¡±, alarde¨® en un acto militar en Kansas City. ¡°Les dije: ¡®Vamos a imponer aranceles a vuestros coches¡¯. Ellos dijeron: ¡®?Cu¨¢ndo podemos presentarnos? ?Cu¨¢ndo podemos ir all¨ª? ?Ir¨ªa bien ma?ana?¡¯¡±, dijo, entre risas del p¨²blico.
Unas horas despu¨¦s en Twitter, el republicano abog¨® por levantar todas las barreras comerciales entre EE UU y la UE, pero la realidad es que existen enormes escollos en ambos bloques ante cualquier intento de alcanzar un acuerdo de libre comercio. En otro mensaje por la ma?ana, Trump ya hab¨ªa enfatizado su estrategia unilateral: ¡°Un pa¨ªs que ha tratado injustamente a Estados Unidos en comercio negocia un pacto justo o es golpeado con aranceles¡±.
El multimillonario neoyorquino, que lleg¨® a la Casa Blanca con un discurso proteccionista, hace la interpretaci¨®n que m¨¢s le conviene de los flujos comerciales. Por ejemplo, minimiza el impuesto del 25% que impone EE UU a las camionetas fabricadas en el extranjero y los expertos consideran inflada la cifra de 151.000 millones de d¨®lares que cita Trump de d¨¦ficit comercial con la UE.
The European Union is coming to Washington tomorrow to negotiate a deal on Trade. I have an idea for them. Both the U.S. and the E.U. drop all Tariffs, Barriers and Subsidies! That would finally be called Free Market and Fair Trade! Hope they do it, we are ready - but they won¡¯t!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 25, 2018
Consciente de la trascendencia de su intento de aplacar la guerra comercial, Juncker ha consultado la estrategia ante Trump con los principales l¨ªderes europeos y poco antes de partir hacia Washington habl¨® con la canciller alemana, Angela Merkel, el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, el primer ministro holand¨¦s, Mark Rutte, y el canciller austriaco, Sebastian Kurz. El comercio constituye el principal litigio sobre la mesa, aunque es probable que en la conversaci¨®n aparezcan otros focos de conflicto entre Bruselas y Washington.
Tanto Juncker como el resto de la Comisi¨®n Europea han rehusado avanzar cualquier contenido del debate. ¡°Lo que pretende es desdramatizar las tensiones pol¨ªticas e implicarse en un di¨¢logo abierto y constructivo¡±, explicaba el martes un portavoz de esta instituci¨®n, que pretende rebajar las expectativas sobre cualquier iniciativa concreta y enmarca el encuentro, solicitado por Trump, en el marco de una discusi¨®n franca.
Represalias europeas
Bruselas, pese a todo, tiene claro que resulta altamente probable que EE UU acabe aplicando los temidos aranceles sobre los coches europeos. Al igual que hizo tras las medidas estadounidenses contra el acero y el aluminio, la instituci¨®n europea, con competencias exclusivas sobre la pol¨ªtica comercial, adoptar¨¢ represalias si eso ocurre. De momento, Bruselas se centra en jugar esta ¨²ltima carta que le ofrece Washington. Pero tampoco olvida la suerte que corrieron otros l¨ªderes europeos (entre ellos Merkel y Macron) al tratar de disuadir, sin ¨¦xito, a Trump, por ejemplo, de retirarse del acuerdo nuclear con Ir¨¢n.
La reuni¨®n transcurrir¨¢ en dos fases. En primer lugar, habr¨¢ un encuentro bilateral ¡ªla f¨®rmula preferida por Trump¡ª entre los dos presidentes. Despu¨¦s se abrir¨¢ la discusi¨®n a otros responsables. Por el lado europeo acudir¨¢ una decena de personas, entre ellas la comisaria de Comercio, Cecilia Malmstr?m, que deber¨¢ perfilar cualquier estrategia comercial. Ocurra lo que ocurra, Europa vive con enorme pesar el momento tan bajo que atraviesa la relaci¨®n con Estados Unidos. Tras la entrevista con Trump, Juncker acudir¨¢ al Centre for Strategic and International Studies, un laboratorio de ideas, para dar una conferencia con el ilustrativo t¨ªtulo de Las relaciones trasatl¨¢nticas, en la encrucijada. Ser¨¢ un primer examen de los resultados de la cita en la Casa Blanca.
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