Ocho cuadernos manuscritos por un ch¨®fer destapan una presunta red kirchnerista de sobornos
La justicia detiene a doce exaltos cargos y empresarios vinculados a la obra p¨²blica en Argentina. Cristina Kirchner debe declarar el 13 de agosto
Todo ha quedado escrito. Ocho cuadernos peque?os, de esos que los ni?os llevan a la escuela, manuscritos con letra prolija y detalles de observador obsesivo, han destapado una presunta red de sobornos destinada a recaudar decenas de millones de d¨®lares durante las presidencias de N¨¦stor y Cristina Kirchner. El registro es obra de Oscar Centeno, un hombre hasta ahora desconocido que fue testigo privilegiado de los negocios sucios de sus jefes. Como ch¨®fer del n¨²mero dos del exministro Julio De Vido, el hombre que estuvo durante doce a?os al frente de toda la obra p¨²blica del kirchnerismo, Centeno describi¨® los viajes que realiz¨® en su auto con bolsos cargados de d¨®lares. Los pagadores, seg¨²n su testimonio, fueron grandes empresarios con contratos con el Estado. Los cobradores, exaltos cargos del Gobierno. El ch¨®fer relata incluso viajes con dinero al piso privado del matrimonio Kirchner. El juez Claudio Bonadio orden¨® este mi¨¦rcoles la detenci¨®n de una decena de personas. La expresidenta deber¨¢ declarar ante el juez el 13 de agosto.
Los ¡°bolsos con dinero K¡± fueron un mito urbano que acompa?¨® al Gobierno de los Kirchner durante buena parte de su gesti¨®n. En la madrugada del 13 de julio de 2016, seis meses despu¨¦s de asumido Mauricio Macri, el exsecretario de Obras P¨²blicas Jos¨¦ L¨®pez fue atrapado in fraganti mientras arrojaba nueve millones de d¨®lares dentro de un convento, con la intenci¨®n de ocultarlos. Se supo entonces que el mito no era tal. L¨®pez est¨¢ a¨²n preso, aunque luego no pas¨® mucho m¨¢s. Hasta este mi¨¦rcoles, cuando se conocieron ¡°los cuadernos de la corrupci¨®n¡±, como ya los llama la prensa argentina. El ch¨®fer Centeno escribi¨® c¨®mo durante diez a?os hizo de correo con m¨¢s de 56 millones de d¨®lares en efectivo. El juez Bonadio investiga sobornos por bastante m¨¢s que eso, unos 160 millones de d¨®lares, en una causa que puede crecer hasta convertirse en la versi¨®n argentina del Lava Jato brasile?o.
El detenido de mayor cargo es el jefe de Centeno, Roberto Baratta, mano derecha de De Vido. La polic¨ªa lleg¨® a su piso de Buenos Aires antes de las cinco de la ma?ana del mi¨¦rcoles. La noche anterior hab¨ªa ca¨ªdo Centeno. Durante el d¨ªa se sumaron otros diez detenidos, entre excargos y empresarios acusados de pagar coimas para obtener contratos de obra p¨²blica. Entre ellos destacaron Gerardo Ferreyra y Luis Neyra, de Electroingenier¨ªa, la empresa de energ¨ªa que m¨¢s creci¨® durante el kirchnerismo, y H¨¦ctor S¨¢nchez Caballero, de Iecsa, una constructora propiedad Angelo Calcaterra, primo del presidente Macri. Calcaterra se desprendi¨® de la compa?¨ªa apenas asumi¨® la nueva administraci¨®n.
La mancha de aceite no termina ah¨ª. Bonadio parece dispuesto a avanzar hacia la punta de la pir¨¢mide y cit¨® a declarar a todos los personajes que Centeno nombr¨® alguna vez en sus cuadernos. El 13 de agosto escuchar¨¢ a la expresidenta Kirchner, adem¨¢s de a De Vido, el exjefe de Ministros Juan Manuel Aval Medina y el exjefe de los servicios de Inteligencia, Oscar Parrilli. ¡°La hip¨®tesis de la investigaci¨®n es la asociaci¨®n il¨ªcita¡±, dijo el fiscal a cargo del expediente, Carlos Stornelli.
Los cuadernos del ch¨®fer de Baratta son el registro minucioso de la ruta del dinero negro. D¨ªa por d¨ªa, Centeno anot¨® trayectos, destinos, nombres, descripciones de personajes, el peso de las valijas, la cantidad de billetes cuando pudo contarlos y hasta el detalle de cu¨¢ntas veces su jefe Baratta fue al gimnasio. Las pruebas no llegaron directamente a la justicia, sino a tres periodistas del diario La Naci¨®n que durante meses estudiaron los textos en silencio. En abril, tras cuatro meses de trabajo, los reporteros acercaron el resultado de sus investigaciones a Bonadio y esperaron para su publicaci¨®n las ¨®rdenes de captura. Los fragmentos de los cuadernos publicados por el diario dan una idea de la dimensi¨®n y el funcionamiento de la presunta red de sobornos.
Centeno comenz¨® a escribir en 2003, en el inicio de su trabajo con Baratta, con una interrupci¨®n entre octubre de 2010, apenas muerto Kirchner, y 2013, dos a?os antes del final de la presidencia Cristina Fern¨¢ndez. ¡°Hoy, 6 de mayo de 2013 vuelvo a escribir; despu¨¦s de la muerte de N¨¦stor Kirchner que dej¨¦ de hacerlo. Pens¨¦ que despu¨¦s del fallecimiento no se har¨ªa m¨¢s el Valijero. Pero s¨ª, disminuy¨® la propia frecuencia, con la diferencia que se recolecta dinero para el ministro De Vido y el propio Baratta. No quise a anotar m¨¢s por temor a que me descubran y quede sin trabajo. Pero decid¨ª hacerlo por una reuni¨®n que tuvo el ministro De Vido, Baratta y la Sra. Presidenta Cristina F. Kirchner en la cual los instruy¨® para que sigan recaudando de las empresas para las pr¨®ximas campa?as electorales¡±, se puede leer en uno de los cuadernos.
Entre miles de detalles, hay viajes con dinero desde los pagadores hasta el piso particular de N¨¦stor Kirchner en Recoleta, en el centro de Buenos Aires, y a la residencia oficial de Olivos. Bonadio entendi¨® que el testimonio era prueba suficiente para ordenar la captura de los involucrados directos y avanzar hacia otros beneficiarios indirectos. La causa salpica como nunca a la expresidenta y hoy senadora Fern¨¢ndez de Kirchner, justo en momentos en que se especulaba con su regreso a la pelea por el liderazgo del peronismo. En octubre de 2019 hay elecciones presidenciales, y de esa batalla saldr¨¢ el candidato que enfrentar¨¢ a Macri.
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