Italia vive un repunte de agresiones xen¨®fobas

Un hombre dispara desde el balc¨®n de su casa una carabina de aire comprimido e hiere en la espalda a una beb¨¦ que va en brazos de su madre, ambas de etnia gitana, cerca de un campamento de la comunidad roman¨ª. Sucedi¨® hace unas semanas en Roma, a plena luz del d¨ªa. El agresor es un italiano que d¨ªas despu¨¦s dijo que estaba probando su arma. El presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, poco dado a comentar la actualidad en p¨²blico, esta vez dej¨® claros los l¨ªmites. ¡°Italia no se puede parecer al salvaje oeste donde cualquiera compra un fusil y dispara a una ni?a de un a?o. Esto es una barbarie y debe suscitar indignaci¨®n¡±, dijo.

Ocurre en un momento en el que las agresiones contra inmigrantes est¨¢n aumentando exponencialmente. En el ¨²ltimo mes y medio se ha registrado, de media, un ataque cada dos d¨ªas. Dos j¨®venes negros disparados con pistolas de aire comprimido este jueves en N¨¢poles y Pistoia; otro herido la semana pasada en Vicenza por un proyectil que dispar¨® un hombre que aleg¨® que ¡°hab¨ªa apuntado a una paloma¡±; un senegal¨¦s asesinado a tiros en Florencia en un crimen que a¨²n se est¨¢ esclareciendo y un largo etc¨¦tera al que se suman m¨²ltiples casos de insultos y otros ataques.

Las agresiones m¨¢s serias tienen un punto en com¨²n: el uso de alg¨²n tipo de arma, sobre todo de aire comprimido. En ese entorno, el vicepresidente y ministro del Interior, Matteo Salvini, plantea cambiar la ley para autorizar la leg¨ªtima defensa dentro de la propiedad privada en todos los supuestos. La Liga tambi¨¦n quiere levantar algunas restricciones a las armas para que se puedan comprar por correo o sin l¨ªmite de munici¨®n. En el ¨²ltimo a?o estas licencias han aumentado un 13,8%, seg¨²n el instituto CENSIS.

?Despierta sentimientos racistas y xen¨®fobos entre los italianos la ret¨®rica diaria, dura e iracunda de Salvini contra los inmigrantes? No hay un v¨ªnculo claro, pero hay dos factores evidentes. Por un lado, los ataques racistas est¨¢n viviendo un repunte progresivo. La asociaci¨®n Lunaria registr¨® 319 agresiones de enero de 2007 a abril de 2009 y 169 solo en los tres primeros meses de este a?o. Seg¨²n la OSCE, que se basa en datos reportados por la Polic¨ªa, los cr¨ªmenes de odio pasaron de 71 en 2012 a 803 en 2016, y la asociaci¨®n Vox denunci¨® 73.000 tuits contra los migrantes en 2017 frente a los 42.000 de 2016.

Adem¨¢s, el l¨ªder de la Liga mantiene el tono provocador de sus mensajes, que ahora llegan desde el Ministerio del Interior, en busca permanente del r¨¦dito electoral. Habla de ¡°invasi¨®n¡± o de necesidad de ¡°limpiezas masivas¡± y el riesgo de que este mensaje cale en la sociedad es manifiesto. ¡°El nivel de propaganda pol¨ªtica ha ayudado a difundir mensajes de hostilidad y esto ha contribuido a legitimar a nivel social comportamientos violentos o simplemente ofensivos con migrantes, refugiados y gitanos¡±, se?ala a EL PA?S Grazia Naletto, portavoz de la asociaci¨®n Lunaria.

Campa?a electoral

Las consignas de Salvini son gasolina para un fuego que comenz¨® a prender hace tiempo, al calor de una crisis econ¨®mica que acentu¨® las desigualdades. Algunos partidos como la Liga aprovecharon la falta de gesti¨®n y la crisis migratoria de los ¨²ltimos a?os para promover una campa?a del miedo contra la inmigraci¨®n. ¡°El problema es que desde la otra parte no ha habido una capacidad igual de las fuerzas pol¨ªticas democr¨¢ticas para contraponer un mensaje vencedor de igualdad y de no discriminaci¨®n¡±, apunta Naletto, y se?ala que nos encontramos ante un proceso dilatado que ha ido transformando la sociedad a nivel cultural. ¡°El papel de la pol¨ªtica y de los medios de comunicaci¨®n ha sido importante¡±, concluye.

En una campa?a electoral encendida en la que domin¨® el debate sobre inmigraci¨®n, el ataque racista de Macerata, en el este del pa¨ªs ¡ªun hombre dispar¨® desde su coche a seis inmigrantes¡ª, abri¨® una rendija de la que la ultraderecha se vali¨® para seguir lanzando mensajes que estigmatizaban a los extranjeros.

La vida de Kofi Wilson, ghan¨¦s y una de las v¨ªctimas alcanzadas por los disparos, cambi¨® aquel d¨ªa. Cuenta que en la actualidad apenas sale de casa y no consigue dormir ¡ªa¨²n depende de la medicaci¨®n para ello y para aliviar el dolor¡ª y contin¨²a viviendo en la localidad solamente porque no tiene otra opci¨®n. ¡°Tengo miedo, pero no tengo otro lugar al que ir¡±, dice. Tiene 21 a?os y lleg¨® hace dos a Italia. Sobrevivi¨® al infierno libio y a la peligrosa traves¨ªa por el Mediterr¨¢neo. No esperaba encontrar otro abismo en Italia. ¡°Vine a Europa para mejorar mi vida, no para esto¡±, repite y a?ade: ¡°Lo que ese hombre hizo es injusto, yo no hab¨ªa hecho nada, solo estaba caminando y ¨¦l cogi¨® una pistola y me dispar¨®. Me trat¨® como a un animal solo porque soy negro¡±. Tambi¨¦n le preocupa la atm¨®sfera que est¨¢ fermentando. ¡°Ahora el racismo es mayor, no s¨¦ por qu¨¦, pero cada d¨ªa es m¨¢s alto y esto no es bueno¡±, dice y relata un ejemplo cotidiano: ¡°Cuando vas a comprar algo y te dicen ¡®deja el dinero en el mostrador, que luego lo recojo yo¡¯, para no tocarte¡±. Wilson ve cada vez m¨¢s patente el rechazo. ¡°Hay mucha gente que est¨¢ apoyando al chico y le est¨¢ dando en cierto modo la raz¨®n cuando dice [a los inmigrantes] ¡®vosotros ten¨¦is que volver a vuestro pa¨ªs¡±, explicaba Giancarlo Giulianelli, abogado del agresor, al diario La Repubblica.

La asociaci¨®n de inmigraci¨®n y delincuencia es otro de los grandes libelos de la Liga que cada vez genera m¨¢s inseguridad entre los italianos. En cambio, los datos indican lo contrario. Seg¨²n la asociaci¨®n Antigone, el n¨²mero de extranjeros detenidos ha ido cayendo en picado en los ¨²ltimos a?os, a pesar de que la cifra de inmigrantes ha aumentado. En la actualidad hay 2.800 detenidos extranjeros menos que en 2008 y el 22% del total de presos procede de pa¨ªses no europeos. ¡°El actual es un debate viciado, sin rastro de sensatez ni de respeto por el dato anal¨ªtico o al parecer de los expertos, que se mueve solo en torno a las cr¨®nicas de sucesos y el miedo colectivo¡±, opina el presidente de Antigone, Patrizio Gonnella, que invita a los pol¨ªticos a ¡°verificar los datos¡±.

Pese a todo, los expertos consideran que el racismo es una tendencia minoritaria, aunque en los ¨²ltimos a?os est¨¦ creciendo. Pero con las elecciones europeas de 2019 a la vuelta de la esquina preocupa que esta inclinaci¨®n pueda dispararse.