Alemania y Turqu¨ªa inician un complejo deshielo pese a las ¡°profundas diferencias¡±

Recep Tayyip Erdogan ha desembarcado en Alemania dispuesto a ¡°pasar p¨¢gina¡± en las relaciones con un pa¨ªs con el que comparte intereses econ¨®micos y pol¨ªticos cruciales, pero con el ha mantenido un enfrentamiento abierto en los ¨²ltimos a?os. El primer encuentro de Erdogan con la canciller, Angela Merkel, ha confirmado la voluntad de acercamiento mutua, pero tambi¨¦n ha evidenciado las ¡°profundas diferencias¡± que separan a Berl¨ªn y Ankara en su concepci¨®n del Estado de derecho y la libertad de prensa, seg¨²n reconoci¨® Merkel en una comparecencia conjunta ante los medios celebrada en Berl¨ªn. Fuertes medidas de seguridad han blindado la capital alemana, en la que est¨¢n programadas multitudinarias protestas contra el mandatario turco.

Son tres d¨ªas de visita oficial, la primera en cuatro a?os, que arranc¨® el jueves y en el que la guerra siria, las relaciones comerciales y la pol¨ªtica de refugiados y los derechos humanos forman parte de la abultada agenda de una visita, que ha generado una oleada de protestas en Alemania.

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La visita tiene por objetivo escenificar el deshielo tras a?os de desavenencias, pero el mar de fondo es denso, como qued¨® en evidencia durante la comparecencia en la capital alemana. En Turqu¨ªa hay todav¨ªa cinco ciudadanos alemanes detenidos, cuando a¨²n est¨¢ fresca en la memoria colectiva la liberaci¨®n de Deniz Y¨¹cel, un periodista de Die Welt que ha pasado m¨¢s de un a?o encarcelado en Turqu¨ªa, acusado de supuesto espionaje. Las gestiones de Alemania para tratar de lograr la liberaci¨®n de los que considera prisioneros pol¨ªticos centraron las preguntas de la conferencia de prensa, a lo que Erdogan respondi¨® tajante. ¡°La independencia judicial es importante y Alemania tiene que respetarla¡±.

Erdogan ha pedido a Alemania la extradici¨®n de decenas de personas residentes en Alemania, entre ellos el periodista cr¨ªtico con el Gobierno turco Can Dundar, acusado de espionaje. ¡°Es un agente y deber¨ªa estar en la c¨¢rcel¡±. Dundar que inicialmente estaba previsto que participara en la conferencia de prensa opt¨® finalmente por no acudir.

Ankara pretende que Berl¨ªn cierre filas en la lucha contra los seguidores del predicador Fethullah G¨¹llen, al que Erdogan considera responsable del fallido golpe de Estado de hace dos a?os. Turqu¨ªa aspira a que Alemania la considere a los gullenistas organizaci¨®n terrorista. Merkel asegur¨® que ¡°nos tomamos muy en serio las evidencias que presenta Turqu¨ªa, pero necesitamos m¨¢s material¡± para poder clasificar como terrorista a la organizaci¨®n como hizo con el PKK kurdo.

Pero Merkel se esforz¨® el viernes en destacar tambi¨¦n lo que comparten y no solo lo que divide a ambos pa¨ªses. La participaci¨®n en la OTAN, la lucha contra el terrorismo, la preocupaci¨®n por la situaci¨®n en Siria, los refugiados o la situaci¨®n de los tres millones de turcos que viven en Alemania forman parte de los intereses comunes, se?al¨® la canciller en una comparecencia ante la prensa tensa.

No se olvida en Berl¨ªn que Erdogan ha llamado ¡°nazi¡± reiteradamente al Gobierno alem¨¢n

En ese contexto, Merkel adelant¨® que en octubre celebrar¨¢n una cumbre en la que participar¨¢n tambi¨¦n los presidentes de Rusia y de Francia para tratar de avanzar en la b¨²squeda de una soluci¨®n para el conflicto en Siria.

La presi¨®n de la oposici¨®n, la prensa y grupos de derechos humanos a la canciller, Merkel, para que mantenga una l¨ªnea dura durante la visita es inmensa. El encuentro llega en un momento muy delicado para Merkel. La gran coalici¨®n de Gobierno transpira inestabilidad y la propia canciller ha sufrido esta semana un duro rev¨¦s con la p¨¦rdida de apoyos de su propio partido en el Bundestag.

Pero lo cierto tambi¨¦n es que la necesidad de acercamiento es mutua. La llegada de cerca de mill¨®n y medio de refugiados a Alemania desde 2015 ha desatado una crisis pol¨ªtica que reverbera a¨²n con fuerza en Berl¨ªn. Merkel es muy consciente de que cualquier soluci¨®n para contener el ¨¦xodo de los que huyen de la guerra pasa por Turqu¨ªa, pa¨ªs que hace frontera con Siria y con el que la UE firm¨® un acuerdo en 2016 para contener las salidas de refugiados.

Por su parte, Erdogan llega en un momento de debilidad que en Alemania se percibe como de oportunidad. Las dificultades econ¨®micas con la depreciaci¨®n de la lira y el deterioro de las relaciones entre Ankara y Washington sit¨²an a Ankara en una posici¨®n negociadora desfavorable. ¡°Alemania tiene un gran inter¨¦s en una Turqu¨ªa estable¡±, dijo Merkel en la conferencia de prensa conjunta con Erdogan.

Erdogan ha sido recibido con honores militares en Alemania. Adem¨¢s del almuerzo de trabajo con la Merkel el viernes, el programa incluye un banquete en el palacio presidencial por la noche, al que algunos invitados declinaron su asistencia en se?al de protesta. El s¨¢bado, Erdogan inaugurar¨¢ una mezquita en Colonia, donde reside gran parte de la comunidad turca.

Pocas visitas de un jefe de Estado despiertan tanto inter¨¦s como la del presidente turco en este pa¨ªs. Tres millones de turcos viven en pa¨ªs, buena parte de ellos muy cr¨ªticos con la deriva antidemocr¨¢tica del Gobierno de Ankara. Sus detractores saldr¨¢n a la calle en multitudinarias manifestaciones convocadas para protestar por la visita oficial. Pero la comunidad turca es muy diversa y buena parte de ella es tambi¨¦n firme defensora de Erdogan, quien representa el orgullo de su naci¨®n de origen, frente al sentimiento de que en Alemania no han dejado de ser considerados ciudadanos de segunda.