La izquierda mexicana busca despenalizar el aborto sin un proyecto de ley ¨²nico

La ola verde parece vivir un nuevo impulso en M¨¦xico. La izquierda mexicana, ahora mayor¨ªa en las dos C¨¢maras del Congreso, se ha propuesto priorizar la despenalizaci¨®n del aborto en todo el pa¨ªs. Gran parte de los legisladores del Movimiento de Regeneraci¨®n Nacional (Morena), el partido del presidente electo, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, ha comenzado a trabajar en iniciativas para legislarlo. Sin embargo, las diferencias sobre c¨®mo deber¨ªa hacerse han sumido al partido en un enredo. Las organizaciones feministas temen que ninguna de las propuestas garantice el acceso a la interrupci¨®n del embarazo en buenas condiciones para las mujeres.

Una treintena de diputadas de Morena anunci¨® el 27 de septiembre su intenci¨®n de legislar sobre el tema. En una conferencia de prensa intentaron mostrar unidad. ¡°M¨¦xico ha modificado mucho su Constituci¨®n para garantizar los derechos de las mujeres y ha firmado tratados internacionales para ratificar eso. No puede ser que todav¨ªa se est¨¦ criminalizando a las mujeres y, peor a¨²n, que est¨¦n muriendo por abortos clandestinos y mal tratados. Tenemos la certeza que en esta legislatura [la despenalizaci¨®n] se presenta y se aprueba¡±, asegura Beatriz Rojas, una de las legisladoras que impulsa la iniciativa en la c¨¢mara baja.

M¨¦xico enfrenta un debate que se vislumbra complicado, tras el antecedente de Argentina, donde el proyecto alcanz¨®, despu¨¦s de meses de presi¨®n social, media sanci¨®n en la C¨¢mara de diputados pero termin¨® siendo rechazado por el Senado. En el pa¨ªs norteamericano, el aborto es legal ¨²nicamente en caso de violaci¨®n. En 25 de los 32 Estados es permitido en situaciones donde la vida de la madre corre peligro. Solo en Ciudad de M¨¦xico, donde fue legalizado hace once a?os, est¨¢ admitido por elecci¨®n de la mujer. Es por esto que al menos 38.000 mujeres de otros Estados han viajado a la capital entre 2007 y 2015 para interrumpir su embarazo de manera gratuita y segura, seg¨²n datos de la organizaci¨®n Grupo de Informaci¨®n de Reproducci¨®n Elegida (GIRE). Un informe del Instituto Guttermacher calculaba en 2009 m¨¢s de un mill¨®n de abortos inducidos al a?o en todo el pa¨ªs.

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Uno de los principales obst¨¢culos que puede enfrentar la despenalizaci¨®n del aborto, m¨¢s all¨¢ de la movilizaci¨®n de los sectores de la derecha, es la fragmentaci¨®n del oficialismo una vez comenzado el debate. El propio L¨®pez Obrador no ha expresado p¨²blicamente su postura y propuso que el tema se sometiera a plebiscito. La falta de apoyo p¨²blico del futuro presidente mexicano y su alianza durante la campa?a con el partido evang¨¦lico Encuentro Social incrementan las dudas sobre qu¨¦ postura tomar¨¢n los legisladores durante la discusi¨®n de la ley. ¡°Mandarlo a refer¨¦ndum quiere decir que no se legisla ni se legaliza como una disposici¨®n del Gobierno¡±, reprocha la senadora de de izquierda Patricia Mercado. ¡°No creo que Morena, como fracci¨®n parlamentaria, est¨¦ a favor pero s¨ª creo que hay una buena cantidad de mujeres y hombres de ese partido que quieren echar adelante esto¡±, dice.

A pesar del dominio que tiene Morena en las dos C¨¢maras, el espinoso tema no supone una votaci¨®n homog¨¦nea. Miroslava S¨¢nchez, presidenta de la Comisi¨®n de Salud del Congreso e impulsora de la iniciativa, vaticina una ¡°votaci¨®n personalizada¡± y no ¡°por bloques¡±. ¡°Puede haber diputados de Morena que no apoyen el proyecto¡±, admite.

Como si la controversia pol¨ªtica y social no fuera suficiente, la despenalizaci¨®n del aborto en M¨¦xico encara un problema de forma. Por un lado, las diputadas de Morena han trabajado en un proyecto para reformar el C¨®digo Penal que presentar¨¢n en las pr¨®ximas semanas. En el Senado, la c¨¢mara alta, una veintena de legisladores y legisladoras ha respaldado este martes otra iniciativa. Esta, sin embargo, pretende corregir la Constituci¨®n. Ambas propuestas llegaron sin un acuerdo previo entre los propios miembros del partido y ya han sido cuestionadas por las organizaciones feministas.

Fernanda D¨ªaz de Le¨®n, coordinadora de Pol¨ªticas y Abogac¨ªa de la organizaci¨®n feminista Ipas, refuta las dos iniciativas. La reforma constitucional no garantizar¨ªa los medios para el libre acceso al aborto seguro, mientras que una modificaci¨®n del C¨®digo Penal ser¨ªa insuficiente porque los Estados son libres de legislar sobre este tema a trav¨¦s de normas locales. La experta propone establecer constitucionalmente el aborto como un asunto federal para despu¨¦s promover la despenalizaci¨®n. ¡°Por ahora es solo un posicionamiento pol¨ªtico. Para que no quede solo en un discurso, hay que plantearlo bien y eso va a ser un proceso largo¡±, manifiesta.

El camino m¨¢s efectivo para Regina Tam¨¦s, abogada y directora de GIRE, ser¨ªa el que plantean las diputadas de Morena. ¡°No es necesaria la modificaci¨®n de la Constituci¨®n. Ser¨ªa suficiente con reformar la ley de Salud y el C¨®digo Penal¡±. Sin embargo, admite que este procedimiento implicar¨ªa tener que legislar en cada uno de los 32 Estados. ¡°Simb¨®licamente es fant¨¢stico, jur¨ªdicamente s¨ª habr¨ªa un problema porque habr¨ªa que modificar cada uno de los c¨®digos penales locales¡±, reconoce.

En un Congreso por primera vez paritario, legisladoras de otros partidos de izquierda se han mostrado dispuestas a acompa?ar un proyecto de despenalizaci¨®n. Martha Tagle, diputada de Movimiento Ciudadano, asegura que su bloque secundar¨¢ la propuesta, pero sostiene que hay que cuidar el c¨®mo para que no se utilice ¡°solamente como bandera¡±. ¡°Sabemos que [este tema] articular¨¢ grupos conservadores que ejercer¨¢n presi¨®n y que har¨¢n cabildeo. Si hay determinaci¨®n del partido mayoritario en la C¨¢mara, no tendr¨ªa que haber problema. Pero para eso se necesita determinaci¨®n¡±, dice. El destino parece claro, pero a¨²n falta definir un camino que ser¨¢ largo.