El cisma pol¨ªtico palestino intensifica los malos tratos a los disidentes
Human Rights Watch constata detenciones arbitrarias y torturas en Gaza y Cisjordania
M¨¢s de 25 a?os despu¨¦s de los Acuerdos de Oslo, que sentaron las bases para la creaci¨®n de la Autoridad Palestina, y tras una d¨¦cada de control exclusivo de Ham¨¢s sobre Gaza, el cisma pol¨ªtico entre los islamistas de la Franja y el nacionalismo de Fatah, que gobierna en Cisjordania, se ha plasmado en una rutina de detenciones arbitrarias y malos tratos sistem¨¢ticos a disidentes y militantes rivales. Un informe publicado este martes por la ONG estadounidense Human Rights Watch (HRW) constata que, a medida que se ha ido agrandando la grieta entre las dos principales facciones palestinas, se han multiplicado los arrestos y las violaciones de los derechos humanos.
Opositores pac¨ªficos, periodistas, blogueros¡ cualquiera que haya apoyado un texto cr¨ªtico en las redes sociales o que se haya afiliado a una asociaci¨®n de estudiantes enfrentada al poder se expone a acabar en el calabozo y a sufrir una paliza. ¡°All¨ª donde han afianzado su autogobierno, los partidos palestinos han desarrollado Estados policiales paralelos¡±, advierte Tom Porteus, subdirector de estudios de HRW.
¡°Los chicos tienen miedo de escribir. Ni lo intentan. No comparten sus ideas. Ni si quiera se atreven a poner ¡®me gusta¡¯ a alguien que ha escrito [en las redes sociales] una cr¨ªtica al Gobierno. Est¨¢n aterrorizados¡±, sostiene Mohamed Lafi, de 24 a?os, un rapero del campo de refugiados del Jabalia, en el norte de la franja de Gaza. Permaneci¨® entre rejas durante cinco d¨ªas en enero de 2017, acusado por las autoridades de Ham¨¢s de haber publicado un v¨ªdeo musical en el que animaba a la gente a manifestarse en contra de los continuos cortes de electricidad en el enclave costero.
Su relato es uno de los 147 testimonios recogidos por la organizaci¨®n defensora de los derechos humanos durante dos a?os entre antiguos detenidos, sus familiares y abogados, y representantes de ONG locales. HRW ha revisado im¨¢genes y grabaciones, partes m¨¦dicos y sumarios judiciales para elaborar el informe Dos autoridades, una sola v¨ªa, cero disidencias: detenciones arbitrarias y torturas bajo la Autoridad Palestina y Ham¨¢s.
Shawan Jabarin, director de la organizaci¨®n humanitaria palestina Al Haq, considera que ¡°no hay que permanecer en silencio ante la sistem¨¢tica represi¨®n de la disidencia y las torturas perpetradas por las fuerzas de seguridad palestina, a pesar del hecho de que Israel viole los derechos palestinos m¨¢s b¨¢sicos¡±. Los tratados internacionales sobre derechos humanos suscritos por el Gobierno palestino en los ¨²ltimos cinco a?os est¨¢n siendo incumplidos. Muy pocos agentes de los Servicios de Inteligencia y de la Seguridad Preventiva de la Autoridad Palestina en Cisjordania, ni de la Seguridad Interna de Ham¨¢s en Gaza han sido investigados. Ninguno ha sido sancionado por esas pr¨¢cticas, de acuerdo con la informaci¨®n manejada en el informe de HRW.
¡°Estuve un d¨ªa entero con los ojos vendados en una habitaci¨®n junto con otros cinco o diez detenidos. A veces nos dejaban sentarnos en unas sillas peque?as, pero ten¨ªamos que pedir permiso para poder hacer cualquier cosa, como hablar o dormir¡±, rememora Fuad Jarada, un periodista de 34 a?os que permaneci¨® bajo arresto durante dos meses, acusado de ¡°atentar contra la unidad revolucionaria¡± despu¨¦s de publicar en Facebook un texto cr¨ªtico con Ham¨¢s. ¡°A partir del primer d¨ªa comenzaron los golpes¡±, recapitula.
Las autoridades se amparan en una vaga legislaci¨®n que criminaliza los insultos a altos cargos para arrestar a disidentes durante semanas antes de volver a ponerles a libertad sin presentar una acusaci¨®n formal ante un tribunal. Entre enero de 2017 y agosto de 2018, la Autoridad Palestina mantuvo bajo detenci¨®n administrativa a 221 personas sin supervisi¨®n judicial durante diferentes periodos. El pasado 27 de septiembre fueron arrestados en Gaza m¨¢s de 50 militantes de Fatah, el partido liderado por el presidente palestino Mahmud Abbas. En contrapartida, las fuerzas de seguridad de Cisjordania capturaron en los d¨ªas siguientes a m¨¢s de 60 afiliados a Ham¨¢s.
¡°Un agente de paisano me recibi¨® en la puerta de la prisi¨®n de los Servicios de Inteligencia en Jeric¨®. Me vend¨® los ojos y me at¨® las manos a la espalda antes de comenzar a arrojarme contra la pared durante 10 minutos¡±, detalla Alaa Zaqeq, de 27 a?os y miembro de un grupo estudiantil de Ham¨¢s que fue detenido en Cisjordania. ¡°Me dijo que esto solo era la ¡®bienvenida¡¯ y me llev¨® a los ba?os¡±, precisa antes de dar cuenta de las torturas que sufri¨®. ¡°Al d¨ªa d¨ªa siguiente (un interrogador apodado) el Exprimidor me dijo: ¡®Te prometo que solo vas a poder salir de aqu¨ª en una silla de ruedas¡±.
En los casos documentados por Human Rights Watch las fuerzas de seguridad amenazan, golpean y fuerzan a los detenidos a permanecer durante largos periodos atados con cables o cuerdas. Las denuncias presentadas por los arrestados o sus familiares rara vez culminan con una sanci¨®n interna o el procesamiento de los agentes. Los investigadores de HRW se reunieron en Ramala, capital administrativa palestina, con mandos de los Servicios de Inteligencia para recabar su versi¨®n. Estos alegaron que solo se hab¨ªan producido casos aislados de malos trato que hab¨ªan sido investigados y cuyos responsables fueron castigados. Israel no permiti¨® el paso del equipo de la ONG estadounidense a la franja de Gaza para entrevistarse con dirigentes de Ham¨¢s. En una carta dirigida por el movimiento islamista a HRW, se aseguraba que en la Franja se respetaban los tratados sobre derechos humanos refrendados por Palestina. Ham¨¢s se neg¨®, sin embargo, a permitir una investigaci¨®n independiente.
El recurso sistem¨¢tico a la tortura en ambos territorios puede suponer un crimen contra la humanidad perseguible por la Corte Penal Internacional, a cuya jurisdicci¨®n se somete Palestina desde 2015. Por ello Human Rights Watch apela a Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y dem¨¢s pa¨ªses que sostienen a la Autoridad Palestina para que suspendan las ayudas econ¨®micas destinadas a los servicios de seguridad implicados en violaciones de los derechos humanos hasta que pongan fin a esa pr¨¢ctica y sancionen a los responsables de cometer malos tratos. La misma petici¨®n se ha dirigido a Qatar, Ir¨¢n y Turqu¨ªa, que respaldan financieramente al Gobierno islamista de Ham¨¢s en Gaza.
¡°Vivo en un pa¨ªs donde me est¨¢ prohibido expresar mis opiniones. No es el Estado con el que so?amos¡±, lamenta el activista Hamza Zbeidat, de 31 a?os, miembro de un ONG que permaneci¨® detenido en Cisjordania durante dos d¨ªas en mayo de 2016. ¡°Nuestro gran problema es que la Autoridad Palestina est¨¢ creando unas fuerzas de seguridad para controlar a la gente, pero ni siquiera controla los checkpoints?[las barreras y retenes en manos de Israel]¡±. Zbeidat os¨® escribir en Facebook un mensaje en el que animaba a ¡°combatir a la Autoridad Palestina con las misma intensidad que se combate a Israel¡±.
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