Chile planea reformar el sistema de pensiones que Brasil quiere imitar
El modelo de capitalizaci¨®n individual, vigente desde 1981, fue pionero en el mundo
El Gobierno conservador de Sebasti¨¢n Pi?era present¨® esta semana en el Parlamento su proyecto de reforma del sistema de pensiones, que busca solucionar un problema sobre el que existe un consenso transversal: las pensiones son muy bajas respecto del nivel de vida que tienen los ciudadanos en su etapa activa. La propuesta no es una contrarreforma al sistema de capitalizaci¨®n individual que debut¨® en Chile en 1981, cuando fue pionero a nivel global, y que podr¨ªa ser imitado por pa¨ªses como Brasil. Se trata, sobre todo, de una correcci¨®n, que seg¨²n la oposici¨®n de izquierda y centroizquierda es demasiado discreta y requerir¨ªa de una transformaci¨®n mayor.
La iniciativa considera, entre otros aspectos, el aumento de la tasa de cotizaci¨®n obligatoria en 4 puntos porcentuales, del 10% al 14%. Pero como se trata de un asunto complejo donde est¨¢n en juego visiones de pa¨ªs diferentes, la discusi¨®n en el Congreso ser¨¢ larga. De acuerdo a los c¨¢lculos del Ejecutivo, el debate se prolongar¨¢ al menos por todo 2019, con lo que el nuevo sistema entrar¨¢ gradualmente en vigor desde 2020.
¡°Lo que se propone es un ajuste t¨¦cnico¡±, explica el economista Hern¨¢n Cheyre, director del Instituto de Emprendimiento de la Facultad de Econom¨ªa y Negocios de la Universidad del Desarrollo. ¡°El proyecto del Gobierno insiste en que el camino eficiente para construir pensiones es la capitalizaci¨®n de los ahorros y, de hecho, lo ampl¨ªa del 10% al 14%. Esos cuatro puntos adicionales siguen yendo a cuentas individuales que se capitalizan, no entran a un sistema de reparto¡±.
El autor del sistema vigente ¨Cque debut¨® hace casi 40 a?os, en dictadura¨C, es el hermano del actual presidente chileno, el economista Jos¨¦ Pi?era, que fue ministro de Trabajo y Previsi¨®n Social de Auguto Pinochet. No era un Chicago boy ¨Clos economistas chilenos formados en la Universidad de Chicago que impulsaron el programa econ¨®mico ultraliberal durante el r¨¦gimen¨C, ¡°pero se cuadr¨® con la ideolog¨ªa¡±, explica la periodista Carola Fuentes, realizadora de la pel¨ªcula Chicago boys de 2015.
Existe alg¨²n grado de consenso en que el sistema de reparto que exist¨ªa hasta 1981 promet¨ªa un desfinanciamiento estructural. ¡°Estaba en crisis desde mucho antes. En 1958, un famoso economista socialista, An¨ªbal Pinto, escribi¨® sobre la fant¨¢stica ilusi¨®n que era el sistema previsional chileno que se hab¨ªa transformado en un monstruo de mil cabezas y que no guardaba relaci¨®n con la realidad de la econom¨ªa chilena¡±, indica Guillermo Larra¨ªn, economista de la Universidad de Chile.
Para Cheyre, la de 1981 fue una reforma de vanguardia: ¡°Mecanismos de ahorro para la previsi¨®n exist¨ªan hace mucho tiempo en el mundo, pero como complemento a los sistemas tradicionales. Lo in¨¦dito fue concebir un sistema nacional de previsi¨®n basado en el ahorro y en la capitalizaci¨®n individual de los fondos¡±. Explica las bases del modelo: ¡°Cada persona hace un esfuerzo individual de ahorro, es due?a de los recursos y una vez que termina su vida laboral activa, recibe una pensi¨®n en funci¨®n del dinero que logra acumular¡±.
Empresas privadas, las administradoras de fondos de pensiones (AFP), son las que gestionan estos ahorros: los invierten en la bolsa de valores y otros instrumentos financieros. Los afiliados pueden elegir la instituci¨®n y el fondo donde pondr¨¢n su dinero, que se diferencian seg¨²n el riesgo. Larra¨ªn explica que ¡°todo el riesgo financiero lo gestiona la AFP, pero lo sufre ¨Ctanto para arriba, como para abajo¨C, la persona. Todo el riesgo que antes ten¨ªa el Estado se lo transfirieron a las personas¡±.
No existe ning¨²n consenso sobre su funcionamiento. Cheyre, por ejemplo, se?ala que ¡°el sistema de AFP ha funcionado muy bien¡±. ¡°No se ha perdido ning¨²n peso de ning¨²n trabajador y la rentabilidad ha sido incluso por encima de lo que se pens¨® en el momento del dise?o. Los precios que cobran por el servicio a los afiliados se encuentra en un nivel que est¨¢ en la media de los pa¨ªses de OCDE¡±, dice. Existen, sin embargo, miradas cr¨ªticas.
La coordinadora No + AFP, conformada por distintas agrupaciones ciudadanas, ha logrado convocar a miles de personas en las calles del pa¨ªs para exigir que las autoridades se comprometan a cambiar el sistema que ¨Cseg¨²n reclaman¨C resulta deficiente para la inmensa mayor¨ªa de los ciudadanos. En julio de 2016, solo en Santiago de Chile unas cien mil personas marcharon para exigir un nuevo mecanismo. Fue un asunto central de la campa?a presidencial del a?o pasado, donde gan¨® holgadamente la derecha.
Poco dinero para muchos
"?Sab¨ªas que al mes de septiembre de 2018, las AFP acumulan ganancias por 864.602.359 pesos chilenos diarios [1.279.000 d¨®lares]? Estas ganancias se componen principalmente de la comisi¨®n obligatoria que deben pagar quienes cotizan. Este sistema entrega grandes beneficios a sus due?os y empresas donde invierte¡±, se?alaba hace unos d¨ªas a trav¨¦s de Twitter la Fundaci¨®n Sol, que investiga sobre el mundo del trabajo en Chile, con un enfoque cr¨ªtico de desarrollo. ¡°La mitad de las personas que cotizaron entre 30 a 35 a?os y recibieron su primera pensi¨®n en septiembre de 2018, no lograron autofinanciar un monto superior a 255.000 pesos chilenos [unos 377 d¨®lares]¡±.
El nivel de las pensiones no solo est¨¢ por debajo de las expectativas de la gente, sino que es inferior a lo que pensaban quienes dise?aron el modelo. ¡°?Fin del drama de los jubilados!¡±, se?alaba el ministro Jos¨¦ Pi?era a comienzos de la d¨¦cada de los ochenta. En las bajas pensiones ha influido el aumento de las expectativas de vida: los fondos acumulados deben distribuirse en un periodo mayor. Un segundo elemento es la densidad de cotizaciones: la ciudadan¨ªa no ahorra ininterrupidamente durante 30 o 35 a?os, como se pronosticaba. ¡°De los hombres, un 20% ha cotizado entre un 0% y 20% de todo el per¨ªodo en que trabaj¨®. En el caso de las mujeres es peor: un 35% de ellas ha cotizado entre un 0% y 20% de todo el per¨ªodo en que trabaj¨®¡±, indica Cheyre.
Larra¨ªn se?ala que ¡°los sistemas en el mundo no es que est¨¦n avanzando hacia la capitalizaci¨®n, sino que incorporando compotentes de ahorro individual en sistemas que son de reparto¡±. Respecto del debate en Chile, no es del todo optimista: ¡°Existe gente que defiende el sistema de AFP por razones ideol¨®gicas y otras que lo ataca por razones ideol¨®gicas¡±. ¡°Nos va a costar encontrar una soluci¨®n¡±, se?ala el economista.
Incentivos para extender la vida laboral
El proyecto de reforma a las pensiones presentado por el Gobierno de Pi?era considera aumentar la tasa de cotizaci¨®n de los trabajadores del 10% actual a un 14%. Estos cuatro puntos porcentuales extra ser¨¢n con cargo a los empleadores, se har¨¢ de manera gradual en ocho a?os ¨Cpara evitar efectos en la generaci¨®n de empleos¨C y ser¨¢n destinadas a cuentas individuales.
Adicionalmente, con fondos fiscales se fortalecer¨¢ el Pilar Solidario ¨Ccon que se pagan las pensiones de la gente vulnerable¨C y se introducir¨¢n beneficios especiales a las mujeres y a quienes opten de manera voluntaria por extender su vida laboral m¨¢s all¨¢ de la edad legal de jubilaci¨®n, que hoy es de 60 a?os para las trabajadoras y 65 para los trabajadores.
Si bien el 4% extra ser¨¢ administrado por nuevos actores y no necesariamente las mismas administradoras de fondos de pensiones (AFP), el principal argumento de la oposici¨®n apunta a que esta reforma mantiene intacto el sistema vigente. Como ha reconocido el Gobierno, las pensiones en Chile son bajas y su modificaci¨®n fue puesta en la agenda por el movimiento ciudadano No + AFP, que exige el reemplazo del modelo actual por un sistema de reparto, considerado por los expertos inviable en un pa¨ªs que envejece.
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