Turqu¨ªa intensifica su amenaza de intervenir en Siria tras la retirada de EE UU
Ankara lleva d¨ªas advirtiendo de que atacar¨¢ a las milicias kurdas en el norte de Siria por sus lazos con el grupo armado PKK
Hubo un tiempo en que Washington dictaba las pol¨ªticas y Ankara las aplicaba pr¨¢cticamente sin salirse del gui¨®n. Pero hace tiempo que Turqu¨ªa vuela por libre. Es m¨¢s, incluso consigue que aquella antigua relaci¨®n estrat¨¦gica funcione en la direcci¨®n contraria y ejerza influencia en ciertos estamentos de la Administraci¨®n de EE UU. En los pasillos de Ankara se ha acogido con evidente satisfacci¨®n la decisi¨®n del presidente estadounidense, Donald Trump, de retirar sus tropas de Siria, m¨¢s a¨²n cuando saben que sus presiones han tenido que ver con ello.
El ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, afirm¨® este jueves que las Fuerzas Armadas de Turqu¨ªa se est¨¢n preparando ¡°intensamente¡± para una ¡°operaci¨®n militar antiterrorista¡± en la localidad de Manbij y al este del r¨ªo ?ufrates, ¨¢reas controladas por las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias (SDF) que encabeza la milicia kurda YPG, que en los ¨²ltimos d¨ªas ha comenzado a fortificar sus posiciones. ¡°Da igual que caven trincheras o t¨²neles, cuando llegue el momento ser¨¢n enterrados en esas trincheras¡±, amenaz¨® Akar.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, hab¨ªa avisado el pasado d¨ªa 12 de que la operaci¨®n militar turca contra la milicia kurdo-siria era ¡°cuesti¨®n de d¨ªas¡± y de hecho el Ej¨¦rcito hab¨ªa comenzado a enviar tropas y artiller¨ªa a la frontera con Siria. Turqu¨ªa nunca ha ocultado su malestar por el apoyo estadounidense a las YPG, estrechamente ligadas al grupo armado kurdo PKK, que opera en Turqu¨ªa y est¨¢ incluido en las listas de organizaciones terroristas de la Uni¨®n Europea y Estados Unidos. Este apoyo, que el Pent¨¢gono defiende continuar, fue adoptado como estrategia durante el mandato de Barack Obama ante la dificultad de hallar otros aliados sobre el terreno?que luchasen de manera efectiva contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s).
Erdogan hab¨ªa matizado que una eventual invasi¨®n turca nunca tendr¨ªa como objetivo a los en torno 2.000 militares estadounidenses desplegados en el norte de Siria, pero parec¨ªa poco realista que el Ej¨¦rcito turco interviniese en la zona arriesg¨¢ndose a provocar bajas de EE UU, enfrentando as¨ª a dos pa¨ªses miembros de la OTAN. Dos d¨ªas despu¨¦s de la advertencia turca, Erdogan y Trump mantuvieron una conversaci¨®n telef¨®nica sobre la situaci¨®n. La retirada estadounidense es parte de ¡°la puesta en pr¨¢ctica del acuerdo alcanzado en esa llamada¡±, confes¨® una fuente del Gobierno estadounidense citada por Reuters. Los detalles del acuerdo se desconocen, pero su anuncio estuvo precedido de la noticia de que el Departamento de Estado de EE UU ha aprobado la venta de un sistema Patriot de defensa antimisiles, bloqueada desde hace tiempo por la pretensi¨®n turca de adquirir a Rusia un sistema parecido, el S-400, algo incompatible con los est¨¢ndares de la OTAN.
La retirada de EE UU en ¡°un plazo de 60 a 100 d¨ªas¡± ha dejado el camino libre a los planes de Siria. Los medios turcos han informado de que el repliegue estadounidense ha comenzado este jueves con la partida de numerosos camiones militares en direcci¨®n a Irak. Algo que ha supuesto un jarro de agua fr¨ªa para las aspiraciones kurdas, que consideran la decisi¨®n de Trump una ¡°pu?alada por la espalda¡±, seg¨²n un portavoz de las SDF citado por el medio ruso Sputnik, y que probablemente mueva a la milicia kurda a llegar a alg¨²n tipo de pacto con el r¨¦gimen de Bachar el Asad para evitar el ataque turco.
Ankara ya ha intervenido en dos ocasiones en Siria (la operaci¨®n Escudo del ?ufrates?en agosto de 2016 y la Rama de Olivo el pasado enero) y sus tropas, aliadas con facciones islamistas y del Ej¨¦rcito Libre Sirio, controlan la esquina noroccidental del pa¨ªs, anteriormente dominada por las YPG. Seg¨²n el analista Sedat Ergin, del diario turco H¨¹rriyet, el objetivo de la eventual nueva invasi¨®n turca no ser¨ªa conquistar todo el ¨¢rea controlada por las YPG (cerca de un tercio de Siria) sino el suficiente para interrumpir sus comunicaciones con el norte kurdo de Irak, especialmente con Sinyar, Mahmur y Qandil, lugares donde el PKK ha establecido bases y que han sido bombardeados por la aviaci¨®n turca en los ¨²ltimos d¨ªas.
La salida de EE UU de Siria, con todo, presenta una serie de problemas para Turqu¨ªa, principalmente al dejar v¨ªa libre al r¨¦gimen sirio para que recupere su autoridad sobre las partes del pa¨ªs que a¨²n no controla. De ah¨ª que este jueves, Erdogan haya recibido al presidente iran¨ª, Hasan Rohan¨ª, uno de los principales sostenes de El Asad, para evaluar la situaci¨®n.
Dentro de Turqu¨ªa, pocas voces se alzan contra los nuevos planes b¨¦licos del Gobierno, con la excepci¨®n del Partido Democr¨¢tico de los Pueblos (HDP, izquierdista y prokurdo) que los atribuye a un intento de Erdogan de ¡°consolidar el voto nacionalista¡± de cara a las importantes elecciones locales del pr¨®ximo marzo en un momento en que la econom¨ªa turca no pasa por su mejor momento y la crisis se empieza a notar en los bolsillos de las familias.
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