La l¨ªnea dura de Salvini agrieta el Gobierno italiano
El ministro del Interior, molesto con el primer ministro, se niega a acoger a los inmigrantes pactados con la UE para poner fin al ¨²ltimo conflicto humanitario
La l¨ªnea pol¨ªtica de Matteo Salvini se hace dif¨ªcil de defender 24 horas al d¨ªa si uno no es realmente Matteo Salvini. Y en el Gobierno de Italia cada vez hay m¨¢s voces inc¨®modas con su dur¨ªsima posici¨®n sobre la inmigraci¨®n: aunque solo sea por puro c¨¢lculo electoral. El martes por la noche, en el programa de m¨¢xima audiencia Porta a Porta, el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, desafi¨® al ministro del Interior y asegur¨® que era hora de permitir el desembarco de 49 migrantes que desde hace m¨¢s de dos semanas permanec¨ªan a bordo de dos embarcaciones de sendas ONG a la espera de poder tocar tierra firme y segura. Un gesto ins¨®lito que ha resquebrajado el pacto de gobierno y el acuerdo alcanzado con otros siete pa¨ªses para acoger a los pasajeros de los barcos.
Este mi¨¦rcoles por la ma?ana parec¨ªa que se hab¨ªa llegado a una soluci¨®n cuando el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, anunci¨® que permitir¨ªa desembarcar a las 32 personas a bordo del Sea-Watch 3, y las 17 del Professor Albrecht Penck. Los 49 ir¨¢n a los ocho Estados que han accedido a acogerlos: Alemania, Francia, Portugal, Irlanda, Ruman¨ªa, Luxemburgo, Holanda e Italia. Sin embargo, a ¨²ltima hora de la ma?ana, Salvini ha mostrado su rabia por las palabras de Conte y la negociaci¨®n que hab¨ªa llevado a cabo a sus espaldas. ?l, ha asegurado, no piensa autorizar ninguna entrada. "No se puede decir y hacer las cosas antes de reunirse para discutirlas. En el Gobierno hace falta hablar primero. Yo no autorizo nada. Primero toca recolocar a los 500 que faltan y luego nos ocupamos de otros ocho. As¨ª har¨ªa yo si fuera primer ministro. Pero no lo soy, as¨ª que Conte asumir¨¢ la responsabilidad pol¨ªtica de su elecci¨®n", ha amenazado Salvini desde Polonia, donde se encuentra de visita oficial.
Inmovilismo del ministro del Interior
Conte, ante el presentador Bruno Vespa y en pleno prime time, hab¨ªa abierto la grieta la noche anterior. El primer ministro, habitualmente temeroso ante Salvini, no se ech¨® atr¨¢s pese a las advertencias veladas del conductor de que eso iba a molestar a su ministro del Interior. "Este es un caso excepcional, con mujeres y ni?os que llevan m¨¢s de dos semanas en el mar. No creo que sea traicionar la l¨ªnea de coherencia del Gobierno y el sistema de Italia puede soportar a unas pocas mujeres y ni?os. Y va contra cualquier principio separar a padres e hijos. Lo importante es hacerles desembarcar en Malta. Estamos solicitando a ese pa¨ªs que lo permita. Hay un l¨ªmite a todo tipo de pol¨ªtica de rigor que no debe rebasarse", afirm¨® el primer ministro, en alusi¨®n al inmovilismo de Salvini.
Conte, que en las ¨²ltimas semanas ha aumentado su relieve pol¨ªtico y en el partido empieza a consider¨¢rsele algo m¨¢s que una comparsa de sus vice primeros ministros, lleg¨® a decir que si no se abren los puertos, los ir¨ªa a buscar ¨¦l mismo en avi¨®n. El ministro del Interior contest¨® tambi¨¦n a esa idea. "Yo el avi¨®n lo uso para otras cosas. Los migrantes pueden tirarse si quieren en parapente. Yo no tengo el control del espacio a¨¦reo".
La realidad es que una gran parte del electorado de los grillinos no aprueba el ensa?amiento de Salvini con la inmigraci¨®n. Y a las puertas de unas cruciales elecciones europeas en mayo y con la sombra de un posible adelanto electoral en Italia, el equilibrio que debe hacer el Movimento 5 Stelle (M5S) es extremo. Por eso Conte, mientras abr¨ªa la brecha, sostuvo tambi¨¦n en el plat¨® que las tesis de Salvini de impedir que las ONG desembarquen inmigrantes en Italia, "son compartidas" por el Ejecutivo de coalici¨®n.
Algunas voces en el M5S, como el presidente de la C¨¢mara de Diputados, Roberto Fico, se han opuesto ya abiertamente a la pol¨ªtica migratoria de Salvini. En torno a estos, temen en el partido, podr¨ªa llegar a articularse un frente de oposici¨®n ciudadana a este Ejecutivo. De hecho, a cuenta de la inmigraci¨®n, ya se ha movilizado un grupo numeroso de alcaldes (Mil¨¢n, Palermo, N¨¢poles¡) que se niega a aplicar el Decreto de Seguridad aprobado por el ministro del Interior que, entre otras cosas, prev¨¦ liquidar los derechos de los inmigrantes que buscan asilo en Italia.
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