La violencia provoca casi nueve millones de desplazados en M¨¦xico desde 2011
Un informe de la Comisi¨®n Mexicana de Defensa y Promoci¨®n de los Derechos Humanos alerta sobre la indefensi¨®n de cientos de miles de familias que huyen del terror en el pa¨ªs
La familia Ponce podr¨ªa ser el reflejo de un pa¨ªs entero. 94 miembros, 24 familias, tres generaciones, herederos de los fundadores de un municipio localizado en el centro-sur de uno de los Estados m¨¢s violentos de M¨¦xico, Chihuahua. Que durante d¨¦cadas se dedicaron a la ganader¨ªa y diversificaron sus negocios a diferentes formas de comercio en esta entidad. Ten¨ªan incluso una calle a su nombre. Una familia que se hab¨ªa hecho fuerte a base de permanecer unida, como un solo pueblo. Hasta una noche de 2013. "Nos juntamos todos una madrugada, todas las camionetas, nos fuimos con logotipos de misioneros, como si fu¨¦ramos a un retiro espiritual", relata un familiar. 61 miembros de la familia Ponce huyeron para siempre de aquel infierno en el que se hab¨ªa convertido su tierra.
Como ellos, 8.726.375 personas en M¨¦xico abandonaron en alg¨²n momento sus viviendas o lugares de residencia por miedo a la inseguridad desde 2011 hasta 2017, seg¨²n la ¨²ltima encuesta realizada por la oficina estad¨ªstica del pa¨ªs norteamericano, recogidaen el informe presentado este viernes por la Comisi¨®n Mexicana de Defensa y Promoci¨®n de los Derechos Humanos (Cmdpdh). La cifra no representa un diagn¨®stico oficial de la tragedia de los desplazados internos, pues los datos han sido recogidos de una pregunta espec¨ªfica (si han modificado su lugar de residencia por motivos de inseguridad) dentro de la gran encuesta anual a m¨¢s de 100.000 viviendas, pero la ha considerado el organismo como la que mejor refleja el fen¨®meno. En M¨¦xico, pese a que los altos ¨ªndices de violencia ¡ªm¨¢s de 90 homicidios al d¨ªa en el ¨²ltimo a?o¡ª han obligado a la migraci¨®n interna de cientos de miles de familias, no existe todav¨ªa un registro oficial. Y las cifras entre diferentes organismos encuestadores ¡ªque no se dedican a estudiar espec¨ªficamente el fen¨®meno¡ª reflejan diferencias que van desde 200.000 desplazados hasta esta ¨²ltima de m¨¢s de ocho millones.
El organismo ha obtenido estos datos despu¨¦s de a?os de estudio y cruce entre los cuestionarios de las diferentes bases de datos oficiales. "El objetivo de este informe es recalcar la necesidad de que se reconozca la problem¨¢tica a nivel gubernamental y se creen instrumentos legales y de apoyo institucional para la poblaci¨®n desplazada. En estos momentos se encuentran en un estado de indefensi¨®n", alerta la directora de desplazamientos internos forzados de la Cmdpdh, Brenda P¨¦rez.
El infierno del que huyen los desplazados se parece mucho al que sufri¨® la familia Ponce. En noviembre de 2010 secuestraron a un joven de 23 a?os, torturado durante cuatro d¨ªas, hasta que lograron reunir el dinero suficiente para el rescate ¡ªel centro se ha reservado difundir el monto¡ª. En febrero de 2011 intentaron asesinar a otro miembro de la familia, lo denunciaron; ocho meses despu¨¦s apareci¨® muerto. Entre 2012 y 2013 el resto de familiares sufrieron extorsi¨®n y amenazas por el mismo grupo criminal. En ese ¨²ltimo a?o, el joven secuestrado y su primo de 13 a?os fueron acribillados a balazos; el m¨¢s peque?o no sobrevivi¨®. Un mes despu¨¦s, otro de los familiares, un conocido empresario del municipio, fue asesinado dentro de su negocio de abarrotes (tiendas de conveniencia). Y ese mismo d¨ªa, el mismo cartel trat¨® de asesinar a toda su familia, que hab¨ªa abandonado ya la casa, y bale¨® a cuatro de sus empleados. Decidieron no esperar m¨¢s, sab¨ªan que si se quedaban ah¨ª el pr¨®ximo podr¨ªa ser cualquiera. Y huyeron de este peque?o municipio rural del centro-sur de Chihuahua.
Quienes huyen de sus casas por la violencia sufren graves problemas para integrarse en el nuevo destino. Seg¨²n las cifras que maneja el organismo ¡ªrecabadas por el cruce con las encuestas nacionales¡ª, la mitad de las personas que cambiaron de domicilio como medida de protecci¨®n ante la delincuencia dejaron de salir a comer o cenar por temor de ser v¨ªctimas de alg¨²n delito. Y m¨¢s del 74% optaron por no llevar nunca dinero en efectivo, seg¨²n la ¨²ltima encuesta del Instituto Nacional de Estad¨ªstica. "Adem¨¢s hemos observado una p¨¦rdida importante de las fuentes de ingreso en los 107 casos estudiados por nosotros [no hay cifras nacionales], que llegan a perder hasta un 70% de sus ganancias, pues la mayor¨ªa de ellos pierden su empleo, propiedades, tienen que continuar con sus pagos en los lugares de origen. Y todo sin recibir ning¨²n apoyo institucional", se?ala Brenda.
Otra de las observaciones que recoge el informe es que incluso en las zonas donde hubo estrategias federales de combate al narcotr¨¢fico, el ¨¦xodo no ces¨®. La guerra contra el narco emprendida por Felipe Calder¨®n (de 2006 a 2012) hizo visible este fen¨®meno, que hasta esos a?os estaba asociado a las entidades del sur, por cuestiones sociales (movimientos ind¨ªgenas), de represi¨®n pol¨ªtica (la Guerra Sucia) y desastres naturales. Una de las im¨¢genes m¨¢s representativas de los desplazamientos forzados internos por motivos de violencia fue la de una Ciudad Mier (Tamaulipas), convertida en una localidad fantasma en 2010. Las cifras del informe recogen que en 2011 casi el 40% de personas que cambiaron el lugar de residencia afirmaron que en su localidad hubo acciones militares de lucha contra los c¨¢rteles de la droga.
En los ¨²ltimos a?os, el mapa de los desplazados se ha extendido a gran parte del territorio nacional. Y las entidades que m¨¢s familias han expulsado han sido Guerrero, Sinaloa, Chihuahua, Chiapas, Oaxaca, Michoac¨¢n, Coahuila, Durango y Zacatecas.
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